Julia y Fermín, Fermín y Julia, mejores amigos desde la cuna, inseparables incluso cuando Fermín se fue a Barcelona para cumplir su sueño. Nunca han perdido el contacto, aunque cada uno estuviese en una punta de España. Julia siempre se ha guardado...
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- Tengo malas noticias - le digo a Fermín, estamos hablando por videollamada ambos recién levantados en la cama.
- ¿Malas noticias? - me pregunta arrugando sus cejas, sin entender por donde voy.
- Ayer fui a la autoescuela para que me dieran fecha de examen...
- ¿Y...?
- Me han dado fecha para el miércoles 10 - le digo haciendo una mueca.
- ¿Entonces si pasamos mañana a la semifinal no vienes? - me pregunta serio y yo asiento - Joder, parece que la vida no quiere que vengas a ningún partido, ¿no puedes ir a la siguiente fecha de examen?
- La próxima fecha es dentro de un mes así que no - le digo simplemente.
- Vaya Juls parece que tampoco te afecta mucho el no venir - dice al verme normal, la realidad es que si voy a ir lo único es que quiero que sea una sorpresa.
- No salgas con esas, claro que quiero ir pero, ¿qué hago? no puedo hacer nada, ¿le digo a la DGT que retrase el examen? - le digo defendiendome.
- Sí, puedes presentarte al examen en la siguiente fecha - me soluciona rápidamente.
- No quiero dejarlo, estoy preparada ya, me he llevado todo este tiempo haciendo test y si espero al mes que viene voy a estar otro mes más con eso - le digo, la verdad es que si que hago el examen pero lo hago el lunes antes del partido de semifinales.
- Pues nada haz lo que quieras, sino quieres ver a tu novio cuando llevas como un mes sin verlo allá tú - me dice molesto.
- No es que no quiera, es que no puedo - me defiendo.
- Hace más el que quiere que él que puede, así que si quisieras te buscarías cualquier manera de venir - me dice cabreándose.
- Voy a pasar por alto este comentario donde dejas caer que no te quiero ver porque no me apetece discutir cuando estás a 2.000 kilómetros y no sé cuando nos vamos a ver - le digo intentando controlarme.
- Podrías saber cuando nos vamos a ver, pero no te apetece - suelta poniéndome de los nervios, de verdad que cuando se pone así no puedo con él.
- Mira Fermín, cuando te relajes y pares de soltar gilipolleces por la boca me llamas - le digo antes de colgarle.
Dejo el móvil en la mesita de noche y bajo a la cocina para desayunar.
- Buenos días - me dice mi hermano Nico que esta desayunando.
- Buenos días - le digo sería, me ha cabreado la conversación con Fermín.
- Uy, ¿te has levantado con el pie izquierdo? - me dice mi hermano que ha captado que no estoy de humor.
- No, me acaba de cabrear Fermín - le digo simplemente echandome el café en mi taza y sentandome enfrente suya.
- ¿Qué ha pasado si se puede saber? - me pregunta alzando sus cejas.
