Dedicado a Saii, otra amiga que quiero mucho y una colombiana linda๑♡.
Bea.
—Ha sido así desde que Natasha nació —me habla Christal.
—¿Ah?.
La verdad es que no la escuché porque estaba mirando la escena ante mí a unos metros de distancia. Ver cómo ella se ríe de algo que el dijo con semblante serio y ver cómo también ella le toma una foto con su cámara.
El voltea los ojos pero siguen hablando.
La hermana de Christian me vuelve a repetir lo que dijo y despierta mí curiosidad.
—El y yo nos adoramos, somos hermanos pero de verdad a veces nos queremos matar entre nosotros y no nos soportamos en ocasiones, en cambio Natasha es la única de la familia que Christian soporta completamente.
Explica y vuelvo a fijar mí mirada en ellos, sonrío porque.. no lo sé, simplemente lo hago.
Natasha le da otro abrazo como si tuviera tiempo que no lo viera, Christian le dice algo al oído y ella asiente y el le da un beso en la mejilla. Camina entre la multitud y la pierdo de vista.
Cuando Christian también la pierde con la mirada es como si todo pasara en cámara lenta, se que no estamos en una ridícula película pero se siente así cuando posa su mirada azul en mi produciendo un leve escalofrío en la nuca.
Ya Christal no está a mí lado cuando su hermano se acerca en dónde estoy dándome una repasada lenta y feroz mirando cada parte de mí cuerpo con la prenda dorada que hace resaltar mí figura.
Camina deteniéndose por segundos para Inspeccionar cada parte de piel cubierta o no cubierta de mí, acto que hace que se me tensen los pezones debajo del vestido.
Y empiezo a sentir una humedad inquietante en medio de las piernas, lo que puede hacer unas miradas..
Al llegar hasta mí sin rodeos me toma por la cintura con un mano en un agarre firme, mí pecho choca con el suyo cuando me atrae hacia el y tengo que echar mí cabeza para atrás para poder verle el rostro. Me trago un jadeo de gusto cuando al instante mí olfato capta su aroma fresco y divino. Con su mano libre toca con sus dedos mi muslo descubierto por el vestido.
Medio cierro los ojos con su toque.
—¿Tengo buen gusto? —pregunta viendo el escote de mí vestido por más tiempo de lo habitual, ¿será que se nota los de mis pezones?. De igual forma no pienso bajar la cabeza para averiguarlo.
Tardo unos segundos en darme cuenta que su pregunta es sobre el vestido.
Y eso me sorprende.
—¿Lo elegiste tú?.
—Cuando se trate de tí no dejaré que alguien elija por mí.
Su respuesta inmediatamente hace que mí ritmo cardíaco se dispare y mis sistemas cerebrales se colapsen con sus palabras, pierdo la respiración sin quitar mí mirada de sus ojos.
El corazón me retumban en el pecho y tengo miedo que pueda escucharlo ahora delatando mí emoción aunque es una tontería.
Nunca he tenido un acercamiento así con alguien, es como si fuera la primera vez en mí vida que me siento confundida y bien, confundida porque son cosas que jamás había experimentando y si es un delito que me guste un asesino que me encierren de una vez.
Porque de verdad me gusta y por eso es confuso, ya que no sé que es lo que tanto le atrae de mí como para querer tenerme cerca.
A lo mejor es un interés solo físico y quiera eso de mí.
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Dangerous doctors
RomanceEl es una bestia y yo me enamoré de esa bestia. Este libro contiene contenido sensible+21 leer bajo su propio riesgo.