24; Eres mi victoria, y eres mi fracaso.

70 8 5
                                    

Y voy buscando algún pretexto para soltarte, y no lo encuentro.

CICATRICES. AIRBAG.

— ¡Eso sucedió hace tres años, y nosotros

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¡Eso sucedió hace tres años, y nosotros...!

Antes de que pudiera completar su pensamiento, Hoseok lo interrumpió, sus palabras cargadas de desesperación, reflejo del caos en su corazón.

— ¿“Nosotros”? ¡Nunca hubo un “nosotros” como tal! —masculló, sus ojos oscurecidos por el sufrimiento que había reprimido durante tanto tiempo—. ¡Jisoo, me importa un carajo si sucedió hace tres años o ayer, pero al menos debiste decírmelo! ¡Era el padre de ese bebé! ¡Era mi maldita sangre, tenía todo el derecho de saber sobre su existencia!

El peso de sus palabras golpeó a Jisoo como una ráfaga de viento helado; sabía que él tenía razones más que suficientes para estar furioso. Por más que se había preparado para afrontar aquella tormenta, escuchar a Hoseok aún era un sufrimiento que no le deseaba a nadie. Recordaba cómo evitaba mirarse al espejo en esos días, cómo lloraba en silencio cuando nadie la veía, y cómo intentaba justificarse una y otra vez, hasta convencerse de que había hecho lo correcto. Pero ahora, al ver la furia y la angustia en los ojos de aquel hombre, toda su fortaleza se desmoronaba. Para Hoseok, en cambio, cada palabra era una daga que se clavaba en su pecho, reavivando un dolor que nunca había comprendido del todo, hasta ese momento.

Jimin suspiró. Recordaba cómo la había visto cubrirse el vientre con la mano, una lágrima solitaria deslizándose por su mejilla mientras observaba a los bebés en neonatología. En aquel entonces, ocupado con los preparativos para su viaje a Boston, no le había prestado la atención suficiente, pero ahora todo encajaba dolorosamente. No había comprendido la magnitud del dolor que había presenciado.

Jisoo, al borde del llanto, intentó defenderse, su voz temblorosa:

— ¡Yo...! —Se detuvo por un sollozo que escapó de su garganta—. ¡Hoseok, no estaba preparada para asumir una responsabilidad tan enorme! —exclamó, su voz quebrándose bajo el peso de la culpa que la rodeaba, mientras mantenía el contacto visual con él—. Lo descubrí solo días después de nuestra vergonzosa discusión frente a todo el hospital. Considerando nuestra situación, un bebé no habría sido lo mejor para nosotros, especialmente para mí. ¡Te odiaba tanto en ese entonces, maldita sea! Eras arrogante, egoísta, insensible... ¡y jodidamente egocéntrico!

A medida que Jisoo alzaba la voz, su rabia se mezclaba con la pena, creando un desequilibrio emocional que resonaba en cada rincón de la habitación. Incluso Jimin, escuchando desde detrás de la puerta, podía distinguir el dolor atrapado en la garganta de esa mujer. Se debatía internamente, sabiendo que tal vez era el momento adecuado para intervenir y calmar la situación, pero algo lo detenía. Era como si una fuerza invisible lo empujara a esperar, a dejar que Jisoo continuara, porque Hoseok todavía tenía que escuchar más.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 19 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

The Way I Loved You | YoonMin (Serie Only, 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora