Cuando el verano acabe || Griff Jones

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Con esa resolución en mente, me levanté de la cama y salí de la cabaña. El sol seguía brillando, y el aire fresco me llenó de energía. Sabía que no podía permitir que Zuri arruinara mi verano, y mucho menos mis sueños de disfrutarlo al 100.

Decidí regresar al lago. Si bien la competencia de canoas había terminado de manera inesperada, aún quedaba mucho por hacer. Tal vez podría hablar con Xander y Jack, encontrar formas de canalizar mi frustración y mantener el enfoque en las cosas que realmente importaban: la diversión, la amistad y las experiencias compartidas.

Al llegar al lago, vi a los campistas celebrando y riendo. La energía era contagiosa, y aunque Zuri había intentado arrebatarme la alegría, no podía dejar que eso sucediera. Me acerqué a Jack y Griff, que estaban riendo mientras intentaban darle un remojo a uno de los chicos.

—¡Hey, campeones! —les grité, sintiendo cómo la sonrisa regresaba a mi rostro.

—¡Lola! —exclamó Jack, iluminándose al verme. —¿Te encuentras mejor?

—Sí, mucho mejor. ¡Listos para una revancha! —dije, con una chispa de determinación en mis ojos.

Griff sonrió, comprendiendo la emoción que me había invadido. —¿Qué tienes en mente?

—Quizás un juego de equipo, algo donde todos podamos participar y divertirnos. ¡Podríamos organizar una carrera de relevos en el agua! —propuse.

La idea fue recibida con entusiasmo, y pronto comenzamos a planearlo. La rivalidad podría ser parte de la diversión, pero no tenía que ser lo único que definiera nuestra experiencia. Quería que todos se sintieran incluidos, que la camaradería fuera lo más importante.

Mientras nos preparábamos para la nueva actividad, vi a Zuri a lo lejos. Su expresión de satisfacción seguía presente, pero decidí que no iba a dejar que eso me afectara. A partir de ahora, mi enfoque estaría en disfrutar y construir recuerdos positivos.

—¡Vamos a hacerlo! —le dije al grupo, que se estaba reuniendo a nuestro alrededor. La emoción era palpable, y me sentí más fuerte al ver a mis amigos unirse para crear algo divertido.

A medida que organizábamos los equipos, la energía del campamento se reactivó. Risas, juegos y un ambiente de camaradería llenaron el aire. Zuri, aunque un poco distante, parecía interesada en lo que estábamos haciendo. Sin embargo, yo no iba a permitir que su presencia me afectara.

La competencia de relevos fue un éxito rotundo. Las risas resonaban y todos estaban disfrutando, incluidos aquellos que antes estaban atrapados en rivalidades. Me sentí satisfecha al ver que el espíritu de cooperación había superado cualquier resentimiento.

Al final del día, mientras todos se retiraban a sus cabañas, me quedé mirando el lago iluminado por el atardecer. Había aprendido que no podía controlar las acciones de los demás, pero sí podía decidir cómo reaccionar. La vida en el campamento era más que competiciones; era sobre las conexiones, las amistades y los momentos compartidos.

—Esto es lo que realmente importa —me dije a mí misma, sonriendo mientras me alejaba del lago. Estaba lista para enfrentar cualquier desafío que el verano me trajera, con la certeza de que, al final, siempre habría algo bueno esperando.

*Muy cortito pero les viene muchos más largos*