Capítulo 24

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Capítulo 24: Confusión.

Nico Robin.

Mamá había gritado aterrada, había gritado lo suficientemente alto como para que yo pudiera escucharla por encima del ruido del viento rodeando mi habitación y nublando mis sentidos.

Zoro me soltó al escuchar el grito dejándome un poco desorientada y lo vi retroceder corriendo y saltar por el techo hacia el suelo, ¿qué se supone que tenia que hacer ahora? ¡Mi mamá! Tenia que ir por mi mamá y asegurarme de que estuviera bien.

Por que no sabia si ese grito era de dolor o de asombro, yo no quería que le pasara nada malo.

Cerré la ventana de golpe porque el ruido me estaba alterando, me vi envuelta ahora en un silencio ensordecedor qué por unos segundos creí que me había imaginado todo, pero alcancé a escuchar el forcejeo abajo así que me di cuenta que no era una maldita broma.

Podía escuchar los gritos de mamá llamando mi nombre a medias, por que de pronto se escuchaba ahogada y el terror se presentó en mi cuerpo a modo de escalofríos cuando me di cuenta que habían pasado ya varios minutos sin sonido.

Me quede de pie en el mismo lugar de mi habitación sin saber como reaccionar ante la situación, tenia miedo de bajar y ver qué era lo que estaba sucediendo, de encontrar una situación traumatica, pero tenia más miedo de que pudieran hacerle algo a mi mamá y que yo supiera que pude haber hecho algo pero por miedo no lo había evitado.

¿Y todo por un seguro de vida? ¿Eso era lo que quería mi papá? ¿¡Un maldito seguro de vida!? ¿Y cómo planeaba cobrarlo? ¿Matandonos? ¡Iría a la cárcel!

Escuché de nuevo un grito de mamá y comprendí de golpe la situación, papá quería hacer una locura con nosotras, él quería matarnos para tener el seguro en su poder, ¿Eso era algo normal? ¡Era una locura!

Y mamá la estaba sufriendo.

Corrí para abrir la puerta de la habitación pero algo me lo impidió, quise ponerle llave a la puerta cuando me di cuenta que había alguien del otro lado pero comenzaron a empujarla, recargue mi hombro contra la puerta para que no pudieran abrirla, pero bastaron unos cuantos segundos para que le dieran un fuerte golpe y me hicieran caer al suelo.

Levanté la vista y miré a una persona de pie en la puerta, tenia el rostro cubierto y me estaba mirando con fijeza, por un segundo pensé que podría tratarse de Zoro, pero esta persona tenia los ojos negros y vacíos, me estaba mirando de forma desinteresada.

Se agachó y me tomó de los tobillos para arrastrarme así que grité y me giré sobre mi misma, logré que me soltara y corrí por el pasillo en busca de la salida hasta bajar las escaleras corriendo para encontrar a más gente en la sala de estar abarcando el lugar.

¿Qué estaba pasando? Mamá estaba en el suelo, la tenian sujeta por los codos con fuerza y había una segunda persona frente a ella, ¿En donde estaba mi padrastro? ¿Por qué había dos personas viéndose tan grandes?

Escuché la puerta ser golpeada con fuerza, temblaba con fuerza ante cada golpe, ¿Y si ese era Zoro? ¿Cuanto tiempo me tomaría llegar a la puerta para abrirla?

Mamá dirigió su mirada hacia mi y miré con horror como estaba sangrando, tenia la clara pinta de que la habían golpeado, estaba temblando y cuando su mirada cayó sobre mi alcance a ver un gesto de preocupación.

De pronto me sentí caer hacia el frente seguido de mucha presión, me habian lanzado al suelo y alguien había caído sobre mi, me sentí mareada de inmediato y sin aire, pero seguía escuchando los fuertes golpes en la puerta principal que anunciaban que había alguien afuera queriendo entrar.

Los Rumores Del Trío MonstruosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora