¡𝓗𝓮'𝓼 𝓪 𝓶𝓸𝓷𝓼𝓽𝓮𝓻. 𝓨𝓸𝓾 𝓱𝓪𝓿𝓮 𝓽𝓸 𝓴𝓲𝓵𝓵 𝓱𝓲𝓶, 𝓓𝓪𝓻𝔂𝓵!

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𝐁𝐥𝐚𝐜𝐤 𝐨𝐮𝐭 𝐝𝐚𝐲𝐬
𝐈 𝐝𝐨𝐧'𝐭 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐠𝐧𝐢𝐳𝐞 𝐚𝐧𝐲𝐦𝐨𝐫𝐞

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Cinco días pasaron, lo único bueno que Carl podría contar era que porfin le quitarían ese maldito collarin que tanto le fastidiaba, juraría que en ese momento le tenía más resentimiento que a nadie.

Mientras Denisse poco a poco y con cuidado iba desabrochando el collarín del cuello del chico, y cuando finalmente se lo quito, Rick y Gleen que estaban ahí presentes con el joven abrieron sus ojos de par en par sin poder evitarlo al ver el cuello del chico que estaba con moretones, su cuello tenía las claras marcas de los dedos de Alaska, las marcas estaban de un color violeta intenso, y algunas incluso verdes y rojas.

—¿Que, tan mal se ven?— cuestiono con ironía al ver las caras horrorizadas de los dos hombres.

Rick carraspeo y Gleen apartó la mirada, porque sin dudas esa no era una vista linda de ver, lucia dolorosa y de solo pensar en que el chico la tenía era triste.

—Perdón...Es que no esperábamos que se viera así de mal— respondió Gleen rascándose la nuca mientras Rick se sentaba en la orilla de la camilla mientras Carl se ponía una camisa, ya que estaba sin camisa.

El chico lo miro de reojo, había logrado esconder el como se sentía durante esos dos días, mientras la culpa y el dolor lo comían vivo al pensar que su Alaska había sido golpeada y torturada hasta alterarle la memoria...No quería pensarlo y tampoco aceptarlo...

Tampoco quería aceptar que ella lo odiaba, sabía que lo tenía merecido por una parte....Pero...¿Justo ahora? ¿Justo cuando el cambiaba? Era injusto, merecido, pero injusto.

—Ya. Pues imagínate como se siente— respondió seco el castaño mientras se colocaba su cinturón.

Un silencio incómodo cayó en la habitación, no era un secreto para nadie en Alexandria que el humor de Carl había empeorado considerablemente, casi no hablaba con nadie, y cuando lo hacía, era de mala gana y de forma seca y cortante, no podían juzgarlo.

Rick se quedó mirando a su hijo por unos segundos, sintiendo pena por su situación, pues sabia que la llegada de Alaska lo emociono de gran manera, y que hasta el de hoy seguian tratando de entender como seguía viva si ellos la vieron muerta. Sabía que el estaba más que emocionado por verla de nuevo...Para que luego pasara todo eso, aunque por más que fuera su hijo sabía que tenía merecido una parte, seguía sintiéndose mal por el.

Ya todos en Alexandria comenzaban a considerar la idea de que tal vez, Carl nunca mintió ni alucino, porque con que Alaska apareciera viva ya era mucha coincidencia, para que luego también apareciera ese grupo de Los Salvadores, definitivamente lo culparon de loco muy injustamente.

Ese día porfin le dieron de alta a Carl, aunque aun tenia unos cortes no cicatrizados y los moretones seguian luciendo igual de feos, pero ya no estaba tan mal, ya no le dolia de la misma forma hablar, aunque aún sentía un ligero ardor, pero no era tan intenso como antes que parecía que hubiera tragado fuego.

Carl salió de esa habitación junto con Gleen y su padre junto a él, mientras pasaba por los pasillos para poder irse de ahí, se preguntó si seria capaz de ver a Alaska por el cristal cuando pasara frente a su habitación...

𝐀𝐋𝐀𝐒𝐊𝐀 ᑦᵃʳˡ ᴳʳⁱᵐᵉˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora