Risómico: Determinación de duelo

Capítulo XVII: Unos momentos después.

Y así la humanidad fue hecha

Somos la forma hecha de materia

y con la materia creamos la forma

a imagen y semejanza de nuestros creadores.

Génesis de Gélida: 6:03

Firo sentía aún algo de vergüenza mientras comía la mediavitra comprada momentos antes en El Firmamento. Estaba sentado en el asiento del acompañante del motocarro forense. La factura estaba hecha de una masa hojaldrada, básicamente manteca, azúcar y capas en forma de semicírculo, de puntas delgadas con respecto al centro. Una preparación simple, pero en esa simpleza descansaba la esencia de la ambrosía. El operador miro a Ceres comiendo su mediavitra mientras jugaba con Ollin quien desde su regazo trataba de morder un pedazo del hojaldre.

¿Por qué era tan deliciosa? se preguntó, quizás la suma de las partes daba por resultado una gestalt, un fenómeno emergente que solo se podía explicar por el encuentro de las materias primas, la experiencia del panadero y la técnica rigurosamente aplicada. Si se toma todo eso y se le aplica calor suficiente se dan una serie de transformaciones fisicoquímicas que tienen por resultado un sabor nuevo, delicioso, perfecto.

Observo como Ollin se aferraba con sus patas delanteras al antebrazo de Ceres y haciendo equilibrio con su única pata trasera lograba lamer la capa de almíbar de la factura. Hacia una mueca con la nariz y mordisqueaba la masa. Entonces Firo entendió que estaba parcialmente equivocado, la factura no era deliciosa por sí misma, era parte de una experiencia. El sabor, la textura y el aroma se mezclaban con el momento en que se degustaba el hojaldre y era él en su rol de degustador quien actuaba como crisol.

Lo que se generaba era un recuerdo, un concepto que se sumaba al conjunto de sus ideas previas. Si una mediavitra era deliciosa ¿Cómo podría disfrutarse más? con café seguramente. ¿Rellenándola de jamón y queso? claro. ¿Si se tostaba la factura con jamón y queso, se la acompañaba de café y una charla agradable? La factura mejoraba, pero no por ella misma, si no porque era parte de una experiencia mejor, siempre hay una mejor manera.

Ollin escupió la masa y se descolgó de la mano de Ceres quién rió y la rasco debajo de la barbilla, cosa que el animal retribuyó con un arrullo en señal de satisfacción. Firo pensó entonces que quizás el valor total de una experiencia depende más que nada del observador. Si sus papilas gustativas tuvieran una disposición ligeramente diferente, si sus experiencias anteriores lo hubieran predispuesto de alguna manera contra los postres o si simplemente no le gustara la harina entonces no disfrutaría de las mediavitras.

A Gélion no le gustaban las mediavitras, prefería los gustos fuertes y salados. Firo sonrió al recordar su rostro al probar las papas fritas, el viejo estaba impactado, seguramente jamás había probado algo parecido. Luego recordó que ya nunca podría comer papas fritas con él y que cada vez que las comiera recordaría la falta que le hacía. Ya no volvería a comer papas fritas.

Ceres noto como la mirada de su acompañante se ensombreció y agradeció en silencio a los Sagrados Arcanistas cuando vió como Numa se acercaban al motocarro. Salía de la oficina de reguladores y caminaba al estacionamiento, bajó del motocarro y le hizo señas con el brazo cuando lo vió. A medida que se acercaba se podía notar la tensión en su postura y expresión.

—Buen día — le saludo Numa— ¿Dormiste bien?

—Si — Respondió Ceres — ¿Usted?

—Dormí lo necesario — el regulador se encogió de hombros— y no hay necesidad de ser tan formal, podes decirme Numa.

—Hola Numa— Dijo Firo que tuvo que bajar del motocarro con hollín en brazos y dar la vuelta para incorporarse a la conversación— Veo que tus piernas están bien, me alegra que hayas salido bien parado.

—¿Quién es este amiguito?— Preguntó Numa acariciando al muni.

—Es mi mascota hollín, no quería dejarlo solo.

—Es muy bonito y respecto a mi no estoy tan seguro de haber salido bien parado, tengo la piel algo sensible y ese par de pantalones era realmente bueno —Numa forzó una sonrisa intentando disimular su ansiedad.

—No llores por eso, tu compañera es la que está realmente afectada — Ceres miró a su alrededor— y hablando del diablo ¿Dónde está ella?

—No estoy seguro, tuvimos un problema — parecía preocupado.

—¿Qué tipo de problema? — preguntó Ceres .

—El administrador Mithril, —empezó a explicar Numa— intentamos interrogarlo pero nos dio a entender que lo tenían vigilado y que colaboraría con nosotros si le llevábamos algo de ropa.

—Suena a que estaba jugando con ustedes — agrego Ceres escéptica.

—También lo pensé pero nos dio una llave e instrucciones para que fuéramos por un portafolios suyo a la sala de evidencias.

—¿Lo hicieron? — Numa se limitó a mirarla con una media sonrisa incomoda— oh por los Arcanos Mecanistas, lo hicieron. ¿Por qué? — dijo Ceres exasperada...

—Porque tenemos razones para creer que Klein nos oculta algo y tomando en cuenta lo raro que está siendo todo, no perdíamos nada probando.

—¿Por qué Klein? — Las dudas de Ceres iban en aumento.

—Por esto— Numa sacó una carpeta de folios de su morral y se la entregó a Ceres — tenemos el informe oficial, tal vez quieras revisarlo.

—Gracias.

Ceres tomó el informe y ojeó rápidamente las hojas con una expresión serena. Sin embargo cuando llegó al final su rostro se volvió una oda a la perplejidad. Volvió a la primera página y leyó atentamente cada palabra con tanta concentración que Firo temía que fuera a quemar las hojas con la mirada. No entendía qué era aquel documento pero decidió que esperar era lo mejor que podía hacer. El grupo guardó silencio hasta que Ceres sin apartar la mirada de las hojas que leía una y otra vez hablo.

—Esto está mal, los procedimientos son correctos, pero las muestras iniciales están alteradas.

—¿No hay chance de que te hayas equivocado en el informe que nos diste?

—No, soy muy diligente en lo que hago — Ceres miro a Numa a los ojos— además estuviste ahí, no podes creer que eso fue un incendio doméstico.

—Si, confío en tu trabajo, solo trato de ser diligente con el mío — Numa miro a la oficina de reguladores— es solo que algo muy raro esta pasando y no me refiero solo al hombre de negro.

—Todavía no entiendo qué tiene que ver Klein en esto. —Las palabras de Ceres estaban impregnadas del particular tono de la curiosidad.

—Que él fue el que nos dio el informe oficial y creemos que lo adúltero.

—Eso no tiene sentido, ¿Por qué haría Klein algo así? ¿Y en cualquier caso porque no podría haberlo hecho Porter?

—Perdón que interrumpa, pero ¿Quiénes son Klein y Porter?— Pregunto Firo que no podía llenar todas las lagunas de su conocimiento solo.

—Klein es algo así como mi jefe y Porter algo así como el jefe de Ceres — contesto Numa— y creo que él está de nuestro lado. Nos topamos con Porter cuando estábamos abriendo el portafolios de Mithril en la sala de evidencias.

—¡¿Qué!? — exclamó Ceres con los ojos bien abiertos— eso es una falta gravísima.

—Si, bueno ese es el problema del que quería hablarte —Numa vacilaba como si quisiera calibrar cada palabra para que refleje exactamente lo que quería expresar— lo que ocurrió fue que...