Daera estaba leyendo junto a la ventana de su habitación. A sus pies estaba Balerion, su gato. Hacía poco que ya habían transcurrido dos años en Antigua. La citaron para ver a su tío Gwayne.
-Tío-
-Daera- le dio un abrazo-
-¿Qué pasa?-
-Ha llegado una carta de parte de vuestro padre, querida- le acercó el papel.
''Querida hija, hemos decidido que iras a visitar las casas del reino, será temporal. Su majestad, el rey Viserys''
-Me voy, tío. De fiesta por Westeros- sopló ella
-¿Te han dicho el recorrido?-
-Primero Altojardín hasta la última que es Invernalia. Iré a las casas más importantes-
-Diré que te preparen un carruaje pronto-
-Gracias tío-
...
Era la primera noche de Daera en Invernalia. Llevaba casi un año viajando de castillo en castillo y este era el último. La recibió Cregan Stark, señor de Invernalia y su regente, su tío Bennard. La acompañaron a sus aposentos, donde se quedó todo el día. Le avisaron para la hora de la cena. Bajó hacia el comedor. Cuando entró todos se callaron y se levantaron, haciendo reverencias y saludando cortésmente. Ella se sentó al lado de Cregan al final de la mesa.
-¿Por qué se comportan así?. Había oído que erais más rudos los del Norte y por la ventana lo parecían-
-Es la primera vez desde la venida de la reina Alyssane que viene alguien de la familia real. Intentan tener modales- justificó el norteño. La chica solo miro a su alrededor. Le pregunto a uno de los hombres que tenía en la mesa que estaba bebiendo y él le respondió que era una cerveza norteña, bastante fuerte para los del sur. Ella hizo caso omiso, bebió un trago y pidió otra, así, se cortó la tensión en el ambiente y el lugar se llenó de ruido y risas. Días después, se fue de cacería con Cregan y otros. Encontraron un lobo huargo blanco. Cregan se lo regaló a Daera. Esta lo llamó Invierno. Dos días antes de que su estancia terminara le llegó una carta de parte del rey. Avisaban de que la princesa estaría un tiempo con su tío. Eso animó un poco a la chica.
Estuvo medio onomástico con su tío Daemon. Durante este tiempo estuvieron viajando, viendo las partes bajas de las ciudades y perfeccionando sus artes como guerrera. Su tío le regaló una daga, a la cual llamaría Sangre de Dragón. Se lo pasó muy bien, empezó a llevar pantalón y volar más con Tessarion. Después llegó la carta del rey, citándola para irse a Lys por un tiempo, con la familia Rogare.
Ahí pasó un año y medio. Practicando su valyrio, entrenado con la espada y mejorando físicamente. Un día por la mañana la citaron al despacho de Lysandro, el cabecilla de la familia. Era un reconocido banquero de Lys.
-Una carta para ti- dijo Lysandro. Hablaba un poco de la lengua común
-Que novedad- dijo Daera con sarcasmo -el único lugar que les falta es el muro y los escombros de Valyria- Lysandro la miró sin entender.
́ ́Citamos a la princesa Daera a volver a Desembarco del Rey ́ ́ eso la tomó por sorpresa. Pidió a Lysandro preparar un barco con sus cosas para su partida, pero ella se adelantaría en Tessarion. Cuando este le preguntó que si mandase una carta a Desembarco del Rey Daera se negó. Quería darles una sorpresa. Al día siguiente, se despidió de los hijos de Lysandro y de su hija, con la que había entablado una buena amistad y marchó a lomos de su dragona, sin saber ni esperar que pasaría cuando volviese a su hogar.
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Amor de dragones
FanfictionEn el año 113 d.C, la reina Alicent, casada con Viserys Targaryen, dio a luz a una niña, Daera, su última hija. Esta fue la hija pequeña del rey. Jinete de Tessarion, gran guerrera y la Targaryen más hermosa que ha existido. Casada con un rey y un p...