×~Aprender A Sentir~×

×~Aprendí a Sentir~×

La habitación estaba tranquila, con la suave luz de la lámpara que iluminaba el lugar mientras la película seguía reproduciéndose en la pantalla. Amy y Josh estaban acostados en la cama, casi en silencio, disfrutando del momento. El mismo ambiente que había estado presente cuando Finn llegó a la casa, el mismo rincón donde todo había comenzado a cambiar, y a la vez, parecía que todo volvía a su curso, aunque de una manera distinta.

Finn, sin embargo, no parecía tan concentrado en la película. En lugar de eso, se movía inquieto entre los dos, como si su curiosidad por el vientre de Amy estuviera ganando su atención. Con cuidado, se acercó y puso su oreja contra su barriga, como si intentara escuchar algo. Su cola comenzó a moverse lentamente, como si estuviera absorbiendo todo lo que sucedía en ese momento.

Amy lo observaba con ternura, pero sin interrumpirlo, disfrutando de la cercanía de Finn. Al verlo tan cerca de su vientre, algo en su interior se suavizó. Finn, de alguna manera, parecía estar reconociendo esa nueva conexión, una conexión que había estado ausente por un tiempo. La vida dentro de Amy era algo que Finn no comprendía por completo, pero parecía intuir que algo estaba cambiando.

De repente, con una delicadeza que sorprendió a Amy, Finn tomó una sábana y con su boca, se la puso suavemente sobre el vientre. Como si de alguna manera, esa era su forma de mostrar protección o cariño, su manera de cuidar a la nueva vida que crecía allí. Luego, sin pensarlo, se recostó sobre el muslo de Josh, buscando su calidez, su protección.

Josh, con una sonrisa ligera, acarició la cabeza de Finn, como si quisiera transmitirle todo el cariño y la tranquilidad que él también sentía. Finn parecía estar más calmado, como si finalmente pudiera entender lo que estaba sucediendo a su alrededor. No había palabras entre ellos, solo el suave roce de las manos de Josh acariciando a Finn y el murmullo de la película de fondo.

Amy, aunque aún enfocada en la pantalla, no podía evitar sonreír al ver esa escena. A pesar de todo lo que había sucedido, algo en su corazón se suavizó al ver a Finn tan cerca de ellos, como si de alguna manera, todos estuvieran en su lugar, como una familia que finalmente comenzaba a sanar y a adaptarse a los cambios. Era un momento de calma, una pausa en medio de las turbulencias, un momento de unión silenciosa.

Finn, con la cabeza descansando sobre el muslo de Josh, parecía estar más tranquilo, casi como si supiera que su lugar en ese hogar, aunque incierto a veces, estaba siendo aceptado, finalmente. Y así, en ese pequeño y tranquilo instante, todo parecía estar en su lugar.

La noche avanzaba, y la película en la pantalla se acercaba a su final, con las luces tenues llenando la habitación de una atmósfera cálida y tranquila. Josh y Amy se acomodaron juntos en la cama, acercándose para descansar después de un largo día. Finn, delgado y más bajo que ambos, vio su oportunidad y con pasos silenciosos se metió entre ellos, encontrando su lugar en el centro de la cama.

La sábana suave los cubría a los tres, pero Finn se envolvía completamente en ella, como si buscara la seguridad y el calor que sólo podía encontrar estando tan cerca de sus dueños. Josh lo observó con ternura y, sin dudar, comenzó a susurrarle cosas al oído.

—Hey, pequeño… todo está bien ahora, ¿sí? —murmuró Josh, mientras pasaba los dedos con suavidad por el cabello y la oreja de Finn. Finn cerró los ojos lentamente, como si aquellas palabras fueran lo único que necesitaba para calmarse.

—Sabes que no importa lo que pase, siempre estarás con nosotros. Te cuidaremos, aunque a veces no sea fácil, aunque no lo entiendas… —continuó, su voz apenas audible, pero lo suficientemente cálida como para hacer que Finn moviera ligeramente la cola bajo la sábana.

Amy los observaba en silencio, con una mano descansando en su vientre y otra en la espalda de Finn, brindándole su propio gesto de consuelo. Finn, a pesar de no entender completamente las palabras, parecía captar la intención detrás de ellas. La seguridad, el cariño, la promesa de un lugar donde siempre sería bienvenido, estaban presentes en cada susurro de Josh.

La habitación estaba en calma, y el suave ritmo de la respiración de los tres se sincronizaba, creando un ambiente de paz. Finn, envuelto en la sábana y rodeado por el calor de sus dueños, comenzó a quedarse dormido. Era como si, en ese momento, entre ellos no existieran las heridas del pasado ni los miedos del futuro, sólo el presente, donde todos podían sentirse juntos y en casa.

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Autor:

Se me agarran que viene otro libro de esto 😈

Gracias por leer y el apoyo ❤️