Afuera de la casa la oscuridad de la noche es acompañada por un fuerte aguacero que cae sobre el suelo, el cielo es dominado por una cantidad de truenos y relámpagos que estremecen a todos los pobladores de Cainita, quienes suponen dentro de sus hogares que algo muy malo está ocurriendo en los dominios de la bruja, los únicos que lo pueden confirmar con exactitud son Don Luis y los oficiales Montero y Jasón.
Los tres hombres aguardan en la carretera sin importarles la fuerte lluvia que los empapa por completo, solo manteniendo las esperanzas de ver salir con vida a las seis personas que ingresaron por el sendero prohibido, aunque las posibilidades de fracasar han cambiado mucho desde la visita al antiguo cementerio de Cainita la noche de ayer, creen que el éxito está a su alcance cosa que hasta anoche era improbable, lo único que los mantiene en temor es el hecho de que los señores que acompañan a la reportera se han entrometido en el exorcismo y que además son padres de víctimas recientes.
Sin poder hacer otra cosa más que esperar y desearles la mayor de las fortunas en su cometido a los tres sacerdotes, Don Luis junto con los oficiales Montero y Jasón tendrán que seguir observando el camino del sendero prohibido hasta ver que salga alguien o, en el mejor de los casos, todos logren volver de allí con vida.
Dentro de la casa de la bruja la reportera Claudia despierta del trance, lo hace sollozando y un poco temerosa por las imágenes mostradas en su mente de parte del espectro infernal, al ver todo ese horror pudo sentir bastante del mal que la rige. Después la bruja baja el brazo extendido de la cabeza de la reportera Claudia liberándola del estado de trance por completo.
De inmediato el exorcista se aproxima hasta donde se encuentra el ánima maldita, quien se voltea en furia al percibir su presencia detrás, una vez que están cara a cara nuevamente retoman la lucha.
El padre Rafael le arroja agua bendita a la bruja, quien recibe las gotas en su vestido y las evapora al instante, expresa cierta molestia de ardor o dolor en su opaco rostro, parece que le quemaran, en cambio las oraciones religiosas no dan la impresión de estar logrando algo con la entidad maligna, a pesar del gran esfuerzo unificado por los tres sacerdotes.
Los señores Nicola y Richard se reincorporan del piso, hacen caso omiso de lo que les dijo el exorcista hace unos instantes con relación a las armas y las vuelvan agarrar, no solo eso sino que también las recargan con más municiones y se ponen en posición de ataque nuevamente para volverlas a disparar.
El padre Darío nota que solo el agua bendita esparcida sobre el ánima maligna surge cierto efecto para hacerle daño y comienza a preguntarle cosas, con el apoyo del padre Rafael que lo avala gestando en afirmación con la cabeza.
El padre Darío: Con firmeza. —¿Quién eres realmente? ¿Por qué te escondes detrás de una mujer? ¿Qué significa esa marca de color púrpura alrededor de los ojos?
Ahora el exorcista lo apoya con preguntas similares y comentarios fervientes.
El padre Rafael: Con mucha convicción. —¿Dinos quién eres espíritu maligno? ¿Para qué marcas a tus víctimas? ¿Qué significa ese color púrpura en los símbolos? ¿Para qué son los polvos y la marca que le haces tener a las personas alrededor de los ojos? Obedece al poder divino y sagrado de Nuestro Señor Dios Todopoderoso, quien es la única fuerza y verdad que gobierna a este mundo y a todos los seres que lo habitan, doblégate a su voluntad, regresa al infierno que es tu verdadero hogar y abandona esta propiedad para siempre.
Esas palabras tan vehementes del exorcista provocan una nueva reacción de parte de la bruja, quien vuelve a sacar una brisa tremenda proveniente de su cuerpo y embiste una vez más a los tres sacerdotes hasta hacerlos caer en el piso. Seguido a eso los señores Nicola y Richard le gritan a la reportera Claudia que se aparte del espectro, ya que está a su lado.
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LA BRUJA II "LA MARCA DE LA MUERTE"
HororYa descubrieron el horror que existe luego de ingresar por el Sendero Prohibido del misterio pueblo de Cainita, ahora necesitan saber porque marcan a las víctimas para poder detenerla, después de tantos años sin enfrentarla un sacerdote lleva a un e...