Capítulo 21

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Capítulo 21: Autopsia.

Riana

Papá le contó a Alessandro lo sucedido, no entiendo cual fue la necesidad de hacerlo, quizás quería confirmar que lo que le había contado era mentira.

Solo sé que fue un grave error.

Ese mismo día Alessandro irrumpió en mi habitación con su cara roja de ira.

Me tomó más fuerte que las veces anteriores, desquitó su rabia conmigo como una forma de castigarme.

Meses después comencé a tener náuseas y al hacerme una prueba casera confirmó lo que más temía, salió positivo.
Esas dos rayas me tormentaron durante días.

No sé que hacer, si voy con el doctor de la familia, le contara todo a papá, en una clínica también avisarán a mis padres.

Hablé con una amiga que se practicó un aborto y me recomendó tomar pastillas abortivas.
Me llevó bastante tiempo decidir y al final espero haber tomado la decisión correcta.

Le pedí que comprara las pastillas de Misoprostol para evitar que me reconozcan en la farmacia.

Hoy lo haré, si todo sale bien, en un mes quemaré ésta carta.

Miro la fecha escrita en la esquina superior.

10 de enero de 2024.

Fue dos días antes de su muerte.

Joder.

Me acuesto en el piso mirando el techo con mil pensamientos en mi mente, tratando de resolver la situación.
Me siento de golpe cuando una idea viene a mi cabeza.

Miro a Malik durmiendo en nuestra cama y salgo de la habitación sin hacer ruido, tomo las llaves del auto que están en el estante y me dirijo rumbo a la mansión de mis padres.

Son las tres de la mañana pero Papá se encuentra con su amante y mamá siempre se queda despierta esperando que vuelva.
Antes pensaba que ésta sería mi vida de casada, pero me tocó un esposo maravilloso que es capaz de cortarse una mano ante la idea de ser infiel.

Saludo a los guardias y entro en la sala de estar.

Mamá se encuentra reclinada en un sofá, tomando una copa de vino que a juzgar por la cantidad en la botella no es la primera copa de la noche.

- Leonardo ¿Eres tú? - pregunta sin darse la vuelta - llegaste temprano.

- Soy yo, mamá.

- Riana ¿Qué haces aquí?

- Necesito hacerte unas preguntas y tienes que responder con la verdad, estoy cansada de tantas mentiras.

Asiente, tiene los ojos rojos y desenfocados.

¿Será cierto eso de que los borrachos y los niños dicen siempre la verdad?

Vamos a comprobarlo.

- Mamá - empiezo con voz suave para no alterarla- ¿En qué estado encontraron a Aria?

Deja la copa sobre la mesa con manos temblorosas.

- Había mucha sangre por todos lados - un par de lágrimas se le escapan- estaba en la bañera inconsciente, no sabía como ayudarla.

Lo último lo susurra con la voz quebrada.

- ¿Es cierto que fue un suicidio? - temo la respuesta.

-No, fue producto de un aborto mal practicado, el tomar demasiadas pastillas le generó una hemorragia. Los doctores dicen que el meterse en la bañera ayudó a controlarla y que si la hubiéramos encontrado antes tenía más posibilidades de salvarse.

Sé que se debe estar culpando todos los días.

- No fue tú culpa, mamá.
Le pongo la mano sobre la rodilla tratando de tranquilizarla.

- Tu padre sabía y no me contó, si hubiera hablado conmigo todo ésto se podría haber evitado.
Su excusa era que Aria había roto el pacto de Omertà y que se merecía todas las consecuencias que tuviera.

El Omertà es un código dentro de la Cosa Nostra, consistía en que sus integrantes guardaran silencio sobre lo que sucedía y tienen prohibido hablar con personas fuera de ella.

Pero Aria solo tenía dieciséis años y había vivido toda su vida sin tener idea de lo que se hacía en la Cosa Nostra y por ende sus tratados.
No se merecía que le dieran la espalda solo por vivir en la oscuridad.

Dios, cada segundo que pasa me siento más culpable.

- ¿Por qué dijeron que fue un suicidio?

- Tu padre no quería dejar mal la Cosa Nostra, en nuestro mundo el aborto es un crimen, en especial del que se podría conciderar el primer heredero.

En esa fecha todavía no nos habíamos casado por lo que el hijo de Aria sería el primer sucesor.

- Y entonces les pareció mejor idea hacerlo pasar por un suicidio tapando al culpable.

- Amor, en nuestro mundo no es ningún secreto todo lo que sufren las mujeres, por lo que el suicidio es más fácil de aceptar y no harían preguntas.

Me cuesta aceptar que sigan tapando al abusador.
Por eso tomaré justicia por mano propia, no me importan las consecuencias.

Al salir me encuentro con Malik charlando con los guardias.

- ¿Cómo me encontraste?

- Hay un rastreador en el auto en caso de emergencia.

Tiene sentido.

Me acerco a mi esposo y lo abrazo lo más fuerte que puedo.

-Vamos a casa, Moye Serdtse.

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