en un mundo donde dos poderosas manadas han mantenido la paz gracias a un frágil tratado, el rio que los separa es la única barrera entre la armonía y el caos. ¿pero que pasara cuando dos omegas valientes y rebeldes desafían las reglas por amor y...
la mañana estaba cargada de una energia brivante y caotica, un preludio de la gran celebracion de la luna llena que tendria lugar esa noche. el aire fresco de la mañana habia dado paso al bullicio incensante que llenaba cada rincon de la manada. los sonidos de tambores y martillos golpeando, madera crujiendo y voces que se alzaban entre ordenes y risas resonaban por todo el territorio. los lobos corrian de un lado a otro, arrastrando decoraciones y preparando los altares sagrados bajo la atenta mirada de los lideres y ancianos.
los olores a incienso y hierbas ardian en el aire, mezclandose con el aroma de los alimentos cocinandose a fuego lento. grandes hogueras habian sido encendidas,y el crujir de las llamas se entrelaaban con el sonido metalico de las ollas y caserolas siendo removidas, preparando el festin que unirian a todos al caer la noche . los cachorros correteaban por doquier, emocionados por lo que vendria, mientras que las madres intentaban sin exito mantenerlos bajo control. para algunos de ellos seria su primera transformacion en lobos.
cada rincon de la aldea bullia con vida, el ambiente cargado de espectacion y anticipacion, las tiendas eran adornadas con flores silvestres que colgaban en las entradas. ondeando suavemente al ritmo de la brisa.
en el centro del campamento, los mas jovenes ensayaban sus bailes rituales, sus pies descalzos golpeando ritmicamente el suelo mientras seguian las melodias de los tambores, que marcaban el pulso de la celebracion.
el cielo aun era claro, pero ya se percibia la promeza de la noche. la luna, aun oculta, seria la protagonista indiscutible cuando llegara el momento, y todos en la manada lo sabian.
la tencion, el ajetreo, y la emocion palpable era solo el comienzo de lo que seria una velada de euforia, misterio y talvez, revelaciones inesperadas.
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manada del norte
jungkook fue el primero en abrir los ojos y vio a su lado a tae durmiendo tan tranquilamente, el alfa se quedo mirandolo y acariciando su rostro por unos segundos, causando que el omega se moviera en ratos.
el sonido de unos fuertes tambores y bullicio de la gente lo levantaron rapido de su cama que corrio a ver que pasaba afuera.
— carajo olvide que hoy es la celebracion de la madre luna. - se dijo el alfa golpeando su frente. corriendo adentro movio fuertemente a yoongui, quien aun seguia dormido apoyando su cabeza en el pecho de su omega.
—pero ... que te pasa? - pregunto el alfa aun con los ojoscerrados.
— LEVANTATE, NOS OLVIDAMOS DE LA CELEBRACION DE LA MADRE LUNA. - dijo el alfa algo exaltado. logrando que yoongui se despierte de un salto.
— mierda mierda ¿que haremos? - dijo el alfa cambiandose lo mas rapido posible.
— no lo se pero por debemos pensar ¿como sacar? a nuestros omegas seguros hacia el bosque para que regresen a su manada. - hablo jungkook sentandose en su cama.
