🐯 Cap 23

1.9K 213 155
                                        

Las hojas de papel se deslizaban con delicadeza por sus dedos. Los ojos oscuros detallaban cada palabra, una sonrisa se dibujó en los delgados labios. Con su cuerpo empujó la silla hacia atrás, acomodó sus cabellos, sobó el puente de su nariz, y le dio la última ojeada a la información.

Juntó sus manos por sobre sus labios, y disfrutó del rugido de su tigre interior.

— ¿Satisfecho?

— No te imaginas cuanto — habló sintiendo la humedad de sus belfos en los nudillos —. Sigue con el trabajo — cerró la carpeta —, ya sabes, distancia y control. No quiero ninguna falla.

— Eres peligroso.

— Solo estoy protegiendo a los que amo — cruzó sus piernas, posando su tobillo sobre la rodilla de su pierna izquierda —. Quien busca, encuentra... Y pues buscó tanto, que obtendrá lo que merece.

— ¿Algo más que desees?

— No, por ahora...

— Gracias al cielo, desde que apareció tu omega, me haces trabajar mucho.

— No te quejes, te estás ganando el pan.

— Querido amigo y jefe, por tu culpa ya me están saliendo canas.

— Las canas te salieron por el miedo que le tienes a mi omega.

— No es miedo... es respeto.

— Sí, respeto— expresó sarcástico —. Por eso cada vez que te lo cruzas, sales corriendo.

— ¿Y qué quieres que haga? Por tu culpa ese omega me jaló las orejas, y casi me deja sin pelo.

— Jack, te dije que debías pararle a la broma.

— Y yo qué iba a saber que tu omega se pondría como loco por hablar de tu aguijón...

— ¿Cómo que aguijón?

Ay no, ya valí madres de nuevo...

La puerta se abrió, y los ojos de JungKook se iluminaron como una noche de luna llena. Jackson giró levemente su rostro, rogando al cielo que estuviera confundiendo aquella voz. Pero era imposible, al ver la expresión de su amigo, sabía que no había confusión.

Intentó no demostrar que se le iba a salir el corazón, fingió que no había dicho nada, y se levantó del asiento.

— Hola, Jack... — TaeHyung se cruzó de brazos.

Noooo, que deje de mirarme así, relaja los brazos, no quería mencionar el aguijón de JungKook.

— Mi fugitivo amor, primero salúdame a mí.

— ¿Por qué lo haría? — Sus ojos seguían los movimientos de Jackson.

— Ho-hola TaeHyung, omega de mi JungK... digo, omega de mi jefe, digo... ¿Qué digo?

— Jackson, relájate.

— Que no se relaje — TaeHyung caminó hacia el escritorio — ¿La reunión que tenían era para hablar de tu aguijón, abejorro rayitas? — Inquirió gruñendo levemente sin apartar su vista de Jackson.

— Yo me retiro...

Avanzó unos pasos hasta que sintió que una presencia lo seguía.

— No huyas, ¿qué te dije sobre mencionar las carnes... gruesas... del señor rayitas?

— Perdón, fue sin querer.

— Jackson, la carpeta.

— Cierto... — esquivó a TaeHyung, y volvió al escritorio — con permiso, seguiré con mi trabajo.

𝐌𝐢 𝐏𝐞𝐪𝐮𝐞𝐧̃𝐨 𝐑𝐚𝐲𝐚𝐝𝐢𝐭𝐨. ||+18|| 𝐊𝐨𝐨𝐤𝐓𝐚𝐞.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora