3

43 5 0
                                    

🥀

No olvides comentar y dejar una estrella.

Después de todo el dolor que había atravesado, Lucifer le concedió a Bellamy la oportunidad de regresar al mundo humano. Ella se mudó a una pequeña cabaña en un rincón tranquilo del campo, donde cultivó una variedad de verduras y frutas. Su vida se volvió estable y serena, aunque a veces los recuerdos de su hijo la invadía.

Las visitas de Lucifer eran un acontecimiento esperado. Eran momentos intensos y apasionados, que se convirtieron en una rutina para Bellamy. Sin embargo, a pesar de su deseo y sus esfuerzos, no lograron concebir un hijo. La angustia de Bellamy crecía con cada ciclo sin éxito, y la tristeza comenzaba a llenar su corazón.

Una noche, Lucifer llegó en un estado de furia que Bellamy nunca había visto. La forzó a tener relaciones con una intensidad y desesperación que desgarraron no solo su cuerpo, sino también su alma. El acto, lleno de pasión salvaje, dejó cicatrices en ella que nunca sanaron del todo.

Después de esa noche, Lucifer dejó de visitarla. Bellamy se encontró sola, atrapada en una serie interminable de pesadillas. Su corazón, a pesar del dolor, seguía amándolo con una intensidad desesperada.

- Tal vez yo soy el problema-. murmuró Bellamy una noche, acariciando inconscientemente su abdomen.

Su corazón le decía que algo estaba mal, pero las semanas pasaron sin cambios. Su tranquilidad regresó, aunque no del todo, hasta que un día notó que su vientre estaba ligeramente abultado.

Se preocupó, pensando que podría estar enferma, pero una parte de ella sabía que la verdad era otra. Decidió consultar a un médico. Tras unos exámenes, la verdad se reveló: estaba embarazada.

"Es tu hijo," le dijo el médico con una sonrisa comprensiva. Bellamy sintió una mezcla de miedo y esperanza. Aunque el dolor de lo que había pasado seguía presente, la noticia de que llevaba en su vientre una nueva vida le dio una chispa de luz en la oscuridad.

Con el tiempo, Bellamy comenzó a prepararse para la llegada de su hijo. Aunque el pasado seguía presente, el futuro ahora le ofrecía una oportunidad para sanar y para empezar de nuevo.

















 Aunque el pasado seguía presente, el futuro ahora le ofrecía una oportunidad para sanar y para empezar de nuevo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Le notificó a su pareja que tenía un importante mensaje. Sin embargo, el mensaje se lo tuvo que dar uno de los demonios, ya que Lucifer no quería verla aún. Ella no le dio mucha importancia, pues su única preocupación era su niño.

Los meses de gestación eran más lentos en la Tierra y, tras nueve largos meses de espera, finalmente llegó el momento.

—Debe pujar, señora Kiran —dijo el doctor con ánimos alentadores.

Bellamy pujaba con desesperación, sintiendo como si sus huesos se quebraran. Miró hacia el techo y, con un último impulso, sintió cómo el bebé salía de su cuerpo. El chillido del recién nacido la hizo reaccionar de inmediato.

—¡Dámelo, mi hijo! —pidió con voz temblorosa.

El doctor limpió al niño y se lo entregó. Bellamy miró al bebé con amor; definitivamente se parecía a él. Lo abrazó con ternura.

—¿Cuál será su nombre, señora?

Ella observó al niño una vez más y, con el dedo, acarició su pequeño rostro.

—Su nombre será Caín —dijo, besando la cabeza del bebé.

El doctor hizo una reverencia y se retiró, dejándola sola. Desde la oscuridad, un demonio llamado Xion observaba con una sonrisa macabra a la madre y al hijo, sabiendo que su amo estaría complacido al enterarse de que su mujer había dado a luz a un excelente príncipe de la oscuridad.










Nos vemos en el siguiente capítulo


Libranos de todo mal Donde viven las historias. Descúbrelo ahora