Capítulo 10

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A la mañana siguiente Violeta se levantó de la cama y le dolía mucho las heridas, ella suponía que el efecto de las pastillas se había pasado. Cuando se levantó fue al baño para ver como tenía las heridas, las tenía algo mejor que ayer pero seguían teniendo mala pinta.

Se baño y se vistió con dificultad ya que las heridas le estaban doliendo mucho, cogió algunas cosas para ir a casa de Chiara, habían quedado por la mañana para desayunar y quedarse todo el día juntas hasta que llegarán sus abuelas.

Una vez enfrente de la puerta llamó, pero nadie abría, llamó de nuevo pero nadie contestó, llamó una última vez y a los dos minutos de llamar le abrió una Chiara adormilada, con el pelo revuelto y con el pijama puesto.

- Buenos díasss, te veo dormida aún. - Dijo Violeta con un tono gracioso aunque la felicidad le duró poco porque le empezó a doler bastante las heridas.

- Buenos días, ¿Estás bien? - Preguntó la morena con un tono preocupado al ver algunas muecas de dolor por parte de Violeta.

- Sí, no me duele mucho. - Violeta soltó esta mentira que es más grande que la catedral de Granada, solo por no preocupar a la pelinegra.

- ¿De verdad? - Dijo Chiara sin creerle mucho.

- Síp. - Violeta pareció convencer a la pelinegra.

Chiara dejó pasar a Violeta y se fue a vestir y a peinarse. Entre las dos hicieron el desayuno y Chiara lo puso en la pequeña mesa del salón, las dos desayunaban tranquilamente hasta que el móvil de Violeta empezó a sonar.

Violeta al ver quien llamaba se tensó, Chiara al ver esto se hizo una idea de quien llamaba pero decidió preguntarle, ya que veía miedo en los ojos de Violeta.

- ¿Quién es? - Preguntó Chiara mirando la expresión de miedo de Violeta y acercándose un poco a ella mientras la otra estaba sentada en el sofá.

- Cris. - Violeta miraba al móvil pensando si cogerlo o no.

- ¿Qué vas a hacer? - Dijo Chiara ya sentada al lado de la otra.

- No lo sé, ¿tu que harías? - Preguntó Violeta sin dejar de mirar el móvil.

- No se lo cogería, es subnormal después de todo lo que te hace tiene huevos de llamarte, que asco de hombre. - Dijo Chiara sin pensárselo mucho.

- Pero se va a enfadar y va a ser peor, nosé que hacer. - Violeta hablaba más bajo de lo habitual y tenía la mirada perdida.

Chiara sin pensarlo mucho cogío el móvil de Violeta lo apagó y lo guardó en una caja que posteriormente escondió en su habitación. Violeta se limitó a mirar lo que hacía la pelinegra.

Chiara volvió a sentrase al lado de la pelirroja. - Ya está, ya no tienes que pensar si cogerlo. - Dijo la pelinegra con una sonrisa tranquilizante.

- Gracias. - Dijo Violeta con una leve sonrisa en su rostro.

- Denadaa. - Respondió la pelinegra bastante contenta hasta que vio que Violeta hacía algunas muecas de dolor. - ¿Estás bien? - Preguntó la pelinegra preocupada.

- Me duele las heridas de ayer. - Respondió Violeta con bastate dolor, ya no podía soportar el dolor que desde que llegó estuvo intentando esconder.

Chiara no necesitó escuchar nada más que la cogió en brazos como si fuera una princesa y la llevó al baño, una vez allí la sentó en el baño y sacó el botiquín que tenía su abuela debajo del lavabo.

- Si te duele perdón. - Dijo Chiara antes de desinfectar y curar las heridas.

Mientras que Chiara curaba las heridas de la pelirroja, está lloraba en silencio porque le dolía mucho y porque sentía que Chiara se preocupaba mucho y de verdad por ella.

- Gracias. - Dijo la pelirroja entre algunas lágrimas.

- ¿Estás tonta? ¿Cómo me vas a dar las gracias por esto? A mi no me cuesta nada hacer esto por ti. - Respondió Chiara con suavidad y siendo muy sincera.

Violeta al escuchar esto le dio un abrazo a la pelinegra, la pelinjegra se sorprendió un poco por el abrazo de la otra pero no se lo rechazó.

Cuando se separaron Chiara le puso algunas tiritas y vendas en las heridas. - Ya está curado, mañana lo tenemos que curar otra vez.

- ¿Tenemos? - Preguntó Violeta aún sentada en el retrete.

- Si quieres, claro. - Preguntó agachando la cabeza algo avergonzada, ella seguía de rodillas frente a Violeta.

Violeta le cogió el mentón y le levantó la cabeza. - Claro que quiero tonta. - Dijo la pelirroja con una gran sonrisa.

Chiara también esbozó una sonrisa mirando fijamente a Violeta, el sonido de la puerta les sacó de la burbúja en la que se habían metido.

- ¡Voyy! - Gritó Chiara desde el baño. Se levantó del suelo y ayudó a Violeta a ir hasta el salón. - Voy a ver quien es, esperame aquí. - Le dijo a la pelirroja.

Violeta asintió colocandose bien en el sofá mientras Chiara iba a abrir la puerta.

La pelinegra abrió y se encontró allí a la persona que menos se esperaba.

- Hola Chiara. - Escuchó Violeta desde el salón, esa voz le sonaba familiar.

- Hola Cris, ¿Qué quieres? - Soltó Chiara seria y con un tono desagradable.

Violeta al escuchar esa voz y ese nombre que tan poco le gustaba se asustó mucho y decidió esconderse, se levantó del sofá y se fue a la habitación que más cerca estaba, resultaba ser que se había metido en la habitación que tanto veía desde su ventana, la habitación de Chiara. Ella se escondió en el armario ya que cabía perfectamente porque la mayoría ropa de Chiara estaba esparcida por el suelo y varios lugares de la habitación.

Afuera de la habitación Chiara estaba intentando decirle a Cris que Violeta no estaba allí.

- Cris te quieres ir ya, que pesado eres. - Dijo Chiara ya enfadada.

- Que no, sé que mi novia esta aquí. - Decía Cris gritando.

Chiara aunque no le gustara que le gristasen se aguantó por Violeta. - Que no esta aquí, te lo he dicho ya cinco veces. - Ya Chiara estaba harta de Cris y empezó también a gritarle.

- Pues dejame pasar. - Dijo Cris ya sin gritar.

- No, mi abuela esta durmiendo. - Mintió Chiara.

Después de estar un rato peleando con Cris, él se rindió ya que veía imposible pasar.

- Bueno vale, adiós. - Bufó Cris y se fue de allí algo enfadado.

Chiara suspiró y cerró la puerta. Al volver al salón no encontró a Violeta cosa que le preocupó.

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Holaaa gracias chicxs por todo el amor que le estais dando, estamos muy agradecidos y perdón por tardar en actualizar, llevamos unos días algo ocupados.

os queremosss :)

Mi otra mitad/KiviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora