Capítulo 18. ¿Alessandro?

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Lunes 7 de enero de 2019, Ohio, USA.

Después de encontrar a Dolores observaron que iba a trabajar incluidos los sábados aunque menos tiempo. Solía hacer un horario de siete horas, entraba a las ocho de la noche hasta las tres de la madrugada.
Se desplazaba con un coche estadounidense que no llamaba para nada la atención, no era un último modelo, tampoco uno lujoso.
Pudieron conseguir el lugar donde hacía su vida cotidiana, la única pega es que no se encontró al heredero, pero ya estaban contentos con el resultado.

Ahora se encontraban todos en el hotel donde se hospedaban Thomas, Liam y Benjamin con los planos del edificio y mapas del distrito con toda la información, dónde estaría cada uno, cuál era la misión y qué objetivos habían.

-Alessandro, Taylor y Emma vosotros seréis los que lideraréis a los demás, seréis los primeros. Sois los únicos que tenéis experiencia en redadas, además, Alessandro tiene mentalidad fría y sé que no dudarás, Taylor eres demasiado inteligente, podrás sacar información de cualquier cosa que diga y Emma eres calculadora y manipuladora, podrás manejar la situación si se complica.- Liam hablaba explicándoles el plan.- Tom, tu vigilaras la posición de cada uno y lideraras al trío según veas conveniente, a través del pinganillo te comunicarás con ellos, prohibido no seguir sus instrucciones.- Los cuatro asintieron aceptando sus roles.

-Eloise, John, Sabrina y yo estaremos detrás vuestro, esperando a vuestra señal y revisando que no salgan de algún escondite, seguiremos mis instrucciones en este grupo.- Benjamin hablaba con el segundo grupo.- Detrás nuestro estarán los policías, hay que cuidarlos y ser responsable, nuestro trabajo solo lo hacemos nosotros.-

-Por último, Molly, Francesco y yo iremos a casa de esa maldita bruja para hacerle una emboscada antes de que pueda salir a trabajar.- Thomas habló desde el rencor.- Quedan 5 horas, aprovechad e ir a prepararos, recordad, vestimenta oficial del FBI de pies a cabeza, el pasamontañas, protecciones y chaleco antibalas.-

Eran las seis de la tarde y el equipo de Thomas marchó hacia casa de Dolores para poder empezar en breves su operación, mientras Alessandro y Taylor se vestían con el uniforme azul que constaba de una camiseta de manga larga negra, un pantalón estilo cargo negro, botas negras homologadas, guantes negros, chaleco con el logo del FBI, pasamontañas negro, casco, gafas y por supuesto no podía faltar las armas y munición.

Ya estaban todos listos para proceder, no se les reconocía, sólo tenían un distintivo un número en la bota. Taylor llevaba el cinco, Alessandro el nueve, Emma el cuatro y más.

Subieron a la camioneta informatizada llena de pantallas donde Tom podría controlar a cada uno de los integrantes, una vez estacionaron cerca, esperaban que se acercará la hora, eran las siete cuarenta y siete pm, su padre debía estar en plena misión impidiendo a Dolores llegar a trabajar y deteniéndola. Los nervios comenzaban a florecer dentro de Taylor cuando Tom repartió los pinganillos de cada uno, se lo colocaron en la oreja cada uno el suyo y se pusieron el pasamontañas, el casco y las gafas, debían entrar por una salida de emergencia.

-Chicos, es la hora, tened cuidado, yo os protegeré y guiaré desde aquí.- Tom habló estrechando la mano de cada uno de nosotros.- Podéis ir saliendo, la policía entrará después de vosotros. Buena suerte.- Abrió la puerta dejándonos paso.

Al salir nos pusimos en orden, la policía había reventado la puerta de emergencia por donde nos colariamos al interior del edificio de cinco plantas, las dos primeras plantas era recepción y unas oficinas que no tenian que ver con los Vannicelli supuestamente, asi que la policia desalojó esas dos plantas mientras se dedican a identificar a cada persona junto con el grupo de Benjamin, mientras el trío subía por las escaleras con su ejército, en la planta tres se quedó Taylor, Emma subió hasta la cuarta y en la quinta subió Alessandro.

¿Seré capaz de amarte después?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora