Mi otra mitad/Kivi

Capítulo 25

Las dos salieron del hospital, Violeta fue empujando a Chiara por toda Barcelona. Al llegar al frente de los dos pisos Violeta mira a Chiara.

- Kiki, ¿Qué hacemos? - Preguntó Violeta con una carcajada, ya que las dos vivían en un tercer piso.

Chiara se rió. - Me vas a tener que subir tú, ascensor no hay.

- Oju Kiki, que yo no estoy tan fuerte. - Se quejó Violeta, pero era la única opción que tenían.

Una vez frente las escaleras Violeta coge a Chiara y la sienta en un escalón para subir la silla de ruedas primero, una vez la silla estaba arriba vuelve a bajar otra vez para coger a la morena.

- Venga, Kiki así no ayudas. - Dijo Violeta tras varios intentos, que fueron fallidos.

Chiara no paraba de moverse porque le dolía bastante el brazo y la pierna que tenía escayolados.

- Venga Kiki un esfuerzo porfi. - Suplicó Violeta que ya estaba un poco cansada.

- Perdón. - Dijo Chiara parándose de mover y fingiendo que ya no le dolía, pero su cara tenía reflejado dolor, así que la delató.

Violeta la miró con pena, pero aprovechó que se estaba quitando y logró llevarla hasta la casa sin ningún accidente, al llegar al salón la soltó en el sofá, Chiara iba a tener muchas dificultades a la hora de hacer vida normal, iba a necesitar ayuda.

Violeta le iba a ayudar en todo, que por ella no había problema pero Chiara se sentía pesada, así que intentaba hacer todo sola.

- Kiki no ehh, siéntate. - Le ordenó la pelirroja al ver que Chiara se estaba levantando.

- Joo Viviii, que estoy aburridaaa. - Chiara hizo un puchero, pero se dio cuenta de que no serviría de nada así que se volvió a sentar.

Las chicas estaban solas en casa, Violeta hizo unos espaguetis con gambas y nata, uno de sus platos especiales que a Chiara le gustaba mucho, de postre un Alpro de lima limón con plátano, avena y miel.

- Gracias Vivi por preocuparte tanto por mí eres la mejor, te quiero. - Agradeció la morena con una gran sonrisa.

- De nada guapa, por ti hago lo que sea y no me molesta tonta, que se lo que se te pasa por esa cabecita loca. - Dijo Violeta dándole un beso en la cabeza.

Las chicas se fundieron en un larguísimo abrazo, el cual terminó cuando derrepente llegaron Dolores y Carmen a coger su chaqueta, ya que hacía un poco de frío en la calle.

- Cariño, ¿Cómo estas?. - Preguntó su abuela acercándose a ella.

- Mejor yaya, aquí esta Violeta ayudándome así que no te preocupes. - Respondió Chiara a su abuela.

- Nos vamos chicas, dentro de un rato venimos. - Dijo Carmen acercándose a las dos chicas y dandole un beso en la cabeza a cada una para después Dolores hacer lo mismo.

La chicas estaban aburridas y por petición de Chiara comenzaron a ver películas de Navidad, aunque ya hubiera pasado la navidad a Chiara le encantaba.

- La próxima que veamos que sea "Solo en casa" porfi Vivii. - Suplicó la morena haciendo ojitos.

- Chiara esa la hemos visto ya hoy tres veces, ¿otra vez? - Suspiró Violeta, a este paso se iba a aprender los diálogos.

Chiara tenía una mirada de súplica mientras hacia un leve puchero con los labios.

Violeta al ver lo adorable que estaba se mordió el labio evitando así que le saliera una sonrisa más grande de la que tenía.

- Bueno venga vale. - Se rindió ante esos intensos ojos verdes y el puchero que tenía en los labios. - Pero quiero algo.

Chiara se emocionó mucho y empezó a buscar la película, pero cuando escuchó la voz de la pelirroja pedirle algo dejó de prestar atención a la televisión y miró a Violeta. - Dime.

Violeta se acercó más a Chiara teniendo cuidado de no tocarle las escayolas. - Puedes poner el puchero de antes, porfi. - Pidió Violeta mirando descaradamente los labios de la morena.

Chiara sabiendo a donde iba a llegar la petición de su amiga hizo de nuevo el adorable puchero que le gustaba tanto a la pelirroja.

Violeta se acercó hasta que cada una podía notar la respiración de la otra, hasta que la morena decidió borrar las distancias y fundirse en un beso fugaz y intenso, fue un beso donde sus lenguas se volvieron a encontrar con la misma emoción que la primera vez.

Sobre las sobre las 20:30 Chiara se despertó en el pecho de Violeta, las dos se habían dormido mientras veían la película, Chiara empezó a masajear el pelo de Violeta para que se despertara poco a poco, ya que tenía la morena que darse una ducha.

Violeta abrió los ojos lentamente un poco desorientada hasta que vio a su amiga tumbada en su pecho, esta escena le hizo esbozar una sonrisa imposible de borrar de su rostro.

- Hola Vivii, ¿Me puedes ayudar a ducharme? - Preguntó Chiara cuando pilló a Violeta mirándola.

Violeta al escuchar lo que le preguntó su amiga puso los ojos como platos. Chiara se rió
a carcajadas por la cara que había puesto la pelirroja.

- Vivi, no es lo que piensas, cochina. - Le dijo de manera cariñosa. - Es para que me ayudes un poco que ya sabes que sola no puedo. - Señaló sus escayolas mientras hablaba.

Violeta no soltó ningún reproche, si no que se levantó y le ayudó a hacer lo mismo, cuando llegaron al baño sentó a Chiara en la tapa del retrete.

Violeta sabía que Chiara no se podía desvestir sola así que pidió permiso para hacerlo. Chiara le dió permiso y Violeta fue desvistiéndola poco a poco para no hacerle daño, mientras la pelirroja le iba quitando la ropa, esta se quedaba atontada por las bonitas curvas que tenía la menorquina y que nunca las mostraba.

A Violeta solo se le pasaba por la mente escenas que no son para menores. "Joder Violeta que pava estas, peor que una adolescente de quince, pero es que esta buenísima... VIOLETA PARA YA PIENSA EN LA BIBLIA" pensó Violeta mientras la morena estaba de espaldas a ella.

Violeta le ayudó a entrar en la bañera, encendió el grifo y cuando salió templada se la hecho a Chiara encima sin mojar las escayolas.

Mientras Violeta le ayudaba a lavarse el pelo, Chiara con la mano que no tenía vendada se enjabonaba el cuerpo. Cuando terminó de ducharse Violeta le puso una toalla y la sentó de nuevo en la tapa del retrete, para ir a por su ropa interior y su pijama.

Cuando Violeta llegó con el pijama y su ropa interior en la mano, se la dio a Chiara y esperó a que se la pusiera, ya que era una de las pocas cosas que podía hacer sola, cuando ya la menorquina estuvo vestida Violeta le cepilló y le echaba productos en el pelo.

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Sabemos que hemos tardado más en hacer este, pero hemos estado hasta arriba de cosas.
ESPERAMOS QUE OS HAYA GUSTADO

OS AMAMOS🫶🏻🫶🏻🫶🏻

Pov: gracias por todo el apoyo sois increíbles.