×Aƚɾαραԃα ҽɳ υɳ ɱαʅ ɾσɱαɳƈҽ× ♤ʜᴀɴᴀᴋᴏxʟᴇᴄᴛᴏʀᴀxᴛꜱᴜᴋᴀꜱᴀ♤

Pelea.

— Tsukasa apareció atrás de Akane, dispuesto a perforarle el pecho, si no hubiera sido por la gran patada que le metió Wyth con la misma velocidad — ¡Ah!.

— Tsukasa controlate ya, no vas a romper un Yorishiro si no hay motivo.
— Está se quitó el saco de su traje — Rindete ya, y esto no llegara a más.

— Cariño el la última advertencia que te doy, quítate de aquí.

— No.

Y en ese momento ambos misterios se molestaron como nunca.

— Yo te dije Tsukasa... Tal vez mi fuerza te supere mil veces.. pero hay algo que me supera mil veces a mi.. — Y está cerro los ojos, dejando salir a _____ Shinigami.

— ¿Ah..? — Está se veía adormilada. — Desperté del sueño que está pasan-

— ¡Este es nuestro santuario, te prohíbo el uso del tsueshiro!. — Akane tomo su mazo para ponerle regla a Tsukasa. — ¡Mirai ahora puedes escapar!

— pero a Tsukasa se le hizo tan fácil azotar la cabeza de Akane en una mesa, haciéndolo sangrar. — he!. ¿También hay engranajes dentro de ti?. —este levanto su mano, dispuesto a perforarle el pecho. — ¿Ah?. — y una banda roja le rodeo el cuerpo.

— ¡ALTO!. — y le di una descarga eléctrica.

— ¡AAHH!. — Grito Tsukasa, pero si no antes dar una orden más. — ¡Haku joudai!.

Y al estar descuidados todos, uno de los Haku joudai atravezo el pecho de mirai, sacando el Yorishiro.

— ¡NO!. — Grite, pues todo habia sigo un fracaso total, y solté a Tsukasa.

— Que tontita eres cariño.. siempre estoy un paso más adelante que tú.— este se levantó con total normalidad, pero si se veía cansado — ahora no me interrumpas. — Su Haku joudai se acercó, dandole el Yorishiro a este.

— ¡______!. — hablo la morena y se acercó a esta.  — Ay dios.

— El segundo, el quinto, el cuarto, el sexto, el tercero era Mitsuba pero al parecer no consiguió un Yorishiro... — así que solo falta el primero, el octavo y yo.. entonces finalmente todos los yorishiros habrán desaparecido.

— Tendrás que pasar sobre mi cadáver si quieres destruirme a mi.. — hable con una voz fría, mientras volvía a ponerme en posición de ataque.

— Mira... Contigo me las arreglaré después, lo que me importa es romper este Yorishiro, y la niña de ahí dijo que si le ganaba en las escondidas rompería esto, así que en otro momento vuelvo contigo cariño. — Este comenzó a caminar hacia Yashiro, pero hanako se le abalanzó, sacando su cuchillo y clavandolo en sus ropas.

— ¡Esperen! — me puse nerviosa, pues un sentimiento nostálgico se apoderó de mi en ese momento, como si ya hubiera pasado un tipo de problema parecido hace tiempo.

— ¿Huh?, ¿Amane?, recuerda que no podemos pelear frente a ______, se lo prometimos, ¿Por qué te metes en mi camino?

— No lo hagas.. Tsukasa.

— Pero Amane.. esto también tú lo querías.

— Si destruimos todos los yorishiros, dios nos consedera un deseo.. estoy seguro que podríamos hacer realidad cualquier deseo. Pero si hacemos eso.. Tsukasa desaparecería y esta vez nunca podría volver a verte y no podría salvarte... — Hanako al revelar esto, se notaba triste y enojado a la vez.

— ¿Y que?. — a Tsukasa le dio totalmente igual.

— Hanako lo miro confundido, y después comenzó a llorar — Te odio tanto...