Vannicelli's Obsesión. (Nueva Versión)

CAPÍTULO 22

{ADARA}

Algunas de las cosas malas en mi siempre fue mi curiosidad que tenía y los riesgos que corría haciéndome creer que estaba bien.

Esta noche Elios no vino a dormir a la habitacion y aunque apenas han pasado 10 días desde que vivo con el la cama se siente vacía pues Elios abarca la mayor parte de la cama. ¿Desde cuando la cama es tan grande? ¿Tan fría? No lo se pero solo se que Elios era el responsable de que no me sintiera sola en las noches y de que no pasara frío.

Me acuesto después de darme cuenta de que no llegara, han pasado más de las 11 de la noche y el no aparece. ¿Se habrá olvidado de mi? ¿Acaso esta tan enojado conmigo? Pero yo no tengo la culpa. Decidí dormir sin esperarlo pero, ¿por qué lo estoy esperando? ¿Será que después de saber su pasado ahora lo entiendo? ¿Pero como puedo entenderlo si apenas lo conozco?

Intento dormir pero no puedo, ni quiera por los tranquilizantes que me dieron no logro conciliar el sueño como si mi conciencia estuviera siendo atacada por lo que le grite, le dije cosas feas pero el ah echo cosas peores pero la razón de las que la ah echo es por que sufrió, Elios era un niño pequeño cuando lo jodieron.

Siento las lagrimas empezar a bajar, siempre es lo mismo, solo soy una llorona que aunque la lastimen nunca guarda rencor por más de una semana, soy tan patética, el me alejo de mi familia, me privo de mi libertad e incluso de mi celular. Cada día aquí es como si fuera una jaula de oro pues tengo todo, desde joyas hasta buena comida y mucho más pero una jaula de oro sigue siendo una jaula.

Después de solo dejar salir lagrimas saladas que me llegaban hasta los labios me quedé dormida, mañana tendré que hacer algo o mínimo no alejarlo. El sueño me gano y se que mi conciencia no me dejara en paz hasta que "reparare lo que haga"

《MAÑANA SIGUIENTE》

Me despierto después de aver dormido unas 9 horas, son apenas las 8:20 de la mañana. Salgo de la cama para ir a tomar un baño para lograr despertarme por completo, lavarme los dientes y ver qué hago este día en la mansión.

Después de ponerme un vestido blanco que me llega hasta las rodillas estilo vestido de campo con color lila me cepillo mi cabello cobrizo ondulado que se esponja después de que se seque. Es horroso. Me dejo el cabello suelo con una diadema sosteniéndolo hacia atrás, me pongo un poco de hidratante en la cama y máscara de labios de coco para que mis labios de estén tan secos como suelen serlo. Son tan fácil de hacer sangrar y extrañamente me gusta mi sangre.

Me pongo unas zapatillas color café claro que le quedan increible a el vestido, no necesito perfume por que soy como una galleta, mi aroma es dulce como los bombones y tiene toques de vainilla. Mi aroma es natural por que cuando yo era pequeña solían rociarme con esos aromas, no que quien era pero se que no fue mi madre o mi padre. La nostalgia me llega, aunque no fueron los mejores padres tampoco fueron los peores, aun los extraño como cada maldito día.

No se que estarán haciendo pero duele pensar en ellos; no están haciendo nada, no pueden hacer nada contra Elios. Maldito hombre ya ni se ni que sentimiento tener con el; le tengo enojo por tenerme aquí bajo sus estrictas ordenes pero le tengo compasión por lo que sufrió de niño.

Salgo de la habitacion caminado al comedor y poder desayunar, siento esa mirada que ya le hagarre coraje, la misma chica que me miraba mal la primera vez que llegue. Como siempre me mira desde que llego y a diferencia de las demás ella no baja la mirada, me desprecia con sus ojos negros mientras su cabello más pintado que nada lo tiene bien hagarrado en un molote alto dejando ver esa frentoda que parece espejo.