Cierra los ojos.

Sara.

¿Dónde está metida Sophia? Era el pensamiento que daba vueltas en la cabeza de Cameron junto con ¿Estará bien? Tal vez este herida.
Ya había llamado a su celular, en el primer tono ya le contestaba el buzón de voz, siguió dando vueltas en su auto esperando verla caminar por ahí pero la conocía tan poco que no sabía por donde podría caminar ella, y por otro lado ella conocía tan poco la ciudad que podría estar en un lado peligroso, pisó el acelerador deseando que eso hiciera más fácil su búsqueda.
Ves todo borroso Idiota, baja la velocidad Respiró hondo y bajó la velocidad, no podía hacer nada más que esperar a que ella lo llamara o que él la encontrara.

~~~

Se escuchó un gemido de nuevo y Sophia tardó un poco en notar que este era de ella, inhaló y trató de calmarse, tenía que hacer las cosas bien.
La mujer muerta ya se había girado y estaba empezando a arrastrarse para ir tras de ella, ¿debía esperar a que la alcanzara? ¿Qué podría ser lo peor que podría pasar? Pero el pensamiento que se repetía una y otra vez en la cabeza de Sophia era ¿Cómo voy a rematar a esa cosa?
Sophia miró todo el apartamento, podría correr hacia el cuarto más alejado y ganar más tiempo, o podría abrir la puerta y salir huyendo despavorida de ahí. Moviendo la mano por su espalda llegó a la cerradura, la jaló pero esta se quedó estática.
Supongo que salir huyendo no es una opción, mierda.
Corrió hacia el pasillo que llevaba a los otros cuartos y cerró la puerta cuando llegó al más alejado, aun sin saber si eso la detendría.
-Ok, ok, calma Sophia -empezó a hablar sola, no lo hacía desde hace mucho y fue algo que le fue muy difícil de parar-, inhala, exhala, ¿Cameron te dijo algo sobre cómo matarlos? No creo que no, piensa, piensa...
De pronto sintió algo diferente en ella, como si el corazón se le hubiera llenado de amor.
-¿Qué mier...?
No se dio cuenta de que la puerta no detuvo a la mujer sino hasta que sintió como una mano le apretada el tobillo provocándole dolor. Sophia gritó y pensó que algún hueso iba a romperse, cayó de rodillas y en un intento por liberar su tobillo, tocó la muñeca de la mujer muerta, para su suerte aflojó la mano pero aun así la tenía prisionera.
El antebrazo de la mujer empezó a iluminarse y el antebrazo de Sophia, por el contrario, empezó a volverse más oscuro, como si estuvieran intercambiando algo dentro de ellas.
Sophia empezó a ver partes de la vida de la mujer, vio a su esposo, vio la boda, vio como una noche él borracho creyó ver a alguien en la casa, tomó un bate de béisbol y empezó a golpearla, el golpe final fue en la cabeza. Luego él se metió en la bañera y se suicidó.
La mano de la mujer por fin la había soltado, así que Sophia hizo lo mismo mientras lloraba sintiendo todo el dolor que la mujer había sentido, vio como desde la punta de los dedos la mujer empezaba a volverse ceniza, aun así, sin medio brazo ya, ella intentaba alcanzar a Sophia.
Sophia se arrastró por el piso, sintiéndose incapaz de caminar, ahora sollozando.
Abrió la puerta y se arrastró todo el camino hacia la sala, iba de espaldas para no dejar de mirar a la mujer, cuando chocó con la pared se quedó ahí y cerró los ojos, el dolor era como si le estuvieran oprimiendo el corazón, y esta vez la mano de la mujer la tomó y le apretó el muslo, Sophia abrió los ojos, ahogó un grito y toco de nuevo la mano de la mujer.
Esta vez le llegó un pensamiento que había tenido la mujer Lo amo tanto que dejaría que me matara una y otra vez, Sophia la soltó un poco asustada y vio como la mujer finalmente desaparecía, poco a poco el dolor fue calmandose junto con los sollozos, Sophia subió el pantalón lo más que podía para mirar cómo tenía el tobillo, los morados con forma de dedos ya habían aparecido, incluso habían pequeñas manchas de sangre que le hicieron acordarse de los chupones que se hacía ella misma en los brazos cuando era chiquita.
Se bajó el pantalón y se levantó del piso lentamente, al apoyarse en el tobillo hizo una mueca de dolor, pero era o caminar o quedarse ahí, así que caminó lentamente hacia la puerta, luego escuchó a alguien llorando y giró para mirar el apartamento, se dio cuenta de que habían muy pocos muebles y los que estaban allí se veían viejos y llenos de polvo.
-¿Sara? -Preguntó en un susurro y aún así le pareció que lo dijo muy duro.
Camino con una mueca en la cara por el dolor que intentaba ignorar.
Escuchó de nuevo un sollozo ahogado y caminó hacía allí, llegó a un mueble de madera que parecía para guardar antigüedades, en la parte baja habían dos puertas.
¿En serio se escondió ahí?
Sophia se agachó y abrió las puertas, vio a Sara en una incómoda posición quien gritó con todo pulmón y Sophia se cubrió las orejas.
-Hey, calma, soy yo, Sophia ¿te acuerdas? Nos conocimos en el bar, por favor dime que no estabas tan borracha como para no recordarme.
El aire de los pulmones de Sara se acabó y luego se lanzó fuera del mueble, en un primer momento Sophia creyó que iba a golpearla pero al momento de que su espalda tocó el piso y sintió los brazos de Sara en su cuello y la cara en su hombro se dio cuenta que estaba llorando.
-Shh, calma, todo esta bien y seguimos vivas -Dijo Sophia esperando que eso la calmara mientras movía su mano de arriba abajo en la espalda de Sara-, vámonos de...
Las palabras quedaron ahogadas en los labios de Sara que besó a Sophia repentinamente, Sophia abrió los ojos como platos pero no la separó aunque tampoco le devolvió el beso; la chica estaba traumatizada, no le pareció correcto separarla bruscamente.
Sara quitó sus labios de la otra chica y volvió a poner su cara en el hombro de ella, se siente bien esto, quizá este hombro es mi lugar pensó aún con alcohol en su organismo.
Sophia esperó hasta que dejó de sollozar, entonces hablándole suavemente hizo que se levantaran y salieran de ahí. Tocó su bolsillo y por suerte ahí estaba su celular, lo encendió y las notificaciones de las llamadas perdidas empezaron a sonar, la mayoría eran de Cameron, unas de Lía y dos de su tía.
Llamó a Cameron, antes del segundo tono él ya había contestado.
-¿Aló? ¿Sophia dónde mierda estás? ¿estás bien? ¿Cómo se te ocurre irte así no más? Casi me matas de un susto...
-Lo siento Cam, lo siento, lo siento, no se dónde estoy.
-Pero ¿estás bien?
Sophia se demoró un poco en responder pero finalmente dijo si.
-No te creo pero hablaremos cuando te recoga, mira si hay placas con la dirección ahí donde estas.
Sophia miró hacia el edificio y le explicó cómo había llegado ahí, le dictó la dirección que indicaba la vieja placa y espero en los escalones de afuera, su tobillo estaba palpitando.
20 minutos después y el carro de Cameron frenó al frente de las chicas, Sara tenía la cabeza en el hombro de Sophia, con los ojos cerrados y respirando suavemente.
-¿Quién es ella? -Dijo él apenas se bajó del carro.
-Sara.
-¿De dónde la conoces?
-Del bar.
-Y vas a subirla a mi carro.
-Si.
-¿Sabes dónde vive?
-No.
-¿Vas a dejar de responder con monosílabos?
-Tal vez.
Cameron suspiró.
-Fuiste tú quien se fue sin decir nada y yo quien te buscó por toda la ciudad porque estaba preocupado y ¿tú estás enojada? -Dijo él sentándose al lado de Sophia.
-¿Qué? Yo no estoy brava, estoy esperando que enloquezcas y me grites por haberme ido y haber expuesto mi vida y mi cordura.
Cameron se rió y pensó en poner un brazo en los hombros de ella pero la otra chica, Sara, tenía su cabeza ahí.
-No te voy a gritar, en un momento lo pensé pero ahora estoy mas aliviado que molesto.
Sara suspiró y levantó la cabeza, miró a Cameron con lo ojos entrecerrados.
-¿Quién eres tú?
-Tu chófer -respondió él.
Sara murmuró algo que ninguno entendió, se levantaron y la ayudaron a entrar en el auto.
Sophia se apoyó en el auto, se sentía triste, un poco deprimida y su tobillo le dolía un montón.
-¿Estás bien? No me has dicho que pasó en el apartamento -Preguntó Cameron.
El labio de Sophia empezó a hacer un puchero, algo que pasaba cuando ella lloraba pero que ignoraba, abrazó a Cameron poniendo su cara en el pecho de él, las lágrimas empezaron a salir.
-Él la mató y lo último que ella pensó es que dejaría que la matara una y otra vez porque lo amaba -Dijo con voz ahogada.
Cameron la rodeó con los brazos y no respondió nada.
-¿Vas a contarme todo? -Preguntó luego de un rato, Sophia asintió- Bien, subamos al carro, me estoy congelando.

~~~

-¿Quieres que te cuente todo, totalmente todo? -Preguntó ella cuando terminó de contarle como la mujer se volvió ceniza y que ella había visto un poco de la vida de la mujer, Cameron tenía el ceño fruncido pero asintió- Sara me besó...
Estaba escondida es un mueble y cuando vio que era yo ¡pum! Se me lanzó, y pues ahí todo bien porque estaba llorando pero luego me besó.
-¿Y qué tal fue? -Preguntó Cameron un poco más relajado. Sophia se encogió de hombros.
-Pues no me disgustó pero no es como ahora seré Katy Perry y cantaré a los cuatro vientos I kissed a girl and I like it, ni siquiera le devolví el beso pero me dio un poco de pesar quitarla.
Cameron se rió.
-Bueno al menos no tengo que preocuparme con que las mujeres también te conquisten y me ganen.
-¿Qué? -Dijo Sophia sorprendida.
Cameron también abrió los ojos dándose cuenta de lo que dijo.
-Nada.
Sé quedaron callados y casi parecía como si la tensión crepitara entre ellos.
Como Sara no dijo nada coherente decidieron que dormiría en la casa de Sophia, llegaron a su destino y acostaron a Sara en la cama de Sophia; a petición de Cameron, Sophia tomó unas cobijas y las llevo a la sala ya que Cameron también dormiría en un sofá y mientras que Sophia dormiría en el otro.
Los sofás estaban puestos en L y por la forma en la que se acostaron, sus cabezas quedaban cerca.
-¿Sabes por qué no quería que remataras a un monstruo? -Sophia negó con la cabeza aunque todo estaba oscuro, aun así Cameron respondió como si la hubiera visto negar- Porque al tocar al monstruo, este te transmite emociones, si el monstruo no fuera una mujer a quien mataron sino alguien que se suicidó, tú podrías querer suicidarte luego. Es peligroso para ti, pero estás tan metida en tu mundo que, aunque lo creas así, en realidad no piensas en los demás. ¿Qué sería de tu tía dónde te suicidaras? ¿O qué pensará de ti en este tiempo que pasarás estando trite y apagada? Se culpará.
-Gracias Cam, si que sabes como animar a alguien.
-No estaba pensando en animarte, estaba tratando de que vieras las cosas como son y mantengas los pies en la tierra.
-Ok, hasta mañana.
Sé quedaron callados y pasaron casi 30 minutos hasta que durmieron.
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¡Holaaaa! Chicos como saben inscribí CLO a los wattys, así que vengo a decirles que si quieren ayudarme pueden votar por Twitter tuiteando con el hashtag #MyWattysChoice junto con el link de CLO y si quieren pueden poner mi usuario que es @AStoryReader.
Espero la haya gustado este capítulo, dejen un comentario y voten.
Aah antes de que se me olvide, bajaron las lecturas, ¿hay algo que les moleste? ¿Se aburrieron de la historia? ¿Qué es? Díganme para dejar de hacerlo :(.
Un beso de monstruo.