Nada Como Ser Miss...ter | CórdovaxVigón

Chapitre 17

¡¡AVISO!!

Dado a las circunstancias de que Omar Govea se fue a las Chivas (llora en rayada) no será cambiado ni eliminado del fic, mucho menos cualquier otro personaje en el futuro.

Motivo?

Ya intenté una vez el modificar personajes a cada rato en un fic inexistente y no funcionó, entonces para no crear confusiones, el cast del principio será el mismo hasta el final, incluyendo a los protagonistas.

Muchas gracias por cada voto, vista y comentario, no saben lo feliz que soy por eso. Disfruten el capítulo💞

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- Te estás dando cuenta que eres noticia nacional? - seguía riendo su amigo frente a él - justo cuando te dabas ya por vencido, Malagod!

- O por dios Israel, déjate de cosas y ya volvamos a trabajar - habló el michoacano para volver a fijar su vista en los informes financieros - pero, y si no fue sincero? Si solo lo dijo para que no lo molesten más?

Luis Ángel Malagón, socio mayoritario de la empresa Vitro que originalmente fue fundada en Monterrey terminaba su jornada de trabajo con la noticia de ser tendencia en redes sociales y no precisamente por ganar otro reconocimiento o entrevista en la que se destacaba su gran talento para los negocios a su corta edad.

Era alguien brillante y con un gran futuro por delante, nadie subestimaba ya las decisiones que tomaba por el bien de Vitro, aún cuando no era originario de la ciudad. Eso lo sabía cualquiera, hasta el mismo Sebastián Córdova que lo conocía desde hace años, un "amigo" del cual nunca pudo pasar a más.

Hasta este momento.

- Considero que deberías hablarle y al menos - escribía el jalisciense en su celular - mostrarle su apoyo.

- Ya te dije que NO! - remarcando cada letra - es mi última palabra.

Si bien pudiera no insistir más en el tema, una llamada podría cambiar el rumbo de su decisión, para bien o para mal.

"Señor Malagón, tiene una llamada en la línea"

- De momento no recibo a nadie, dile que estoy ocupado.

"Lo mismo dije yo, pero mencionó que es importante, sobre el cantante Sebastián Córdova"

Y pensó por unos largos cinco segundos si debía tomar esa conversación telefónica.

- Ok, podrías enlazarme?

"Por supuesto, en un momento lo comunico"

Lo hecho, pues hecho está.

- Ángel Malagón - recibiendo la llamada - con quien tengo el gusto?

"Hola, que tal! Me gustaría hacerle unas preguntas, estoy al tanto de su situación con Sebastián"

- Si, todos lo están pero necesito saber con quién hablo.

"Una disculpa, comencé de una forma mal educada"

Ángel escuchó un suspiro que le hizo sentir una vibra demasiado pesada y eso que no lo veía en persona... todavía.

"Mi nombre es Hernán Demestri, ahora, podemos hablar de algo que puede beneficiar a los dos?"

No lo hagas, no lo hagas, NO LO HAGAS!!

- Sí - haciendo señas a un confundido Israel Reyes para que saliera de su oficina - lo escucho.

Mientras tanto, tanto artista como guardaespaldas iban de regreso a la enorme del menor, está de más el decir que esa entrevista terminó dejando muy tenso el ambiente entre los dos hombres. Uno por dar declaraciones falsas y el otro por creerlas, oh dios mío! Este amor iba a darse más lento que las obras del metro antes del mundial 2026 en la ciudad.

- Entonces, Ángel Malagón - comenzaba Vigón la plática - lo conoció en el baño o qué?

- No, nada que ver, ja! - contestaba el pelirrubio sin interés - somos amigos, mis papás hacen tratos con su empresa desde hace años y ahí se ha dado el contacto.

- No cree que sea demasiado chiquillo para llevar el control de negocios? - alzando una ceja al verlo por el espejo retrovisor - es dueño de un mini super o ferretería?

- Ángel es socio mayoritario de Vitro, la empresa vidriera líder en Monterrey - soltó Córdova demasiado seco - acaso vives en una burbuja? Qué no sabes nada de aquí?

Además, por qué le volvía hablar de usted?

- Solo me enfoco en lo que me interesa, jóven Sebastián - volviendo a mirar hacia el frente contestando de la misma forma - y ya vamos llegando a su casa.

Maldita sea esa entrevista, maldita sea esa locutora y maldita sea esas ganas de querer decir lo celoso que se siente de saber el nunca llegar a ser suficiente para alguien como ese hombre que había robado su corazón para después hacerlo trizas.

Lo peor es que todo sucedió sin ser nada.

- Juan Pablo, no estás oyendo? - rodaba sus ojos al sentirse agotado - el porton abrió, ahora avanza y déjame en la puerta principal.

- Sí, joven Guzmán Sánchez - poniendo la camioneta en marcha.

Después de llegar al punto indicado, Vigón bajó de asiento piloto y dio la vuelta para abrir la puerta trasera derecha, dando paso a un serio pero a la vez sorprendido Sebastián por ser mencionado con sus apellidos reales. No sabía como tomarlo: Feliz? Triste? Confundido?

Quisiera averiguarlo pero tenía miedo.

- Bueno Juanpi, muchas gracias por hoy - agradecía Sebas con la cabeza agachada - puedes retirarte a descansar - empezando a caminar con pasos lentos y poder recostarse en su amplia cama - buenas noches!

No podía desear más en que este día ya termine, pensaba que no tenía motivos pero la indiferencia de su guardaespaldas le dolía y eso no lo soportaba

- SEBASTIÁN!! - escuchando pasos en las escaleras - espera.

Detuvo su paso y giro al escuchar el grito de Juan Pablo.

- Buenas noches para ti también - se acercó un poco más a él de lo normal con una pequeña sonrisa - descansa y que sueñes bonito.

Y sucedió lo inesperado, Juanpi le dió un beso en la mejilla para después irse corriendo hacia el portón y desaparecer de su vista.

Lo había besado! No en los labios pero al fin de cuentas un beso era UN BESO.

- Eres todo un caso Juan Pablo Vigón - se reía con él mismo al tocar su mejilla - pero así me gustas.

Observó por última vez el camino por el que se había ido su guardaespaldas y finalmente entró a su casa. Se quitó sus sneakers Dior favoritos y se puso unas simples pantuflas, subió rápido a su cuarto para tomar su libreta y lápiz para composiciones, bajo de nuevo con la misma velocidad y dirigirse a la aún silenciosa sala principal, se sentó en el amplio sillón, abrió una de sus pocas hojas blancas disponibles y comenzó a escribir.

Casi nadie lo sabía pero él amaba escribir canciones, contar en sus letras los sentimientos que habían dentro de su ser y después poder cantar frente a miles de personas dichas estrofas. Hoy era el día para crear una nueva historia de amor y darle su voz con una melodía perfecta.

"Si supiera lo que yo siento, cada vez que se acerca a mí, con oírle decir te quiero sería feliz"

- Podría algún día decirme te quiero o te amo?

"Díganle por favor, que es amor lo que ahora siento, que sin querer me ha robado todo el corazón"

- Podré algún día decirle que yo lo amo?

"Díganle por favor, que he escuchado decir al viento, que de tanto esperar también muere el amor"

- Solo el tiempo... - suspirando al sentir más inspiración recordando su sonrisa - solo el tiempo lo dirá.

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Ando feliz porque ya tengo luz y decidí actualizar ✨

Disfruten lo que puedan...

Gracias por leer ❤️