UN AMOR ENTRE MAFIOSOS. (kookmin).

CAPITULO XIII.

—yo también —expreso jimin con una expresión de cansancio.

—ya quiero llegar a casa y descansar —hoseok deposito todo su peso sobre el respaldar del mueble.

Los chicos se sentaron en unos muebles que quedaban al frente de jungkook, taehyung, suga, namjoon y hyun ki, por lo que se podían ver frente a frente.

—en que les podemos ayudar —indicó una joven que trabajaba en el lugar.

—queremos ver zapatos de gala, deportivos... —indicó hoseok.

—en un momento volvemos con opciones —dijo la trabajadora.

Jimin y jungkook no podían dejar de verse, algo los había conectado. Todos los presentes notaron esto, incluso los chicos.

Hyun ki es un alma libre que dice lo que piensa, por lo que ante esta situación no se quedó callada.

—señor jungkook, deje de mirarlo tanto, mejor acérquese y saludelo —sugirió hyun ki.

—¿tu crees? —interrogó jungkook.

Jimin escucho lo dicho, por lo que soltó una sonrisa tímido y desvío la mirada.

—¿por qué te pones tímido, jimin? —pregunto jin.

Jimin al escuchar la pregunta tan espontánea de Jin, le dio una pequeña palmada en el hombro.

—que cosas dices, jin —expreso jimin desviando su mirada.

Jin tiene razón, ¿por qué me pongo tímido?, es como si algo creará un lazo entre el y yo, pero más que eso, ¿por qué me mira tanto?, su mirada me pone nervioso; calma jimin, no es nadie importante, solo manten la cordura, tal vez después de esto no nos volvamos a ver.

Los chicos empezaron a elegir sus zapatos, pero volvió a surgir el mismo problema con hyun ki.

—¿cuál es más bonito? —pregunto hyun ki a los chicos.

—¿en serio, hyun ki?, ¿otra vez con el problema para elegir? —renego suga. —enpaque los dos. —le indico a la trabajadora.

—si, señor —dijo la trabajadora tomado los dos pares de zapatos.

—ay, que complicados son los hombres —renego hyun ki.

Los chicos del otro lado solo pudieron sonreír.

Todos terminaron de comprar al mismo tiempo, por lo que jimin y jungkook salieron a pagar.

—ten, jimin, ve a pagar tú —dijo hoseok entregándole una tarjeta de crédito.

—jungkook, toma, ve y paga la cuenta —articulo namjoon entregándole una tarjeta de crédito.

Los dos salieron a pagar, pero no se pasaron ni una sola palabra. Los dos sostenían esa mirada fría y distante.

—gracias —jimin hizo una reverencia a la trabajadora.

—muchas gracias —jungkook hizo una reverencia y volvió con sus hermanos.

Todos salieron del lugar.

—¿ya podemos ir a comer? —pregunto jin.

—ya son las 5:00 p.m, tengo mucha hambre —jimin hizo un pequeño puchero.

—vamos a comer, no puedo más —expreso hoseok tocando su vientre.

Jungkook, taehyung, suga, namjoon y hyun ki, iban detrás de Jin, hoseok y jimin.

—antes de comprar la comida de la casa, vamos a comer —propuso hyun ki.

—estoy de acuerdo, tengo mucha hambre —apoyo jungkook.

—bien, vamos a comer, nam invita —dijo taehyung con una sonrisa.

—¿yo?, esta bien —namjoon accedió, tampoco era como si pudiera evitar que sus hermanos lo hicieran pagar la cuenta.

—dejen de hablar y caminen, no puedo escucharlos con hambre —protesto suga.

Los chicos llevaban muchas bolsas por lo que se las entregaron a los guardias.

—toma, guárdalas en los autos, y indicarles a todos donde estamos para que vengan a comer con nosotros, no pueden seguir trabajando con hambre —jimin le entendió las bolsas y acto seguido le brindo una sonrisa.

—si, señor —dijo el guardia.

—dile a los chóferes que pongan los seguros de los autos y también vengan a comer —ordenó hoseok.

—si, señor —el guardia hizo una reverencia y se marcho.

Los jeon siguieron su camino por otro pasillo, y esto lo noto jimin, por lo que no puedo evitar voltear a ver a jungkook.

Me preguntó si lo volveré a ver.

Jungkook volteo a ver a jimin y se encontró con sus bellos ojos, los cuales lo observaban. Jimin desvío su mirada y siguió caminado.

—los guardias deben comer, ¿les llevamos comida o los invitamos a comer? —indago namjoon.

—llevarles comida seria mucho trabajo para las trabajadoras del lugar —taehyung descartaba la primera sugerencia.

—mejor que vengan a comer con nosotros —opino jungkook.

—dile a todos que vengan —indicó suga a su guardia. —y lleva estas bolsas.

—si, señor —el guardia tomó las bolsas, hizo una reverencia, y se marcho.

Los chicos llegaron al restaurante, y al llegar se encontraron con Jin, hoseok y jimin.

—el destino está cruzando sus caminos el día de hoy para que ustedes se encuentren —hyun ki miraba al pequeño que se llevaba toda la atención de jungkook.

Todos sabían a que se refería. (Jimin y jungkook).