Dominio Omega [Omegaverse BL]

Capítulo 32

¡¡Feliz cumpleaños a los que cumplen el primero de julio!! comento que actualizaré dos capítulos hoy porque es mi regreso, pero a partir de lunes solo un capítulo subiré, ¡espero les guste!

La primera parte será editada con guiones cuando termine esta segunda parte. 

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En el mundo de la moda existían ciertos sacrificios que cualquier hombre o mujer aceptaba o seguía sin objetar nada. Después de que el pago fuera hecho y que alabaran su belleza, el resultado por tanto esfuerzo no parecía denigrante.

—¡Niña, niña concentrate!

Sin embargo, muchas veces las cosas se tornaban difíciles, y ahora que Lior estaba más consciente de la gente que rondaba a su alrededor, el nivel de dificultad para muchos aumentaba.

—¡Alto, alto! ¿Qué te pasa linda? ¡Necesitó que te mu.e.vas!

En el centro de un parque, sobre el que se pintaba un celaje anaranjado, la tarde amenazaba con ser fría. Con fuertes vientos y bajas temperaturas, un grupo de modelos se amontonaba entre ellas esperando el turno para ser fotografiadas. Cada una vestía ropa ligera, que parecía ser de la campaña de verano, y tiritaban una contra la otra mientras que se sujetaban el pelo.

—¿No crees que Carolina está algo extraña?

—Lo sé, la veo demasiado distraída.

—Dejen de cuchichear niñas, es hora de trabajar.

Apretándose contra el abrigo, Cindy volteó a ver a las modelos y luego le extendió el chocolate caliente a su jefe, que miraba fijamente hacia el frente.

—Con poca azúcar y mucha leche—. Lior lo tomó en silencio. —¿Quiere algo más?

—Nada, gracias.

Asintiendo, Cindy se quedó quietecita a su lado. Algo sobre lo que estaba sucediendo era extraño y Lior no hacía nada para revelar sus razones. Él nunca se tomaba la tarea de hacer algo como esto, de venir a una sesión fotográfica. Siempre dejaba ese tipo de cosas al mando de Sheila y del departamento de moda, por lo que era algo fuera de la rutina incluso para ella.

Y de hecho, un CEO como él tenía cosas más importantes que hacer que estar presente ahí, pero algo que Lenoxx no sabía explicar movió a su jefe a que se presentará, cosa que si lo pensaba bien, solo alimentó los nervios y el miedo de todos los presentes cuando apareció en el lugar.

—¿Quién sigue?, por favor que no sea tan desastrosa como la chica de allí.

Carolina respiró profundo y se alejó del grupo con una que otra vena saltando sobre su frente. Sus feromonas empezaron a deslizarse de su cuerpo en algún punto de la sesión y sus camaradas alfas se acercaron a llamarle la atención.

¿Qué demonios te pasa chica? Se dijo a si misma Carolina, ¿realmente estas así por...su presencia?

Viendo por encima de su hombro, afilados ojos rojos chocaron contra los de Carolina. Muy pequeño en comparación a ella que medía 1.83, pero aun asi erguido y esbelto de forma intimidante, Lior bebía de su chocolate mientras que la observaba fijamente.

¿Él no estará aquí por mi cierto?

Ese pensamiento logró ser su consuelo por el resto del día. Imaginó que le hablaría en privado en algún momento y la confrontaría a sabiendas de que la perra de Lorenzo le dijo algo, pero como el día terminó y Conte se fue sin decir ni una palabra, Carolina pensó que el tema había quedado zanjado.

Claro que se equivocaba.

—¡Siguiente!

La alta y oscura figura de Lior la miró fijamente sobre su puesto detrás del escenario, y entonces, mientras todos susurran sobre la presencia del CEO, Carolina empezó a sudar frío cuando se dio cuenta que ese día él había regresado a otra sesión para vigilarla de nuevo.