¿Qué pasa cuando una mano ajena te ayuda a salir del pozo en el que alguien más te empujó?
Fanfic inspirado en la pareja de baile sobre hielo de Vasilisa K. y Maxim N.
Nada de lo escrito aquí tiene que ver con la realidad, a menos que existan prueba...
Después de la presentación de ayer, los nervios eran visiblemente menores a los del día anterior.
Mentiría si no dijera que el peso fue bastante para cargar.
El miedo de que los fans dijeran que no estaba a la altura de mi rubia.
Que dijeran malas cosas de ella por estar conmigo y no con él.
Lo que dijeran de mí me tenía sin cuidado.
Pero con ella...
Con ella no.
Con mi rubia no.
Qué bien se veía anoche.
Me torturó no dejándome ver ni saber siquiera el color de su vestuario.
Y ayer descubrí porqué.
Dios.
Se veía...
Espectacular.
Preciosa.
Sexy.
Sensual.
Femenina.
Casi la besaba si no me controlaba.
Sus habilidades de performance son otra cosa.
Nació para esto.
Para estar en un escenario, en una pista, frente al público.
-¿Qué tanto piensas?- su voz cantarina me regresa a la habitación donde estábamos.
Ahora estábamos en Cherepovets, igual que ayer, camerino para dos.
Pequeño pero cómodo.
Mi rubia se estaba maquillando igual que ayer para el evento, ya estaba peinada.
Le había hecho un ligero cambio a la media coleta que traía, tal parecía que había enrollado los mechones de cabello hacía abajo y luego los juntaba con la liga.
Se veía ajustado, espero que no le de problemas en el hielo.
Con que no le tape su hermoso rostro está perfecto.
-Nada, solo estoy algo cansado- miento para evitar dar la verdadera respuesta, eso sería vergonzoso. -Deberías dormir un poco, aún nos queda tiempo, apenas son las 5 y el evento ahora comienza a las 7- podría dormir, pero la verdad no quería.
No quería dejar de verla mientras se arreglaba.
Me encantaba verla mientras se arreglaba.
-Estoy bien, no quiero salir al hielo con cara de recién despierto- río levemente y saco mi teléfono del bolsillo de la chaqueta deportiva que traía. -Bueno, si insistes- se gira de nuevo al espejo para seguir con el maquillaje de ojos que se estaba haciendo.
Dios, está preciosa.
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