𝐒𝐨𝐥𝐨 𝐭𝐮 (𝐋𝐚𝐦𝐢𝐧𝐞 𝐘𝐚𝐦𝐚𝐥)

Cap. 33

POV 'Elena

Estaba en mi cuarto, rodeada por todas las cosas que me hacían sentir en casa: mi PC, mis luces, los pósters de mis animes favoritos en las paredes, y, por supuesto, el set-up que me acompañaba en cada stream. Pero hoy, algo lo hacía aún más especial. No era un stream cualquiera. Hoy estaba celebrando mis 17 años, y el simple hecho de compartir este momento con mis seguidores me llenaba de una alegría inmensa.

Encendí la cámara y el chat explotó inmediatamente con mensajes de cumpleaños, emojis y felicitaciones. Me sentí abrumada, pero en el mejor de los sentidos. Todo el amor y el cariño que estaba recibiendo me hacían sentir realmente afortunada.

—¡Hola, hola a todos! —dije con una sonrisa radiante—. Hoy es un stream muy especial porque... ¡Es mi cumpleaños número 17!

El chat no paraba de moverse. Las palabras "feliz cumpleaños" y montones de emojis de tortas y globos inundaban la pantalla. Ver esa cantidad de mensajes en vivo era emocionante. Me acerqué un poco más para leer algunos.

—"¡Feliz cumpleaños, Elena! Te seguimos desde hace mucho y estamos muy felices de poder celebrar contigo"— leí en voz alta, sonriendo—. ¡Gracias, chicos! De verdad que hoy me siento muy agradecida por todo su apoyo. No saben lo importante que es para mí tenerlos aquí.

A medida que hablaba, la emoción se notaba en mi voz. Estaba nerviosa, sí, pero más que nada emocionada por lo que había planeado. Sabía que no estaba sola en esto; mis seguidores siempre estaban ahí, y hoy, más que nunca, quería hacer algo que nos conectara aún más.

—Y bueno, para hacer este stream aún más especial —continué, mientras mis dedos jugaban con una mechón de mi cabello—, tengo algunas sorpresas preparadas para ustedes. ¡Vamos a tener algunos invitados, y por supuesto, no faltarán los juegos que todos aman!

Los comentarios no paraban de llegar. "¿Qué invitados?" "¿Vas a jugar con alguien famoso?" "¡Queremos saber más!" El entusiasmo de la gente me contagiaba aún más. Sentí como el número de espectadores subía rápidamente, lo cual me hacía sentir mariposas en el estómago. Era increíble cómo el mundo virtual podía hacerte sentir tan conectada con personas de todos lados.

Mientras preparaba el primer juego, la puerta de mi habitación se abrió de golpe. Giré la cabeza y vi a Marta, mi mánager y amiga, entrando con una pequeña torta con velas encendidas. No pude evitar reírme al verla aparecer así, justo en el momento perfecto. El chat explotó nuevamente con emojis de torta y "aww's".

—¡Sorpresa! —exclamó Marta, con esa sonrisa suya tan característica, mientras colocaba la torta frente a mí—. Feliz cumpleaños, Elena.

—¡Gracias, Marta! —dije, levantándome para abrazarla. Luego me volví a la cámara—. Chicos, ya ven cómo me cuida esta mujer, ¿no? Siempre está atenta a todo.

—Es un placer —respondió Marta, riendo—. Pero la verdad es que todos estamos aquí por ti, porque te lo mereces.

El chat seguía lleno de energía, y algunos comenzaron a pedir que cantáramos el "Cumpleaños feliz". Les hice un gesto con las manos para que se unieran, aunque sabía que no podían cantar de verdad. Marta y yo comenzamos a cantar, mientras los emojis seguían fluyendo.

Después de soplar las velas y pedir un deseo (que mantendría en secreto, obviamente), me volví hacia el chat.

—Bueno, chicos, ¡es hora de los juegos! Pero antes, quiero agradecerles a todos ustedes. Este año ha sido una locura, y no podría estar más agradecida por tener una comunidad tan increíble que me apoya. Cada uno de ustedes ha sido parte de este viaje y, de corazón, les agradezco por todo el amor.