Draco Malfoy | One Shots 🐍🍏

Lump of Coal

Situación: La lectora que es de Ravenclaw esté saliendo con Draco y sus compañeros de casa comienzan a excluirla, por lo que realmente necesita el apoyo de Draco

Advertencias: tal vez un poco triste

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Draco tenía su brazo colgado alrededor de tu cuello mientras caminaban hacia el Gran Comedor juntos para desayunar. Pansy, cuyos ojos habían estado fijos en las puertas esperando la llegada de Draco, miró con fastidio al verlo. A pesar de que habías estado saliendo con él desde el tercer año, Pansy no creía que alguna vez se acostumbraría a ver a una Ravenclaw del brazo de su Príncipe de Slytherin. Y, sobre todo, no podía comprender cómo alguien como tú conseguía a alguien como él.

Ella había intentado indefinidamente hacer que Draco terminara las cosas contigo desde que empezaron a salir, y casi había funcionado al principio de la relación debido al hecho de que había intentado enviar a Harry Potter hacia ti para ponerlo celoso. Casi funcionó, pero a regañadientes pudiste resolver todo con la ayuda de tus mejores amigas: Ella, Sofía y Lucy.

Al principio de tu relación con Draco, todos tenían muchas dudas sobre ustedes dos. Dado que a ninguno de ellos le gustaba Draco y viceversa, era una lucha constante. Trabajaste sin parar tratando de unir los lazos con ellos, pero nunca parecía funcionar.

Estabas en la sala común de Ravenclaw, poniéndote al día con la tarea con tus amigos. Sin embargo, como de costumbre, todos se distrajeron y se perdieron en conversaciones de chismes.

-¡Chicos! ¿Escucharon lo que Mason le hizo a su novia el otro día? -dijo Lucy entusiasmada, cerrando de golpe su libro con un fuerte chasquido. Captando toda tu atención, pusiste tus papeles sobre la mesa frente a ti para participar en la discusión.

-No, ¿qué? -respondió Ella, con una gran sonrisa en todo su rostro.

-Escuché que le compró rosas. ¡Qué gran sorpresa! -comentó Sofía, poniendo los ojos en blanco.

-Sí, le compró rosas, PERO también le compró un anillo de promesa. ¡¿Viste el tamaño que tenía?! Era más grande que mi frente -se rió Lucy, cayendo dramáticamente en su asiento. Tú te reíste.

-Tienes razón, tu frente es bastante grande -bromeaste mientras ella te daba un golpecito en el brazo.

-Y eso no es todo, ¡también le regaló un hermoso collar de gemas que cambia de color a cualquier color que le plazca! -terminó, haciendo pucheros de celos.

-Deberías haberlo esposado cuando tuviste la oportunidad, T/n -dijo Ella, bebiendo un poco de té.

Antes de que tú y Draco salieran juntos, Mason sentía algo por ti. Pero no todo era arcoíris y sol. Te observaba a donde quiera que fueras desde la distancia y dejaba regalos al azar frente a tu habitación. Para algunos, puede parecer dulce, pero para ti, era casi espeluznante. En el momento en que comenzaste a acercarte a Draco, todo terminó.

-Sí, hay un problema con ese El, era espeluznante y estoy felizmente conquistada por el amor de mi vida, Draco -respondiste. Tus amigos no respondieron y evitaron torpemente el contacto visual contigo. La atmósfera se volvió monótona ya que nadie sabía con quién hablar primero.

Sofía se aclaró la garganta. -De todos modos, ¿han oído que Ryan y Connor empezaron a salir el otro día?

Lucy jadeó. -¡¿En serio?! ¿Pensé que eran solo amigos?

Verás, yo también pensé eso hasta que los vi besarse... -respondió.

Continuaron con su conversación, pero tú te desconectaste, ya no te interesaba. Odiabas lo incómodo que se volvía todo a su alrededor cada vez que mencionabas a Draco.