UN AMOR ENTRE MAFIOSOS. (kookmin).

CAPITULO XII.

las horas pasaron, el doctor nos indicó que ya nos podíamos ir a casa.

Durante todo el trayecto del hospital a casa, mi madre nos dijo nada, su rostro era pálido y triste de tanto llorar. en ella ya no había felicidad, esa mujer fuerte, guerrera y alegre se había muerto con mis hermanos.

Al llegar a la casa todos el lugar estaba decorado con crisantemos blancos, desde afuera hacia adentro. En medio del lugar se encontraba un altar con la foto de mis hermanos, y decorado con muchas rosas blancas.

En otra habitación de la casa se encontraban los ataúdes de mis hermanos los cuales eran totalmente blancos.

Al entrar a la casa, mi madre cayó arrodillada frente al altar, las lágrimas y el dolor hicieron presencia.

Yo solo pude dejarla llorar mientras le das un abrazo, después de todo las lágrimas te ayudan a liberar el alma y calma el dolor.

Mire a mi alrededor y pude divisar el rostro de amigos y familiares que decidieron acompañarnos.

Me levanté de Aquel lugar y me dirigía el comedor donde se encontraba Jin y hoseok.

—¿Cómo están chicos? —pregunté.

—un poco cansados Pero nada que no puedamos manejar —respondió Jin.

—¿y tu madre cómo está? —preguntó hoseok.

—sigue llorando y teniendo pesadillas en las noches —respondí.

—no es fácil para ella Perder tres hijos en un día —agregó jin. —pero, ¿tu padre dónde está?.

—No tengo idea de dónde puede estar y tampoco me interesa saber de ese infeliz —respondi.

—¿cuánto tiempo piensan velar a tus hermanos? —agregó hoseok.

—no sé, creo que dos días es suficiente, no quiero que mi madre ese siga atormentando de esta manera —respondí.

—¡este dolor la va a acompañar toda su vida jimin! —dijo jin exaltado.

—lo sé, lo sé, pero creo que entre más rápido mejor, así podremos cerrar este capítulo —respondí. —creo que así ella podrá aceptarlo más rápido.

—solo debe ser fuerte para ella —dijo hoseok tocando mi hombro.

Los Dos días pasaron, finalmente había llegado el día donde le daríamos descanso eterno a mis hermanos.

Sus cuerpos fueron cremados y depositados en tres nichos.

Mis hermanos amaban el mar, por lo que Jin, hoseok y yo, compramos un terreno en la playa solo para elaborar tres lápidas y así permitir que mis hermanos descansaran en Aquel lugar que les generaba tanta paz y felicidad.

Los años pasaron, yo no supe de mi padre, lo cual no me importaba ya que estaba 100% seguro que estaba ocupado en su "trabajo".

Después de la muerte de mis hermanos, mi madre se sumergió en una depresión, no paraba de llorar y lamentarse. continuamente visitaba el lugar donde se encontraban mis hermanos y luego de cada visita Se le veía un poco más anímica por lo que Jin, hoseok y yo, decidimos construir una casa para ella en aquel terreno de la playa donde estaban sepultados mis hermanos; el terreno era grande por lo que no hubo problemas.

Yo me sumergí en el trabajo, y así los años pasaron; yo no supe nada de soo min.

por esta razón nosotros decidimos no darle confianza a todos los que se nos acercaban.

Los chicos se subieron a su auto y se dirigieron al centro comercial, se bajaron y entraron. todos los presentes quedaban asombrados, hasta los hombres deseaban a estos tres chicos, y cómo no lo harían, estos chicos poseían una cualidad que llamaba la atención de los hombres: su actitud, cuerpo bien proporcionado y rostro angelical.

—¿Qué han pensado sobre la propuesta de los jeon —preguntó Jimin.

—Siendo sincero es una buena propuesta en términos de estrategia —respondió Jin.

—Yo opino que deberíamos aceptar, vamos a darles una oportunidad, si nos fallan nos deshacemos de ellos —sugirió hoseok.

—Es buena idea, de todos modos ya no somos los niños de antes que engañaban y traicionaban —dijo jimin con una mirada fría.

—¿A dónde vamos? —preguntó jin.

—vamos a comprar zapatos —dijo hoseok.

Los chicos entraron a una boutique de zapatos acompañados de sus guardias. al entrar encontraron a cuatro chicos y una chica sentada en unos muebles.

el lugar está muy lleno de guardias y hacía mucho calor por lo que decidieron sacar guardias del lugar.

En la actualidad.

—¿Quiénes serán los cuatro chicos que están sentados en los muebles? —se preguntaba jimin tomando asiento.

—lo único que sé es que son muy importantes —opino hoseok tomando asiento a su lado.

—estoy cansado, solo tenemos un día de estar aquí y ya hemos recorrido todo Tokio —se quejo jin ignorando la conversación de sus hermanos.