Brat Camp

CUARENTA Y UNO

Louis se encontraba pensando si era un cobarde, uno muy grande, como para admitir sus emociones y simplemente pedir una conversación ¿O esa timidez y miedo solo había entrado en juego cuando se trataba de sus sentimientos por un tal Harry Styles? Louis no estaba muy seguro de la respuesta, pero sabía que la razón por la que estaba acostado solo en la cama era porque había cometido un error.

Esa noche, había estado de rodillas, chupando la polla de Harry y haciendo un muy buen trabajo. Había hecho que el Dominante se corriera y había sido increíble. Luego, una vez que recuperó el aliento, Harry había pasado los dedos por el cabello de Louis, sonriéndole con cariño mientras sugería que hablaran. Era lo correcto, incluso saludable. Y no era como si "hablar" fuera realmente difícil. Una persona decía algo, la otra persona escuchaba y luego decía algo a cambio. Cosas bastante simples.

Por supuesto, Louis, como el ridículo idiota que era, se quedó paralizado ante la idea de "hablar" de las cosas. Porque "hablar" significaba "sentimientos" y "confesiones" y luego tendrían que etiquetar lo que estaba sucediendo entre ellos y eso lo hacía todo demasiado real. Entonces Louis se puso de pie de un salto, no le importó que el semen de Harry todavía estuviese salpicado por todos sus pómulos y parte de la boca. Balbuceó algunas palabras incómodas sobre cómo "no había significado nada" y algo como "no seas tan sentimental, Styles". Luego se apresuró a regresar a su habitación y se lavó el desastre de la cara antes de dejarse caer en su cama.

Harry no había aparecido para intentar hablar con él y Louis no podía culparlo. El rechazo debió haberle dolido un poco. Si fuera al revés, Louis estaría mortificado y probablemente no querría volver a ver a Harry, y mucho menos participar en algo íntimo. Tal vez aún podría salvar la situación si simplemente volviera a la habitación de Harry, se disculpara y admitiera que había reaccionado porque tenía miedo. Pero parecía que el orgullo de Louis lo frenaba.

No durmió bien esa noche y cuando se despertó la siguiente mañana sintiéndose aturdido, notó que era más tarde de lo habitual. Normalmente estaban en el salón de desayuno a esta hora, pero Harry no había venido a despertarlo ni a realizar su inspección habitual. Así que Louis se vistió rápidamente antes de dirigirse a la habitación de Harry, golpeando tímidamente y cambiando de pie nerviosamente. No hubo respuesta y no parecía que Harry estuviera dentro sintiéndose mal por sí mismo ni nada.

Dirigirse solo al comedor se sintió extraño y cuando entró sintió que todos lo miraban, juzgándolo por lo que había sucedido con Harry. Por supuesto, sabía que nadie tenía idea de lo que había sucedido y a la mayoría ni siquiera le importaría. Puede que hubiera una o dos miradas casuales, pero en general nadie le prestaba atención a Louis. Aun así, hacer cola solo para desayunar se sentía insoportable. Llevando su bandeja, Louis ni siquiera estaba seguro de si sería bienvenido en su mesa habitual, el cabello rizado de Harry destacaba entre sus compañeros.

—Um… buenos días —saludó Louis torpemente cuando se unió a ellos.

—Buenos días, cariño —respondió Harry, pero no lo miró y el afecto que normalmente sonaba en su tono estaba dolorosamente ausente. Era obvio que solo estaba siendo educado porque lo que le interesaba era "tratar a las personas con amabilidad".

—¿Les gustó la fiesta? —Louis se obligó a preguntar, intentando fingir una sonrisa para los otros tres.

—Fue una mierda —dijo Zayn, mirando fijamente a Harry y Louis, claramente curioso.

—Bueno, me divertí —dijo Niall. —Ustedes dos se fueron bastante temprano —señaló. —¿Pasó algo interesante? —se atrevió a preguntar.

—Um… —Louis vaciló.

—No, ni una maldita cosa —respondió Harry y quedó claro que no era un tema para hablar.

—Ay —silbó Zayn. Louis lo miró con desgana. «Ay» parecía resumir bastante bien la situación.