Un poco de Felicidad

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Akira seguía inconsciente en los brazos de Broly, su respiración era tranquila, pero el peso de la batalla y sus emociones intensas seguían marcados en su rostro. Broly la sostenía con delicadeza, tratando de volar con el mayor cuidado posible mientras avanzaba hacia la Corporación Cápsula. A su lado, Vegeta volaba en silencio, con la mirada seria, sin apartar los ojos de su hija y su compañero.

Vegeta (mirando a Broly): "Hiciste bien en detenerla... Aunque me cueste admitirlo, Akira estaba fuera de control."

Broly (mirando al frente, con preocupación en su voz): "No podía dejarla hacer algo que se arrepentiría toda su vida. Aunque Piccoro haya causado esto... Akira no es así."

Vegeta (serio): "Es mi hija, y lo que más odio es verla sufriendo así. Pero la situación es complicada. Tendremos que manejar esto con cuidado. No sé cuánto más podrá soportar sin quebrarse del todo."

Llegaron a la Corporación Cápsula, donde Bulma, Bra, y los demás ya esperaban ansiosos. Al ver a Akira desmayada en los brazos de Broly, las miradas de preocupación se intensificaron.

Bulma (corriendo hacia Broly): "¡Akira! ¿Qué le pasó? ¿Está bien?"

Broly (aterrizando suavemente con Akira en brazos): "Se descontroló... Tuvimos que detenerla antes de que cometiera una locura."

Bra (mirando a su hermana con lágrimas en los ojos): "No puedo creer que todo esto esté pasando... ¿Cómo pudo llegar a este punto?"

Vegeta (seriamente): "Tenemos que darle tiempo, pero también debemos hablar con ella cuando despierte. Esta situación no puede seguir así."

Broly (mirando a Bulma): "¿Puedo llevarla a su habitación?"

Bulma (asintiendo con preocupación): "Sí, sí, claro. Hay que asegurarnos de que descanse."

Con cuidado, Broly llevó a Akira a su habitación, seguido de cerca por Bra y Bulma, mientras Vegeta se quedó detrás, observando con una mezcla de preocupación y decisión. Sabía que el momento de enfrentar la verdad se acercaba, pero también que tendrían que manejarlo con el mayor cuidado si querían evitar que las tensiones se desbordaran aún más.

Broly acostó a Akira con suavidad en la cama, apartando un mechón de cabello de su rostro mientras la observaba con una mezcla de preocupación y amor.

Broly (susurrando mientras acariciaba su rostro): "No te preocupes, mi amor... Vas a estar bien. Todo esto pasará."

Akira, aún aturdida, comenzó a abrir los ojos lentamente. El cansancio de la pelea todavía pesaba en su cuerpo, pero al ver a Broly, su expresión cambió inmediatamente. Su enojo la invadió de nuevo, y se apartó bruscamente de su toque, frunciendo el ceño.

Akira (con voz cortante): "¿Por qué lo hiciste, Broly? ¿Por qué me detuviste?"

Broly (confundido, pero manteniendo la calma): "Akira, estabas a punto de hacer algo terrible. No podía dejarte matar a Piccoro, por más que lo odies en este momento."

Akira (levantándose de la cama, con ira en su mirada): "¡No entiendes! ¡Él arruinó todo! Sabía lo importante que era ese deseo para mí, y aun así se lo dijo a mi padre. ¡Todo esto es su culpa!"

Broly (intentando razonar con ella): "Lo sé, y entiendo que estés furiosa, pero no puedes dejar que la rabia te consuma así. No es la Akira que conozco, la que siempre busca el camino correcto."

Akira (mirándolo con ojos llenos de lágrimas, mezclando tristeza y frustración): "Broly, no quiero este bebé... No estaba lista para esto. ¡Todo se ha salido de control! Ni siquiera sé cómo pudo pasar. Todo por ese maldito deseo..."

AKIRA LA HIJA JAMAS CONTADA DE VEGETA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora