Rufaida corría y corría intentando llegar a tiempo a clase. "Mada, estoy harta de tener que esperarte siempre"-pensaba. Al final llegó y abrió la puerta con el corazón en un puño. Aún no había llegado el profesor; con lo cual, llegaron a tiempo. Normalmente nuestros profesores solían llegar entre cinco y veinte minutos tarde, así que no era una sorpresa que aún no estuviera allí. De vez en cuando nos daban alguna sorpresa y llegaban puntuales. De vez en cuando. MUY de vez en cuando. MU MUY de vez en... En fin. Prosigamos.
Madalina, nada más llegar, se sentó en la mesa del profesor y comenzó a balancear sus piernas hacia adelante y hacia atrás (con la mochila puesta). Rufa, sin embargo, se quedó mirando a toda la clase durante unos segundos.
- ¡Rufa y Mada, por fin!-exclamó Amparo desde el fondo de la clase con una sonrisa. Tenía el móvil en la mano derecha y con la izquierda intentaba hacerse una coleta. Dejó lo que estaba haciendo y corrió a darles un abrazo.
- Hola Ampi.-contestó Rufa con una sonrisa.-¿Qué haces?
- Acaba de ser la última pasarela de modelos de Victoria Secret.
- Pues no lo pillo.-dijo casi riéndose.
- ¡Alessandra Ambrosio, geme!-exclamó enseñándole una foto.-Es mi modelo favorita.
- Porque está buena, ¿no?
- ¡Po' sí!
Ambas rieron.
Amparo (o Ampi) tenía el cabello rizado y le llegaba hasta la espalda, era de estatura media y acostumbraba a hablar en un raro "Espanglish"; a veces íbamos a su jause a dormir o merendar. Saludaba a una de sus amigas con el mote de "Champi" porque hubo una época en el que le cortaron el pelo como si fuera una seta; su risa era algo curiosa y siempre tenía una sonrisa en la boca.
Rufaida (Rufa, Rú, Geme (la niña de los mil motes)) tenía el pelo ondulado y muy largo, era algo bajita y, al igual que Ampi, siempre tenía una sonrisa en la boca y era amable con los demás. Su fuerte no eran las matemáticas, pero dirigía una cuenta en Wattpad con cientos de seguidores y se le daba bastante bien, la verdad.
De repente llegaron Pepe y Sete; ambos eran pareja desde hace bastante tiempo y, aunque nos contaban a todos al principio que eran heterosexuales al cien por cien, se notaba que había chispa entre ellos; sobre todo por parte de Pepe hacia Sete.
Mada los saludó, se colocó un mechón de su cabello rubio detrás de la oreja y se bajó de la mesa. Se puso de puntillas y le acarició el pelo a los niños con cariño. Estos saludaron y dejaron la mochila en sus sillas en cuanto pudieron.
Los hermanos Benavides llegaron casi al mismo tiempo que ellos. Pepe no tardó ni un segundo en exclamar:
- ¡Roberno!
- Cállate Pepe.-contestó.
Alejandro (su hermano) dejó la mochila en la silla y pasó bastante de esos dos. Ya se entretuvo bastante con Izhak cuando llegó.
Ampi seguía enseñándole a Rufa fotos de Alessandra Ambrosio, y esta, al ser super hetero, no le producía la emoción y excitación que le producía a Ampi. Había sido apodada cariñosamente como "Ampi, la reina de las bolleras"; y ella mantenía ese apodo con orgullo. Intercambiaba fotos de tías buenas con sus amigas bisexuales. Hasta la fecha, Amparo había sido la única lesbiana allí.
Anabel era la única que se acercaba más o menos a la lesbiana que era Amparo, pero por culpa de Takahiro Morita, esto no podía ser posible. Tenía tal obsesión con ese hombre, que su homosexualidad era algo imposible; así que se había quedado en la bisexualidad. No obstante, las mujeres era de esas cosas que más le gustaban esta vida. Por cierto, hablando de ella, ¿donde estaba? Se había pasado toda la clase sin que los demás se diesen cuenta escribiendo en japonés en la pizarra.
Cuando Pepe y Sete se acercaron más a donde estaba todo el "barullo" de gente (Mada, Rufa, Ampi, Anabel...); se percataron de que Izhak se había puesto colorado cuando Roberto había chocado con él.
- Aquí hay salseo.-murmuró Pepe.
- Ahí con su chichilla.-respondió Ampi por lo bajini.
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50 Sombras Gays y la clase del salseo
RandomPrimer volumen de la trilogía "50 Sombras Gays", donde nos cuentan relatos serios y no-tan serios de unos adolescentes y su día a día. Os prometemos mucho salseo y risas aseguradas.