El omega caminaba apresurado por los pasillos de aquel hospital; llevando casi a arrastras al alfa. Sus ojos buscaban desesperados a Lisa y Hoseok.
Se imaginaba lo peor, su angustia aumentaba en cada paso que daba por aquel lugar. El olor a desinfectante y medicina; golpeaba sus sentidos.
— Amor... — JungKook frenó sus pasos.
— Muévete, o suéltame... Pero no me frenes. — Intentó soltarse del agarre del alfa.
JungKook atrajo el cuerpo ajeno, y lo apresó en un abrazo.
— Tranquilízate. — Pidió posando una de sus manos en la acanelada mejilla.
— No puedo, es que... mi bebé. — Sus ojos se nublaron por las lágrimas.
— Respira, el cachorro estará bien. — Le besó los parpados.
— Estoy muy asustado... — Inhaló profundo. — Es que nuestro cachorro jamás se ha enfermado. Es increíble, pero ha sido un bebé muy sano... y ahora, Lisa lo trajo aquí...
— Entiendo, pero tienes que tranquilizarte, o cuando el cachorro te vea; se va a angustiar.
TaeHyung juntó su frente con la ajena, y asintió, el alfa acarició la espalda y le regaló un besito en la nariz.
Él también estaba angustiado, el tener a su cachorro en aquel lugar, y ver al omega tan inquieto; hacía que su corazón bombeara más rápido, sus pensamientos eran un torbellino. Pero debía mostrarse sereno, ser un pilar para su asustado amor fugitivo.
El omega se encontraba envuelto en aquella burbuja de seguridad y paz que le regalaba el alfa. Su nariz se sumergió en aquel cuello, y se embriagó con la fragancia.
— ¿Estás mejor?
— Sí, ahora continuemos... — Se apartó del alfa, y giró para seguir el camino. — ¡Lisa!
— Tae. — Caminó hacia el omega.
— ¿Qué le pasó? ¿Por qué lo trajiste? — La tomó de los hombros.
— Hola, Lisa. — Saludó Jeon.
— Señor Jeon... — Inclinó un poco su cabeza en medio del saludo. — Tae, el pequeño tigre no quería comer, pronunció muy pocas palabras, estuvo toda la mañana en su habitación...
— Algo más le sucedió, dime...
— Rayadito, déjala hablar. — Lo abrazó por la espalda.
— Cuando fui a ofrecerle el almuerzo, lo escuché quejarse, temblaba envuelto en las sábanas, y cuando lo descubrí; nuestro niño estaba ardiendo en fiebre y los llamaba...
— ¿Dónde está...?
— En la habitación al final del pasillo...
— Gracias, Lisa. — Expresó Jeon antes de salir a alcanzar a su omega que había iniciado a correr.
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𝐌𝐢 𝐏𝐞𝐪𝐮𝐞𝐧̃𝐨 𝐑𝐚𝐲𝐚𝐝𝐢𝐭𝐨. ||+18|| 𝐊𝐨𝐨𝐤𝐓𝐚𝐞.
RomanceJeon JungKook, un híbrido tigre blanco de bengala se cruza en el camino de Kim TaeHyung, un tigre siberiano que corría en busca de seguridad. Pasarán la noche juntos sin imaginarse que aquel encuentro dejará un pequeño regalo. Jeon jamás pe...