Pues...

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El sol apenas comenzaba a asomarse por el horizonte cuando Akira despertó. Miró a su bebé, que dormía plácidamente, y con alivio notó que la fiebre había bajado. Suspiró con gratitud. Tocaron suavemente la puerta, y al abrirla, vio al abuelo de Chikara esperando en el umbral con una expresión seria pero afectuosa.

Abuelo (con tono suave): "Pequeña, tenemos mucho que hablar."

Akira asintió, sabiendo que esta conversación era inevitable. Cargó a su hijo con delicadeza y lo sostuvo cerca de su pecho. Juntos, ella y el abuelo bajaron hacia la cocina. El ambiente era cálido, y el aroma a café recién hecho llenaba el aire. El abuelo sirvió una taza para cada uno y se sentaron en la mesa, el ambiente cargado de silencio mientras él tomaba un sorbo.

Abuelo (mirándola fijamente): "Akira, ¿dónde está Broly? La última vez que te vi, estabas con él en tu luna de miel en este lugar. ¿Qué ha pasado? No entiendo por qué estás aquí sola con el bebé."

Akira apretó los labios, sabiendo que tendría que ser honesta. No había ningún lugar al que huir. Finalmente, respiró hondo y comenzó a hablar, desahogándose de todo lo que había pasado.

Akira (mirando su taza, con la voz baja): "Broly... Broly no sabe que estoy aquí. Me fui mi casa anoche sin decirle nada. Dejé una carta explicándole, pero... después de todo lo que hemos pasado juntos, simplemente ya no puedo más."

El abuelo se quedó en silencio, observándola atentamente mientras ella continuaba.

Akira (con tristeza): "Hemos tenido tantas peleas... esta última fue la peor. Yo siempre fui fuerte, entrené para ser la mejor. Pero desde que estoy con él, me siento... débil. Como si ya no pudiera ser yo misma. Todo se siente diferente, y aunque lo amo... no sé quién soy ahora. Mi vida no es lo que imaginé."

El abuelo asintió lentamente, dejando que Akira expresara todo lo que tenía guardado.

Akira (con más desesperación): "Y para colmo... mis padres, Vegeta y Bulma, quieren adoptar a mi hijo. No me ven como una buena madre, y la verdad es que... tal vez no lo soy. No he sabido cómo cuidarlo. Siento que todos esperan que me rinda y les deje al bebé, pero no puedo hacerlo. No puedo dejar que lo críen ellos, porque... es mi hijo. Aunque nunca quise tener uno, ahora lo tengo y lo amo."

El abuelo dejó su taza en la mesa y suspiró profundamente.

Abuelo (con comprensión): "Es normal sentirte perdida, Akira. Ser madre no es fácil, y más cuando llevas tanto peso encima. Pero huir no resolverá nada. ¿Has pensado en hablar con Broly? Tal vez él pueda entender lo que estás pasando."

Akira (meneando la cabeza): "No lo creo, abuelo. Broly... Broly no entiende. Él me ama, sí, pero no entiende lo que significa perderse a una misma. Siempre ha sido fuerte, siempre ha tenido un propósito. Pero yo... Yo era alguien antes de estar con él, y siento que lo he perdido todo."

Abuelo (mirándola con sabiduría): "El amor no debería hacerte perder quién eres, Akira. El amor debería fortalecerte, no debilitarte. Pero a veces, cuando todo se siente demasiado, huir parece la única solución. Aún así, ¿estás segura de que irte sin más es lo correcto? ¿Dejarle una carta y marcharte?"

Akira (con lágrimas en los ojos): "No lo sé, abuelo. Solo sé que no puedo seguir así. No quiero ser débil, pero tampoco quiero perder a Broly. Y mi hijo... no sé cómo ser su madre, pero quiero aprender."

El abuelo la miró con ternura, entendiendo la lucha interna de Akira. Él siempre la había visto como una guerrera, pero también sabía que incluso los más fuertes pueden sentirse perdidos.

Abuelo (suavemente): "Tienes que tomarte tu tiempo, Akira. Nadie espera que seas perfecta. Si decides quedarte aquí un tiempo, estás más que bienvenida. Pero al final, debes tomar una decisión para tu futuro, y también para el de tu hijo."

AKIRA LA HIJA JAMAS CONTADA DE VEGETA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora