Edificio Seo- NCT

32.- Voy a barrer la casa

Haechan no tenia ninguna intención de ir a la escuela, por eso no fue. Salio de su casa, paso por la tienda de Hansol y desvió su camino al centro comercial. Le escribio a Jaemin solo para decir que estaba muy cansado para estudiar hoy y luego de eso ignoro sus mensajes, ultimamente no tenia ganas de ver a Jaemin y le respondia muy cortante.

—Una galleta, por favor. - Dijo Haechan a la chica del starbucks. 

—¿Solo eso?- Haechan asintió.

—¿Realmente solo comeras una galleta? - Preguntó una voz detras de él. Haechan volteó y vio la cara de Sungchan.

ay carajo

—¿Te tengo que ver en todos lados?

—Solo nos hemos encontrado dos veces. - Dijo Sungchan. - Un chocolate por favor,... que sean dos. Uno que diga Haechan y otro Sungchan.

Haechan no dijo nada porque si se le antojaba tomar algo y Sungchan estaba pagando hasta la galleta, asi que, se dejo comprar. Pasaron diez minutos en los que Hae no quiso hablar con Sungchan, hasta que estuvieron listos sus chocolates.

—Imagino que quieres que me siente contigo.

—Si, ven. - Sungchan lo guió a una mesita y ambos se sentaron.- ¿Por qué no estas en la escuela?

—No me dieron ganas ¿Y tu?

—Estaba enfermo.

—El centro comercial no es hospital.

—Es que ya estoy mejor.

Haechan suspiró, mientras jugaba con la pajilla de su chocolate.

—Bueno, si ya estás mejor, ¿por qué no volviste a clases? —dijo Haechan, finalmente tomando un sorbo de su bebida.

Sungchan sonrió, apoyando la barbilla en una mano mientras lo observaba con tranquilidad.

—Te quería ver. —respondió con sinceridad. - De hecho te vi caminar hacia acá.

Haechan lo miró con una mezcla de sorpresa.

—¿A mí? No me hagas reír. Apenas y me conoces y pierdes clases para verme.

Haechan lo miró de reojo mientras le daba una mordida a su galleta.

—Es que quiero saber de ti, sin tener que recordar lo que paso hace tiempo.

—Eres raro... ¿Y qué más quieres saber? —preguntó Haechan, fingiendo desinterés, pero claramente curioso.

Sungchan se inclinó un poco hacia adelante, sosteniendo su taza entre las manos.

—Lo que quieras contarme.

—No sé si te has dado cuenta, pero no somos amigos, Sungchan.

—¿Por qué lo dices así? Solo estamos hablando, no tienes que ser tan duro.

Haechan soltó una risa seca y dejó la galleta a un lado.

—¿En serio? —dijo, cruzando los brazos—. Eres amigo de mi ex. No confío en ti.

—Entiendo, pero no estoy aquí por eso. Mi amistad con él no tiene nada que ver contigo, es más ya ni tengo amigos.- Dijo Sungchan riendo.- Solo quiero conocerte por quien eres, no por lo que pasó entre ustedes dos, ya no jugaria contigo, hacer la misma broma dos veces seria aburrido.

—Si seria muy ridículo.

—Me gusta verte, Haechan. Eres interesante, y aunque no confíes en mí todavía, me gustaría que me dieras una oportunidad.

Haechan frunció el ceño, sintiendo que algo en el tono de Sungchan era diferente ahora. No era solo una charla casual. Había algo más detrás de esas palabras.