EXISTEN 7 GRANDES MAFIAS EN EL MUNDO, LA MAFIA JAPONESA, LA COREANA, LA CHINA, LA ITALIANA, LA AMERICANA, LA FRANCESA Y LA RUSA. ACTUALMENTE EXISTE UNA GUERRA ENTRE LAS DOS MAS FUERTES, POR LA CUAL FUI OFRECIDO COMO OFRENDA PARA DETENERLA.
DEBO SER...
Señoras y señores hemos llegado al final del Erede Mafioso, muchísimas gracias por llegar acá y esperar tanto por el, he decido darle un final corto y sin nada de drama porque para eso estuvo la historia, no me encuentro las palabras adecuadas para agradecerles por siempre estar junto a mis historias, sea 1,2 o 3 personas que las Lean me siento muy orgullosa de mi trabajo y que ello les guste a ustedes. No les quito mas el tiempo y les dejo el FINAL.
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SUN. 18 AÑOS DESPUÉS
El amarillo y el rojo formaban un color naranja brillante en el cielo que cubría el mar Mediterráneo que antes mis ojos plasmaba. Pensaba en todo y en nada, en cómo las palabras pueden cambiar la visión que tienes de tu vida. Cuando descubres que todo con lo que has crecido es efímero... Cómo reaccionarías?
- mi sol...- La voz de Ggukie me trajo de vuelta al presente, llegó hasta el borde de las escaleras de nuestra casa que la conecta con la orilla de la playa, sentí sus brazos rodearme y dejar un beso en la coronilla de mi cabeza, cosa fácil para él gracias a la diferencia de estatura que nos separa.
Mi JunGguk, mi compañero de vida durante 18 años, mi mejor amigo, mi alma gemela, mi hermano.
Mis tíos siempre han dicho que él y yo somos tan iguales pero a su vez tan diferentes, quizás porque físicamente lo somos, Ggukie es alto de 1,80 cm., sus músculos son enormes gracias al ejercicio que la Bratva impuso para él, su rubio cabello y su piel pálida es un contraste a los tatuajes que resaltan por lo largo de sus brazos y cuello dando el aspecto de ser el digno heredero de la mafia rusa y luego, estoy yo una joven de 1,60 CM la misma estatura que mi papi doncel, de lisos cabellos castaños, menudo cuerpo pero fortalecido por las artes marciales que realizo desde los 4 años de edad, piel blanca un par tonos más oscuros que mi hermano y sin marcar, Ggukie siempre me animaba a realizarme un tatuaje con él y por una ocasión lo consideré pero el miedo a las agujas superó la adrenalina del momento, definitivamente hipócrita de mi parte considerando que soy la heredera de La 'Ndrangheta.
- Estás en otro mundo hoy.- El sol que apenas salía dio luz a los ojos color miel-verdosos de mi hermano, dándole un tono realmente inigualable ante la vista de cualquiera que los fijara. - Es porque al fin somos mayores de edad?.- Preguntó.
- sabes que te amo con todo mi ser, verdad?.- Fue el cuestionamiento que hice yo. Sus ojos se entrecerraron un poco a modo de confusión pero su boca me dio esa sonrisa que tenía guardada solo para mí.
- en serio me estás preocupando. Pasó algo?... Quieres que mate a alguien por ti?...- Cuestionó JunGguk, si había algo en que nos parecíamos él y yo, además de nuestros ojos y sonrisa, era la forma en que nos protegíamos uno al otro. - Acabo con Hobi Junior?-
- oh por Dios!!- Le di un leve empujón, mis ojos se cerraron para evitar ver la cara divertida que me regaló mi hermano, desde que se enteraron de la relación entre Hobi y yo, papá y JunGguk se pusieron de acuerdo para hacerle la vida imposible. -realmente genial que solo se pongan de acuerdo en hostigar a mi novio- pensé. - cuando quiero ser dulce contigo sacas a relucir tu lado más insoportable.-
