Dolor

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Akira y Piccolo seguían teniendo muchas aventuras. Habían pasado ya 6 meses desde que partieron de la Tierra en busca de nuevos desafíos y entrenamientos. Cada planeta visitado ofrecía nuevas lecciones y desafíos que fortalecían sus habilidades y su vínculo como compañeros de viaje.

Ahora, en un planeta desconocido, exploraban un laberinto de ruinas ancestrales en busca de un artefacto legendario que se decía poseía el poder de amplificar el ki más allá de los límites conocidos. A medida que avanzaban por los pasillos oscuros y llenos de misterios, enfrentaban trampas ingeniosas y guardianes ancestrales que protegían celosamente el artefacto perdido.

Akira: (respirando profundamente) Esto es increíble, Piccolo. Nunca imaginé que encontraríamos un desafío así aquí.

Piccolo: (sonriendo) Así es. Este lugar está lleno de historia y poder. Estoy impresionado por cómo has mejorado tu habilidad para desaparecer por segundos. Es una técnica que pocos dominan tan rápido como tú.

Akira: (agradecida) Gracias, Piccolo. Tu entrenamiento ha sido fundamental. Sin ti, no estaría aquí enfrentando estos desafíos.

Piccolo: (serio) Recuerda, Akira, el poder no es solo fuerza física. También reside en la sabiduría y la capacidad de adaptación. Eres fuerte, pero también eres inteligente y perceptiva.

Mientras avanzaban por las ruinas, Akira y Piccolo se enfrentaron a un guardián formidable que desafió todas sus habilidades. Trabajaron juntos en perfecta sincronización, combinando sus técnicas y estrategias para superar cada obstáculo. Finalmente, alcanzaron la cámara central donde el artefacto místico aguardaba.

Akira: (contemplando el artefacto brillante) Es hermoso. ¿Crees que esto nos ayudará en nuestro entrenamiento?

Piccolo: (analizando el artefacto) Es posible, no lo se.

Akira:Oye piccolo crees que esta noche podamos ir a aquella montaña, (selaño la montaña).

Piccolo: Claro akira solo tomare un baño en la nave. (Se fue a la nave)

Akira: (penso), Hoy es el dia que le dire a piccolo que estoy enamorada de el, es e hoy.
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Llego la noche, Akira y Piccoro fueron a la montaña y empezaron a platicar de su viaje, hasta que akira dijo.

Akira: (suspiro),

Akira: Quiero decirte que... estoy enamorada de ti.

Piccolo: (asombrado no pudo decir nada).

Akira: la verdad te amo, y pues pienso que aqui podriamos vivir es un planeta lindo, los dos trabajariamos y cuando hayamos ahorrado lo suficiente podriamos comprar una casa, y tal vez abrir un negocio propio. (Sus ojos se iluminaban).

Piccolo: (no sabia que decir).

Akira: en este planeta tiene una gran zona comercial, estoy segura de que podriamos vivir de una de tus grandes ideas.

Akira: y al tener un buen empleo...es algo vergonzoso pero podriamos planear tener un hijo.

(Pensativa). Akira: Aunque seria medio Namek y sajayin a si que seguramente seria muy inquieto ya sea niña o niño o gemelos o trillizos, se que serian unos hijos fuertes y adorables y tu y yo unos padres amorosos y pacientes Piccolo.

Piccolo: (solo la escuchaba).

Akira: No todo seria como lo imaginamos, tao vez tengamos puras hijas y ningun hijo y quiza no te enorgullezca la familia.

Piccolo: Pero...pero.

Akira: (No lo dejo hablar), Pero incluso cuando ellos hayan crecido, y lleguen a la edad en que sean frios y distantes... yo seguire a tu lado piccolo, seriamos famosos con los vecinos como una pareja cariñosa... tomandonos el tiempo de vivir juntos una vida plena envejeciendo.

AKIRA LA HIJA JAMAS CONTADA DE VEGETA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora