XLIV: 400 dólares

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Azerbaiyán, Bakú
27 de Abril 2023

-¿Estás segura de que quieres hacerlo?

-Charles, estoy muy segura.

-Estas a tiempo de arrepentirte.

-Ninguno de nosotros va a juzgarte si decides que no es lo que quieres, Dottie, quiero... Queremos que estés segura de todo lo que hagas.

-Les voy a demostrar que puedo y quiero hacer esto.

La castaña acomodó su cabello en una coleta alta y los fulminó con la mirada, desde hace un par de semanas había dejado de usar sus lentes de contacto pues desde que nacieron sus hijos dormía poco y el tiempo que tenía no iba a desperdiciarlo en estarlos quitando y poniendo.

-Cielito, no debes sentirte presionada.

-Basta ya, no soy de cristal.

Charles asintió al ver como estaba comenzando a perder la paciencia, no iba a insistir más, America vio como Christian se abrían paso entre camarógrafos, maquillistas, fotógrafos y parte del staff de la prensa y del equipo de medios de Red Bull

Ni Horner ni Montenegro tuvieron que decir nada pues se conocían tan bien como para saber que es lo que el otro quería hacer o decir por lo que solo se abrazaron, los presentes pudieron ver que tan grande y fuerte era el lazo entre los dos.

-Todo está arreglado, espero que la cumplan su palabra de evadir toda pregunta que profundice con lo sucedido.

-Sigo sin comprender porque la prensa está interesada en su caso, deberían dejarla tranquila.

El francés estaba molesto por el show que amaban armar sobre todo y más considerando que lo de America era un tema sumamente delicado. Él solía ser imprudente pero conocía los límites de las cosas en las podía y no podía meterse pero para la prensa no había límites, quería hacer una función de circo con todo.

-Todos atrajeron la atención a ella y la gente espera una declaración, ver que esta completa, ustedes mejor que nadie sabe lo exigentes que son los fans.

Christan y Alice habían organizado todo para poder supervisar las preguntas para que se evite tocar temas personales como el compromiso, su relación cercana con los Leclerc o sobre sus hijos a los que habían acordado con todos mantener lo más privados que pudieran.

-Alice se quedará contigo porqué tengo que hacer otras cosas. -Vio como la joven madre abrió la boca para hablar, sabía que estaba preocupada.- Me voy a asegurar que los niños cuiden bien de sus niñeros.

-Gracias.

Sergio, Charles y Pierre decidieron que se quedarían detrás de cámaras junto a Alice en caso de que la ahora pelinegra los necesitará pues la prensa parecía piraña con el tema.

Tardaron unos minutos más y la puerta se abrió dejando entrar a Katherina, la reportera italiana con la que había discutido en el pasado, la rubia al verla sonrió un poco pero la ignoró por completo para enfocarse en los tres pilotos que esperaban cruzados de brazos sin perder detalles de lo que hacía la chica.

Podían ver como buscaba confort en la gran sudadera gris que llevaba puesta, cualquiera que fuera listo sabría que pertenecía a Leclerc pero en esa ocasión no se la había dado de alguna forma romántica, fue más bien porque uno de los pequeños habían decidido que su madre debía pasar por lo mismo que Norris cuando le vomitaron la ropa y no tuvo tiempo de ir a cambiarse porque el tiempo lo tenían justo así que Charles decidió ayudarla.

La reportera no entendía porque la cadena la había enviado a ella pues solo era reportera de deportes, no de noticias ni de espectáculos y temía quedarse sin empleo si se equivocaba o hacia una pregunta mal, Hedworth había amenazado con acabar con la carrera de cualquiera que dijera algo que pusiera en una situación incómoda a la que parecía ser la protegida de todos.

Pequeñas cosas [Charles Leclerc|Lando Norris]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora