- Capítulo 41 / FIN -

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Ari se encontraba en su habitación agarrando las cosas que utilizaría mañana rápidamente, apenas terminó se fue corriendo a con su pareja.

Se metió a la casa cerrando bien la puerta, dejó sus cosas en la sala y subió al cuarto viendo a su amado abrazando la almohada aún con sus ojos abiertos.

-Hola cariño, te dije que volvería rápido.- Este se acercó y Andrés soltó la almohada extendiendo sus brazos, Ari se quitó sus zapatos y se acomodó en la cama quedando con la cabeza del menor en su pecho y abrazando a este tiernamente.

-Ari... ¿siempre estarás conmigo?- Preguntó el menor con su voz algo quebrada, al parecer se había puesto a llorar mientras que su pareja no estaba.

-Claro que si Andy, nunca te dejaría, siempre regresaría por ti hermoso.- Este tapó bien a su linda pareja para luego acariciar su mejilla suavemente

Andrés se acurrucó en Ari y cerró sus ojos descansando por fin, luego de unos minutos el mayor imitó su acción quedando ambos dormidos.

Ya en la madrugada específicamente a las 5:00am Ari se despertó pues ya se había acostumbrado a despertarse sin la necesidad de alarmas, ya no confiaba en estas.

Se sentó en la cama cuidadosamente sin apartar a su pareja y se puso a acariciar el cabello de este para intentar despertarlo sin agresividad o siendo muy brusco, no quería que se pusiera de malas.

Al despertarlo tuvieron un día bastante normal pero para Andrés algo interminable y muy intenso. No le gustaba estar rodeado de mucha gente y menos desconocida.

Bueno, pero ya tenemos que avanzar un poco con el tiempo para ignorar la interminable rutina de estos dos, Ari ya casi acababa su carrera la cual era Negocios internacionales, siempre le había gustado ese tipo de cosas y digamos que "ilegalmente" ya la estaba ejerciendo (solo un poquito). Andrés ya estaba en aquello aunque le faltaba todavía mucho, ya que se encontraba estudiando dos cosas, Ingeniería Informática e Ingeniería Electrónica. No se pudo decidir por ninguna de las dos pues le encantaba hacer ese tipo de cosas y terminó escogiendo las dos a la vez.

En todo este tiempo ya habían pasado dos o tres años lo que significaba que su bebé ya había nacido, ¿qué cómo le hacía Andrés?... no exactamente siempre lo tenía que cuidar el menor también Ari le ayudaba y mucho, ya que el pasaba más tiempo en la casa y su pareja ya llegaba cuando era de noche cosa que nunca le gustó a ninguno de los tres, si tres porque también se sentía abandonada la criatura.

Ari quería que Andrés le pusiera el nombre a su bebé pero al final se lo terminó poniendo él pues su pareja tenía miedo de arrepentirse toda su vida y tampoco quería que se estresara mucho. Gonzalo se terminó encariñando con el apodo que le había puesto al menor "Andy" y se lo terminó poniendo a su niño.

Ari en la actualidad se encontraba cocinando algo que pudiera comer su bebé quien ya tenía dos años, ya tenía la capacidad de hablar un poco y comer cosas ligeras al igual que pequeñas.

-Mmmm... ¿qué quisieras comer?- Este se quedó agachado en frente de su niño pensando que sería bueno para darle.

Andy no sabía que pasaba pero le daba risa ver tan pensativo a su padre y soltaba una pequeña risa cosa que le parecía muy tierna ah Ari pues era igual que Andrés en su totalidad a excepción de que tenía el mismo color de ojos que Gonzalo. (Eso fue lo mejor que le pudo haber pasado a Saavedra.)

Hablando del menor justamente había llegado a casa, muy temprano a excepción de todos los días. -Hola amores míos.- Dijo el menor felizmente espantando a su pareja.

Ari se levantó y fue rápidamente con Andrés abrazándolo. -Hola lindo, ¿todo bien?- Dijo separándose de su abrazo.

-Sip, ¿y mi bebé?- Andrés ya se había acostumbrado a su niño, antes le parecía algo raro pero cuando lo vio por primera vez no pudo parar decirle lo mucho que se arrepentía de haber pensando todos los días que se sintió triste y mal cuánto lo despreciaba, enserio se arrepentía mucho.

Ari se quitó del camino y dirigió la mirada en la cocina dándole a entender a su pareja que ahí se encontraba. Andrés fue rápidamente y cargó a Andy abrazándolo.

-Que sepas Andy que tu madre se escapó  nada más para verte...- Esto lo susurró pero Gonzalo si escucho eso.

-Ya sabía...- Dijo Ari y Andrés soltó una pequeña risa al igual que su bebé, el menor lo acomodó en su pecho para que descansara mientras que su novio cocinaba.

Al terminar de cocinar todos comieron y Ari subió arriba para acostar a su bebé y que durmiera un poco. Pues si dormía mucho sería imposible hacer que se duerma en la noche.

Cuando el mayor bajo Andrés lo abrazó. -Muchas gracias Ari... sin tu ayuda no me encontraría emocionalmente estable en este momento, no tendría ninguna ayuda y todo sería un caos....

Gonzalo abrazó a Andrés de su cintura y le dio un dulce beso. -No era necesario, eso ya lo sabía hermoso, esos fueron los términos y condiciones que acepté al estar contigo y no me arrepiento.- Ambos se unieron en un dulce beso y regresaron a lo suyo, cuidar a su bebé.

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F I N

Shine a little of your light in my world of loneliness...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora