Todo de mi

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Demasiado lejos, el frío quemaba sus brazos, sus ojos apenas podían atravesar esa fina capa de hielo entre los arboles y la nieve.

Correr no parecía ser suficiente para llegar al lugar en donde una guerra parecía empezar, es que no sabia cuanto llevaba corriendo en aquella fría oscuridad siguiendo una luz que parecía invisible, una torre de humo que se extendía en el cielo. Comenzaba a ponerse nerviosa, la ansiedad de que podria llegar tarde rápidamente la consumía. Corriendo para enfrentar a sus amigos, yendo a pelear herida a un ejercito, sufriendo para proteger a su amor. Desear que todo esto terminara ya no era suficiente.

Los sonidos de una pelea grito en ella para que rápidamente llegara a aquel lugar tras atravesar la maleza. Quedando inquieta al borde de toda esa pelea.

Los arboles estaban quemados, la nieve estaba derretida era todo tierra y cenizas, múltiples maquinas yacían tiradas y destruidas, muchas mas caminaban por allí, pero en medio, a cientos de metros de ella, al borde de una gran llama de fuego Sonic y Shadow forcejeaban con todas sus fuerzas, sostenidos de las manos. Los dos estaban erizos y sucios, pero Shadow parecía en peor estado, pero no parecía ceder.

De pronto, una de las grandes maquinas humanoides de acerco a gran velocidad hacia ellos. Shadow se soltó de inmediato para patear a la maquina pero rápidamente Sonic lo golpeo hecho una bola, de lleno en su pecho sangrando, pero lo unico que logro fue hacer que Shadow se sostuviera de la tierra, arrastrándose un par de metros pero nuevamente levantando la cabeza.

Tails rondaba en el cielo con su avión, demasiado cerca del humo observando en su monitor cada movimiento del erizo.

En su repentino descanso, que apenas duro un par de segundos, una decena de robots mariquitas le rodearon en circulo, estaba dispuesto a atacar cuando vio una sobre moverse a su costado y al voltear vio con furia como el Equidna se acercaba con su puño alzado. La única persona a la cual no le tendría piedad.

Levanto una palma de su mano que recorrieron rayos y destellos esmeraldas, fuertes, brillantes, antes de que un rayo saliera disparado desde el dorso de su mano. Demasiado rapido que lo unico que pudieron ver el reflejo morado de sus ojos impotentes fue su propio destello. Su cuerpo salio volando una vez impactado el rayo, sin embargo, este no desapareció, se clavo en la palma de su mano y reencajo sobre un árbol. Apenas soltó un quejido al sentir el dolor pero rápidamente otro rayo se atravesó la carne de su otra mano, escucho su crujir y la sangre salpicar. Clavandolo en un árbol mientras soltada leves gritos de dolor.

Podria en ese momento lanzarle otro rayo de energía Chaos en su cuello, cara y estomago, arrancarle los dos ojos o golpearle hasta quitarle la vida. Sin embargo, ahora tenia que encargarse de los demas.

Sonic no perdió tiempo, al ver a su amigo en ese estado, nuevamente salto para hacerle frente. No sabia los motivos por lo que Shadow habia decidido explotar la base de Eggman o atacarlos así tan frenéticamente. Pero no tenian tiempo para pensar, no podian dejar que Shadow llegara al pueblo y saciara su ''Venganza''.

Sostuvo su puño en el aire, listo para golpearle mientras estaba distraído destruyendo los robots de Eggman, tan cerca para golpearlo. Cuando de repente, lo golpeaban fuertemente en todo su lado derecho, como si un rinoceronte lo hubiera tacleado, mandandolo a volar contra los arboles, golpeando su cuerpo tras caer y rasguñar sus troncos, quedando quieto por lo menos un segundo.

Sosteniendo su martillo, transpirando fuertemente Amy miraba con mucha pena el cuerpo de Sonic. Habia actuado sin pensar y el estaba muy cerca de golpearlo no podia quedarse sin hacer nada. Después de que les pidiera perdón ella se disculparía, sin embargo ahora tenia muchas cosas mas importantes que hacer.

—¡Amy!— Al momento, escucho el regaño de Shadow, apareciendo en un destello frente suyo —¿Que es lo que haces aqui? Te dije que no te movieras, esto es muy peligroso para ti.

Una bella eternidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora