¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ISABEL ES PRECIOSAAA! 😍
Maday Zambada
Me sentía tan culpable, tan mal de verlo así.
Resulta que al llegar él tenía en partes de su cara morado. O sea como si lo hubieran golpeado. Su ojo estaba morado, en su labio había una pequeña abertura. Todo mal.
- que te pasoo? -pregunte desconcertada-
- puedo darte un abrazo? -me respondió con otra pregunta-
Lo dudaba, claro necesitábamos un abrazo tanto él como yo pero tenía miedo, miedo de que me hiciera más daño, miedo de volver a sentirme llena y cuando se volviera a ir sentir el maldito vacío que llevo sintiendo durante años.
Extendí mis brazos y este me abrazó con tanta fuerza, rodeé su cuerpo con mis frágiles manos, claro no lo rodeé todo pues mis brazos no eran tan largos.
Juro que es inexplicable el cómo me sentí, esto me faltaba, él me faltaba.
Me sentí bien por unos segundos pero después recordé que por él había pasado lo de mi papá, con coraje e impotencia me alejé y lo empuje.
Estaba segura que en mi mirada se notaba lo furiosa que estaba.
- déjame explicarte -pidió pues ya sabía por qué lo había alejado- no fui yo Sami por favor escúchame
- cállate yo a esa gente no le creo nada y tú eres uno de ellos -los culpe-
- no confías en mí?
- lo hago, lo hacía Néstor pero mi papá no está conmigo el día de mi cumpleaños sabes lo que es eso? Que el hombre que más amo en el mundo no esté conmigo todo por culpa de otras personas que no saben lo que es la maldita lealtad! Nunca había pasado un cumpleaños con mi familia incompleta y hoy hoy justo hoy está pasando, no estamos juntos y tú ya no estás conmigo -exclamé-
- mi amor...
- no mi amor nada y que te quede claro Néstor para mí lo nuestro se acabó cuando decidiste unirte a ellos -me referí a lo de mi padre- pensé que me amabas, te entregue todo lo que pude haberte entregado, estábamos tan bien pero como siempre nunca puedo ser feliz
Le grité muchísimas cosas, estaba dejando sacar mi ira y el solo me veía pues sabía que era una reacción.
Mi hermano Serafín se puso alerta pues le informaron de mis gritos. Cuando por fin dije todo, él junto con Vicente llegaron y me escucharon decir lo ultimo.