~• El Cuervo En La Nieve (Benjicot Blackwood x lectora)

Especial: Aeron

*Aeron y ____ se habían reencontrado años después, y un sepultado interés volvió a renacer en el corazón del Bracken. Pero para su disgusto, un pleito recurrente con los Blackwood amargó ese reencuentro.*

—No, ____... Lo juro. Nosotros no las movimos.—

—¡Pero están movidas!—Ben miraba sumamente molesto al caballero.

—Pues yo le creo, Ben... Si él dice que no fue, no fue.—

El joven Blackwood se tragó su molestia, alejándose enseguida. ____ lo miró preocupada.

—Tal vez tú no las moviste, Aeron... pero otro lo hizo...—volteó hacia el chico—. Te recomiendo que soluciones eso... O te hagas a un lado y que otro lo haga.—

—¿No me crees capaz de pelear contra ellos?—

—No me gustaría que lo hicieras, es diferente.—presionó su hombro—. Ben es mi amigo, lo aprecio mucho y considero que es una buena persona... pero he escuchado lo que es en el campo de batalla, y no me gustaría que lidies con eso.—

____ tomó la carne que el Bracken restante le alcanzó, y después de agradecerle, se despidió.

—¿Volveré a verte?—Aeron la miró ansioso al ver que tenía intenciones de irse.

—Claro, siempre y cuando devuelvas las rocas.—Aeron sonrió apenas, pero su rostro se transformó al sentir como ella acunaba su mano con cariño—. Ten una buena semana, sir Bracken...—Dejó una moneda de plata en su palma—. Tómalo como recuerdo.—

—¿Para mejorar mi humor con la gente?—____ sonrió divertida, y Aeron sintió que su corazón se agrandaba.

—Por si vendes libros de insectos con cara larga, si.—miró a los otros dos jóvenes—. De nuevo, gracias por la carne.—

Esta vez la chica sí se marchó, y Aeron se quedó ahi parado un buen rato.

—No es una Blackwood ¿Verdad?—uno de los muchachos llamó la atención de Aeron.

—No, no lo es.—

—¿Por qué no la invitaste a visitar el pueblo? Si no es Blackwood, sería bien recibida.—Aeron lo miró—. Es bonita, educada... A tu madre le hubiese agradado.—

El joven se sintió iluminado con aquello.

Su amigo tenía razón, su madre la adoraría. Incluso su hermana y su padre.
Decenas de ilusiones y esperanzas revolvieron la mente del joven, quien pasó toda una semana maquinando situaciones futuras.
Los patrullajes a partir de esa tarde los realizaba siempre cerca de los límites con la tierra de los Blackwood, ansiando toparse con ella de nuevo.
Eso sucedió recién en el quinto día.

—Aeron, que gusto volver a verte.—____ se acercó al joven, quien no terminaba de asimilar que ella finalmente aparecía.

—Buenas tardes, milady.—

El joven caminó emocionado hacia ella, pero su dicha era tal que no notó que traspasó los límites, y por eso se topó con las manos de Ben. Empujándolo bruscamente al suelo.

—Ni siquiera deberías mirarla, basura Bracken... Y quédate de tu lado de mierda.—

—Ben, no seas así. Sólo estaba saludando.—____ lo tomó de los hombros, haciéndolo retroceder—. Sir Bracken ¿Qué lo trae a esta... Majestuosa pila de rocas?—

____ le extendió la mano, y Aeron la tomó enseguida. Sintió cosquillas en el estómago apenas sus manos se entrelazaron.
Era tal su nivel de emoción que poco y nada se interesó en la agresión del cuervo.