Un Secreto En La Sangre (Libro 1)

XXXVIII - ¿...?

~Oliver~
Sábado 02/11
Búscame. 

Viernes 01/11
Comienzo a abrir los ojos poco a poco en medio del silencio. Todo está oscuro y las cortinas solo dejan traspasar ligeramente la poca luz de afuera, ya que el sol aún no se alzaba lo suficiente como para iluminar todo, dando un aspecto frío a la habitación. 

Vuelvo a cerrar los ojos e inhalo profundamente a través de mi nariz para después exhalar el aire. Me quedo un rato así y nuevamente abro mis ojos, mirando la oscuridad; está un poco más iluminado que hace unos minutos, pero el sol aún no se logra ver y da una sensación menos fría que antes, pero no cálida. Tomo asiento y miro mi alrededor para después mirar mis manos. 

Tengo la sensación de que hay alguien en la habitación, justo en la esquina. Pero no quiero mirar. No quiero. ¿Qué pasará si lo hago? No se si quiero saberlo. Es justo como aquella vez y tengo miedo de que sea igual. ¿Quién estará esta vez? ¿La misma sombra o una diferente? ¿Podré escapar? ¿Qué querrá? 

Siento la inquietud crecer en mi interior y su mirada parece querer perforar mi ser al no despegarse de mí. Puedo sentirlo, maldición, lo hago y eso me está jodiendo demasiado. Creo que me da más miedo no mirarlo y pensar que hará algo sin que yo siquiera lo note. Solo miraré un poco... 

─... ─alza lentamente la mirada en medio de la sensación de intranquilidad que sentía y nota una figura borrosa en la esquina cerca de la puerta. Un hombre. ¿O un chico? No lo sabía bien. 

Siento un escalofrío recorrerme por toda la espalda, mi cuerpo se petrifica y, contrario a veces anteriores, no reacciono. ¿Por qué? No tengo ni puta idea y creo que mi cabeza va a explotar de tanto estrés y nerviosismo.

Me quedo estático y mirándolo fijamente, pero pienso que es por puro pavor que inunda en mis extremidades y la sangre misma al no saber qué hacer. Él tampoco deja de mirarme, sus ojos de aquel color verde intenso brillan y resaltan contrastando con su figura sombría e inconsistente.

No se quién es, no lo había visto antes y su forma de actuar no es normal comparado con otras sombras en veces anteriores. Es como si estuviera al acecho, pero sin intenciones de atacar. Su mirada tan peculiar y diferente a la del resto es como si presentase un leve rastro de vida. 

Un tanto familiar.

Comienza a dar pasos lentos hacia la cama y sus ojos empiezan a tornarse de un tono rojizo que me hace sentir más escalofríos por todo el cuerpo. No puedo hablar o gritar, siento que si lo hago saltará encima mío en cualquier momento. Algo bastante contradictorio, suponiendo que realmente no quiera hacerme daño. Parece evaluarme. 

¿Qué es lo que quiere? ¿Aterrorizarme? ¿Causarme pesadillas? ¿Aniquilarme ahora que sé que me pueden tocar? No se qué hacer, mi mente no formula como otra veces una idea de escape y eso me está aterrando, me frustra, me da pánico. Creo que voy a enloquecer de tantos pensamientos que tengo en mi mente hecha un desastre. 

¿Qué está pasando? No lo entiendo. No entiendo nada. ¿No hay nadie despierto? Seguramente sí, no puedo ser el único, no es tan temprano. Debo de... Debo de intentarlo. 

─A-Alguien... Alguien... ─murmura bajito a duras penas. Su voz como un débil hilo. 

Trago saliva despacio y respiro con sumo cuidado como si un suspiro pudiese provocar que me atacase. No obstante, a pesar de su posición amenazante, no aparecen intenciones de atacar y se mantiene expectante. Por lo menos por ahora. Simplemente me mira y ese simple hecho me hace sentir incómodo e inquieto. 

─...¿Qué... Qué quieres?... ─susurra de forma débil que duda que la sombra lo haya escuchado, aunque lo más probable es que sí. 

Se acerca cada vez más y yo estoy como una estatua en mitad del acecho. Mis piernas no reaccionan. Lo he intentando y no puedo, es como si hubiese perdido la movilidad de mi cuerpo sin razón alguna con excepción de la cabeza. ¿Es por el miedo? Todas las veces anteriores el miedo hacía el efecto contrario, ¿Qué es diferente esta vez? ¿Qué es lo que me tiene así?