Feliz Navidad

760 87 23
                                    

—Uy, qué tranquilo está esto —comentó Chiara al entrar en la heladería y encontrarla completamente vacía.

—Nadie se toma un helado en Navidad —replicó Violeta, encogiéndose de hombros con obviedad.

—¿Los malos se han ido de vacaciones? No es que me importe, pero al Intersect también le vendría bastante bien un descanso —bromeó apoyándose sobre el mostrador—. Por cierto, tenemos una cita falsa mañana. "Navidad con las Oliver" —canturreó emocionada.

—Ah... eh, gracias por la invitación, pero no celebro la Navidad —confesó Violeta, sin emoción en el rostro.

Chiara soltó una risilla incrédula.

—Perdona, ¿has dicho que no celebras la Navidad?

—Prefiero no hablar del tema —la pelirroja se aupó para quedar sentada sobre la barra, justo frente a ella.

—Pero mujer, si es Navidad... —Para la inglesa, la Navidad era la mejor época del año, y ya podía sentir un cosquilleo de emoción recorrerle el cuerpo—. No me puedo creer que digas eso, ¿vale? —Violeta sonrió al ver el enfurruñamiento de Chiara—. Bajo esa fachada de espía, eres una persona como todo el mundo. Vamos, dime, Vio, ¿tan siniestra era la Navidad para ti?

—Mi Navidad era el gran timo anual al Ejército de Salvación —respondió con una sonrisa triste.

—Vale, sí. Un poco diferente del resto... —aceptó concediéndole el punto—. Pero en mi casa significa gambas con mayonesa, pijamas, la chimenea de pega encendida y escuchar a Mariah Carey en bucle —continuó, con sus ojos verdes brillando de ilusión. Violeta la miraba, enternecida. —No acepto un "no" por respuesta, así que, agente Hódar, prepárate para la mejor velada del año —agregó con un tono travieso, para después recibir una servilleta voladora en la cara.

Tras probar la nueva creación de la pelirroja, un helado con sirope de pistacho y chips ahoy, Chiara se despidió y volvió al ElectroPlanet después de su agradable descanso.

Al llegar, se encontró con la mayoría de los trabajadores disfrazados de elfos, congregados alrededor de una televisión que mostraba la noticia de una persecución policial por la A6, cubierta por Antena 3.

—Veinte pavos a que termina con la poli pillando a ese pirado —exclamó Martin, decidido a aumentar sus ganancias con su intuición.

—Yo digo que acaba en un tiroteo y quizás con rehenes —añadió Nerea, lanzando un fajo de billetes sobre la mesa.

—Por favor... está clarísimo, lleva un "me rindo" pegado en la frente —comentó Lucas, señalando al rostro del hombre en el coche, que aparecía en pantalla a través de las cámaras del helicóptero de noticias.

Martin rápidamente recogió la pasta de la apuesta, mientras otros compañeros se unían a la puja, todos comentando emocionados el desenlace que esperaban de la persecución.

—Me alegra ver que os invade el espíritu navideño —comentó Chiara con una sonrisa irónica al observar cómo el equipo bromeaba y apostaba sobre la persecución policial que veían en la televisión.

Después de escuchar la habitual charla de Manu Guix, quien les recordaba la importancia de la profesionalidad en la temporada festiva, Chiara regresó a su puesto, esperando que la tienda abriera en una hora. Sin embargo, apenas se acomodaba cuando vio a su hermana Denna y a Alex golpeando suavemente el cristal, ambos sonriendo.

Sin dudarlo, se acercó para abrirles.

—¿Qué hacéis aquí tan temprano? —preguntó con una sonrisa.

—Queríamos aprovechar el descuento para familiares, ya sabes —respondió Denna, casi dando saltitos de emoción.

—Olvídate de mi regalo —dijo Alex con aire despreocupado.

LA ESPÍA QUE ME ENAMORÓ // KIVIWhere stories live. Discover now