Capitulo 🎩 19

33 10 2
                                    

Sintió una punzada de pánico

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sintió una punzada de pánico. ¿Estaba haciendo lo correcto o condenando a su hijo al mismo futuro que había tenido que soportar ella? Una infancia
marcada por la incertidumbre y la duda, con un padre que escondía sus ausencias bajo la capa virtuosa de estar manteniendo a su familia.

-Tiene que saberlo -Nattawin sintió que se le llenaban los ojos de lágrimas. -Pero necesito que entiendas lo que eso significa.

Mile frunció el ceño.

-Si no lo entendiera no estaría aquí.

Nattawin retiró la silla y se puso de pie algo vacilante.

-Así que todo esto se trata de ti, ¿verdad?.

-No estoy diciendo eso -mile se puso también de pie.

-Pues lo parece.

Nattawin lo escuchó inhalar el aire y su rabia se transformó en culpabilidad. No era justo retorcer sus palabras cuando Natt no estaba siendo sincero respecto a
sus propios sentimientos.

-Solo quiero decir que ser padre es un compromiso para toda la vida.

El rostro de Mile se endureció.

-Me gustaría decir que es algo que no voy a olvidar, pero dada mi propia infancia no puedo. Lo único que puedo decir es que estaré ahí para George... y para ti..

Nattawin sintió el corazón acelerado. Mile estaba diciendo lo adecuado y deseaba creerle, pero eso significaría crear en el una nueva espiral de miedo e incertidumbre.

-Bien -estaba tratando por todos los medios de que no se le notara en los ojos, pero mile lo empezaba a mirar con impaciencia.

-Bien -estaba tratando por todos los medios de que no se le notara en los ojos, pero mile lo empezaba a mirar con impaciencia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¿Ah, sí? Porque no me lo ha parecido.

Nattawin se movió rápidamente alrededor de la mesa y se colocó frente a el.

La palidez del rostro le hacía los ojos todavía más miel, y mile se pasó la mano por la cara. Necesitaba acción para contrarrestar el tirón del pecho. No tenía muy claro dónde estaba pisando, era territorio desconocido.

Magia ,Deseo Y MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora