ADDAM VELARYON

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RHAETRYS VELARYON ERA, Quizas, la doncella mas hermosa de los siete reinos, descrita por todos los rincones como la reencarnación misma de la doncell, el diamante mas bello de la casa targaryen, hija de Rhaenyra targaryen y su esposo, Laenor velaryon.

O eso se creia.

Cabellos blancos cual targaryen y ojos azules, asociados a la sangre Arryn que corria por sus venas, nacida junto al principe lucerys siendo causante de que los rumores esparcidos por la reina fueran calmados y casi, solo casi, esfumados.

Su sonrisa y dulces ojos lograban cautivar a cualquier persona, por eso no fue sorpresa que cartas llegaran a ella pidiendo su mano, su padre se negó durante años, pero luego de que lucerys le arrancara el ojo a su tio Aemond, la joven ofreció su mano para calmar las aguas y buscar la paz.

Pero luego de la muerte de su hermano gemelo, Rhaethrys no fue la misma, por obvias razones su compromiso fue cancelado y Aemond targaryen se comprendio en su enemigo mas grande.

— un bastardo a reclamado a Seamoke — Rhaethrys asintio mirando los cielos de Rocadragon, viendo a su madre volar de regreso con Seamoke y su nuevo jinete —¿Alguna carta?

Jacaerys tomo la mano de su hermana, acomodando sutil mente un mechón de cabello tras su oreja — te ves hermosa.

Rhaethrys sonrio dando un paso hacia atras, alejandose unos metros de su hermano —daemon está haciendo quien sabe que en Harrenhall con quien sabe quien, Madre esta desesperada y el bastardo de nuestro tio mantiene al pueblo muerto de hambre — Silverwing sobrepaso a Syrax posandose sobre Seamoke rugiendole con fuerza, como si le reclamara algo en especial.

— tu dragona casi arranca la cabeza de Vermax, pero cuando Seamoke se le acerco no dudo en darle una nidada — Jacaerys miro a su hermana con una ceja alzada —¿No te cansas de rechazar mis avances?

Rhaethrys solo veia en el a su hermano, su hermano mayor, pero Jace a pesar de estar prometido veia en ella la cosa mas dulce y preciada que existia, algo que el debia poseer y anhelar.

— ahora llega ese jinete sobre Seamoke y tu dragon le reclama por volar junto a Syrax — Rhaethrys rio sonrojada —¿Te enamoras perdidamente?

— no me enamoro, Hermano — Mintio.

Por que apenas vio al joven Addam sintio todo a su alrededor congelarse, como si en el salón del consejo solo estuvieran ellos y nadie mas reclamando que el, Exactamente el reclamara un dragón de la casa targaryen.

Todo lo que sentia desaparecio por un momento, el joven habia posado sus ojos sobre los de ella y sintio su vientre retorcerse, queriendo sentir como seria ser tocada por el.

Eso, sin duda, la llevo a colarse a su habitación y desear saber quien era el, sin importancia de que no poseia un título mas que ser jinete de dragón.

(...)

Addam le sonrio bajando su cabeza, intentando ignorar como hace unos minutos la había tenido arrodillada chupandole la polla, intentando concentrarse en la voz de la reina.

—mi mano sigue libre — Rhaethrys dio un paso, posando ambas manos frente a ella con una dulce sonrisa.

Lo habia hecho hace años y había cnvencido a todos que ella era suficiente para pagar el ojo de Aemond, pero no fue suficiente para el.

Addam la observo furioso, no imaginaba a alguien mas tocándola, no queria que otro la tuviera con el coño expuesto como solo el podia, ver sus dulces jugos gotear rogando por su lengua, sus dedos y su polla, no queria que otro pudiera ver eso.

Jacaerys se mantenía serio mientras Baela estaba a su lado sosteniendo su mano — Cregan stark pidió tu mano — recordo Rhaenyra — o la de una futura hija targaryen.

Rhaethrys rodo sus ojos, pero se fijó en Addam, detras de el estaba Hugh pero este demasiado desconectado para notar las provocaciones de la princesa a su compañero.

Su vestido ajustado, logrando que sus tetas se vieran mucho mas apetitosas sabiendo que bajo esa tela estaban sus marcas, marcas de sus dientes, Addam sintio su polla endurecerse cuando inconscientemente la princesa bebio vino, dejando caer un poco sobre su pronunciado escote.

Que torpe era.

Ella se fijo nuevamente en el y chupo aquel dedo que había limpiado el vino, si alguien mas de dio cuenta, no dijo nada.

Rhaenyra obsevo a su hija — dime por favor que tienes alguna otra idea, que no sea tu mano — Rhaenyra no noto como su hija se sonrojaba por la mirada del nuevo jinete, y si lo hizo, no dijo nada.

(...)

—oh ....oh .....si....si si —la princesa arqueo su espalda aprentando con fuerza el cabello blanco que se ocultaba entre sus muslos.

Addam gimio bebiendo con placer lo que ella le daba, sintiendo que se correria solo por probarla una vez mas.

— mira este coñito hinchado, tan bonito—  Addam ronroneo mientras miraba hacia abajo, observando la vista erótica.

Estaba jadeando mientras sus caderas seguían sacudiéndose pidiendo por su polla.

Claro que se la daria.

Dos de sus dedos se deslizaron dentro de la boca calientede la princesa mientras gemía a su alrededor, sus ojos se pusieron en blanco por un momento, su mano libre se movió hacia su trasero y comenzó a acariciarle con rudeza, moviéndola por su polla gimiendo ante los espamos de su coño cada vez que entraba la punta.

— maldita puta — escupio en su boca, gimiendo mientras entraba lentamente en ella, Addam dejaria esta vez su semilla dentro, la princesa se casaria con el.

Seria suya, codicioso para el, pero la queria y la iba a tener.

Las piernas le temblaron mientras balbuceaba su nombre con sus ojos llenandose de lagrimas mientra el solo podia ver como su polla abultada su vientre.

— eres grande — susurro la princesa abriendo aun mas sus piernas, gimiendo ante el nuevo punto de placer.

Ambos ignoraban el riesgo de cojer en medio de la playa donde cualquiera podria verlos, sus dragones estaban cubriendolos, pero cualquiera podría verlos.

Y veria justo como su polla se perdia en aquel hermoso capullo que lo chupaba con fuerza, exigiendo su semen, exigiendo a su hijo.

(....)

Rhaenyra targaryen junto sus cejas confundida mirando a su hija la cual tenia una expresión de culpa, a su lado Addam tenia una expresión de arrepentimiento pero muy en lo profundo se podia ver el orgullo creciente.

—¿Como?— fue lo unico que salió de la reina la cual tenia su boca abierta por la sorpresa, su hija presentaba ante ella un vientre de lunas.

Quizas debio suponerlo.

Rhaethrys nunca se habia interesado tanto en enseñarle a alguien el valyrio, o entrenarlo para ser un mejor jinete.

Rhaenyra tuvo que ver como Silverwing y Seamoke se habían emparejado casi llenado los santuarios con huevos de dragón.

Quizás debió ver.

Debio ver como su hija se sonrojaba en su presencia y apenas hablaba, debio ver cuando Jacaerys le decia que el honor de su hermana había sido mancillado.

Debio comprender que su hija era igual de traviesa que ella en su juventud.

Y Rhaenyra no cometeria el error de su padre de verla pasar por matrimonios que no la hacían plenamente feliz, por lo que acepto casarlos bajo una boda Valyria.

Y le dio el apellido Velaryon al joven Addam cuando Corlys dijo que podia ser bastardo de Laenor.

Saber que podia llevar su misma sangre parecia poner feliz a Rhaethrys quien sin dudarlo huyo con Addam cuando fue acusado de traición, con su vientre demasiado hinchado para volar.

Pero pudieron acabar con Verminthor y Tessarion, ocultandose hasta que Aegon III estuvo sentado en el trono de hierro.

De no ser por Silverwing y Seamoke, los huevos de dragón podrian haberse convertido en piedra.

Se relata que desde el embarazo de Rhaethrys muchos dragones anidaron, y sucedia cada embarazo, declarando que ella y su madre la difunta reina Rhaenyra, eran la verdadera sangre del dragón.

ONE SHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora