Primer Amor

The Grand Finale: A Love and a Medal

Rose se dirigía a casa después del último examen, sintiéndose ligera y emocionada por lo que vendría. Mientras caminaba, envió un mensaje a Lily y Harper, contándoles sobre la invitación de Evans para salir después de la competencia de matemáticas. Cuando les mencionó que Evans le había pedido que se arreglara "más linda de lo normal", ambas respondieron de inmediato con entusiasmo y emojis de corazones.

—¡Rose, eso significa que tiene algo especial preparado! —exclamó Harper cuando se encontraron en la esquina de la calle principal.

—Sí, ¡seguro que es el día! —agregó Lily, sonriendo como si lo supiera todo.

Rose las miró confundida mientras seguían caminando.

—¿El día? —preguntó, sin entender.

Harper y Lily compartieron una mirada cómplice, ignorando por completo su confusión.

—Vamos, Rose. Hoy no es solo la competencia. Algo grande va a pasar, lo siento. ¡Tienes que estar increíble! —dijo Lily, guiñándole un ojo.

Antes de que Rose pudiera protestar, Lily y Harper la arrastraron hacia un salón de belleza cercano. Apenas se sentaron, Harper comenzó a discutir con una estilista sobre el peinado perfecto para la ocasión.

—Chicas, es solo una competencia de matemáticas —dijo Rose, tratando de calmar el entusiasmo—. No tengo que estar tan elegante. No es una cena de gala ni nada de eso.

Lily soltó una risita, ignorándola completamente mientras sacaba un vestido de su bolso.

—Ya lo sé, pero tú no lo entiendes. Confía en nosotras —dijo mientras le entregaba el vestido a Rose.

Después de un rato, Rose salió del salón luciendo más elegante de lo que había imaginado. Un vestido sencillo pero hermoso, combinado con un peinado que Harper y Lily insistieron en que era "perfecto". Aunque sentía que todo esto era excesivo para una competencia de matemáticas, se dejó llevar por la emoción de sus amigas.

Subieron al auto de Lily y se dirigieron al lugar de la competencia. Mientras se estacionaban, Rose sintió mariposas en el estómago, no solo por la competencia, sino también por la idea de lo que Evans podría tener planeado después.

Al entrar al auditorio, el ambiente estaba lleno de tensión competitiva. El lugar estaba casi lleno de espectadores y competidores de todo el país. Lily y Harper la llevaron rápidamente a sus asientos en el centro del lugar, y justo cuando se acomodaban, Rose vio a Evans detrás del escenario, ajustándose su chaqueta y hablando con otros participantes.

—Está concentrado —murmuró Harper, quien notó la mirada de Rose.

—Claro que lo está —respondió Lily—. Es una competencia importante.

Evans, como si hubiera sentido que lo observaban, levantó la cabeza y miró hacia el público. Por un segundo, sus ojos se encontraron con los de Rose. Parecía distraído, como si estuviera pensando en algo más que matemáticas. Rose sintió un pequeño estremecimiento, pero no estaba segura de si había interpretado bien su expresión. ¿Estaba realmente mirándola o simplemente buscando entre el público?

La competencia comenzó con una ronda de preguntas rápidas. Los mejores estudiantes de matemáticas de todo el país respondían en cuestión de segundos, y Evans no era la excepción. Cada vez que le tocaba el turno, contestaba con seguridad, lo que provocaba aplausos y murmullos de admiración entre el público.

Después de varias rondas, solo quedaban dos competidores en pie: Evans y una chica de otro colegio renombrado. Los jueces anunciaron la última pregunta de desempate. La tensión era palpable en el auditorio.