Capítulo 30: Psicoanalizado...

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…Así es, la vida me ha golpeó duro, pero también me ha regalado personas valiosas como tú, Jackson y Gabriela…
 
…Desde ese día las agujas del reloj se mueven más lento que antes y cada segundo parece una eternidad…
 

Jeremías:
En nuestros constantes estudios sobre las conductas humanas y como estas se adaptan a las diferentes situaciones y procesos por los cuales pasa el individuo, nos hemos topado en el capo experimental con personas con trastornos sorprendentes de su conducta inicial, es decir, ellos poseían una conducta pasiva y psíquicamente relajada que hoy en día han perdido debido a los golpes que el destino le ha dado y por lo que han tenido que adoptar estados de autodefensa para no mostrar su debilidad mental, es por ello –me dice Erich– que los adolescentes en las escuelas y liceos se comportan de una manera agresiva debido a que esta es una forma de ocultar lo que realmente sienten y sus problemas del hogar, como por ejemplo, maltrato verbal, psicológico y físico por parte de sus padres y/o familiares, ellos lo reprimen y lo transforman en agresividad para mostrar su dominio con los compañeros más débiles mental y físicamente.
 
Erich tiene mucha razón en lo que dice y va de acuerdo con lo que Freud catalogo como histeria.
 
Yo doy fe de eso, pues viví el maltrato y la burla por parte de mis compañeros, en especial por Francisco un “compañero” del liceo que se burlaba de mí, lo odiaba con todas mis fuerzas, sus insoportables carcajadas y sus burlas humillantes porque yo soy huérfano, eso me sacaba de quicio y muchas veces sentí deseos de matarlo y de matarme a mí mismo para acabar con todo eso, pero gracias a Dios no lo hice, aprendí a seguir viviendo, caminar con el dolor.
 
Y así han hecho muchas personas con vidas desgarradas por el filo de la desgracia que intentan recoger los pedazos rotos de sus almas.
 
Lo que más me inspira y alienta a seguir adelante es el tesón y la constancia con la que seres a los cuales consideré incapaces de proseguir, intenta e intentan sin cansarse superar su situación de abandono en la que están pues tienen algo que los motiva: Su familia.
 
Pero… ¿Quién es mi familia?
Nadie sobre la tierra lleva mi sangre en sus venas, hoy mis amigos han adoptado la postura de una familia en la cual nos brindamos el apoyo y el amor que el destino o Dios o… no se quien más podría haberlo hecho… nos quitó sin pedirnos permiso, intentamos cruzar juntos la frontera del dolor.
 
—Erich, ¿Cuánto dolor crees que el alma puede soportar? —interrogo a mi amigo, el más destacado de la clase. Sé bien de sobra que seré tiene una respuesta para todo.
 
Estamos en el aula y el resto de los chicos se han ido dejando todos los pupitres hechos un desastre.
 
—Sabes, es interesante esa pregunta —se acomoda en su asiento como si se dispusiera a realizar una consulta psicológica—, lo primero que tengo que decirte es que…
 
—Jajajajaja, espera, espera —Le interrumpo para hacerlo rabiar— ¿no creerás que esto es como una consulta psiquiátrica o sí?
 
—No, para nada, jajaja, pero bien que te hace falta —bromea a su vez—. Como te decía, el ser humano puede soportar 42 unidades de dolor, las mujeres durante el parto llegan a resistir hasta 52 unidades…
 
—Woow, sorprendente Erich.
 
—Claro, claro. Lo más interesante es que se soporta más dolor cuanto más en riesgo está la vida. Nos aferramos a la vida de forma instintiva.
 
—Pero… esto es físico… ¿Qué pasa con nuestra alma? —Le pregunto muy interesado.
 
—Te diré, desde mi no tan humilde opinión el dolor es algo psicológico, psíquico que se transmite desde nuestro subconsciente y se refleja en nuestro cuerpo a modo de acto reflejo.
>> El alma para mi, aunque ha habido mucha discusión sobre el tema. Es la psiquis, nuestra consciencia, que piensa y decide, es por ello que el dolor se genera no solamente por algo físico, sino que más bien por dificultades, heridas y complejos que experimenta nuestra alma.
 
—Exactamente Erich, yo pienso que el dolor es relativo, ya que hay casos donde lo que causa dolor a algunos, es fuente de placer para otros…
 
—Tenemos el caso del sadomasoquismo, que el ámbito sexual produce placer a algunos pero dolor a otros, Jeremías.
 
—Me encanta conversar contigo sabes, siempre que te escucho Erich me llevo más conocimiento —Le elogio palmeándole el hombro.
 
–Y tú no te quedas atrás mi amigo, eres súper inteligente —devuelve el elogio.
 
—No más que tu amigo, próximo Summa cum laude.
 
—Gracias por considerarme de esa forma. Desde que te conocí te has vuelto no un amigo, sino familia.
>>Recuerdas cuando llegaste al albergue, ¿Cuántos años tenias? 17 mas o menos si mal no recuerdo. Yo tenía unos 23 en ese momento, y te veía tan mal, que creía que no podrías enfrentarte a esta bulliciosa cuidad, eras un niñito asustadizo jaja.
 
—Tienes razón, cuando llegué al refugio era súper inmaduro y débil.
 
—Pero mírate ahora, todo un hombre, 22 años y lleno de conocimiento, metas y una prominente carrera por delante.
 
—Así es, la vida me ha golpeo duro, pero también me ha regalado personas valiosas como tú, Jackson y Gabriela.
 
—Esoooo… jaja Gabriela, mira el tono en que lo dices —son saca en tono pícaro dándome un golpecito en el hombro.
 
—No, para nada, es solo una amiga.
 
—¿Quién sabe amigo, quién sabe? —Me anima Erich.
 
Gabriela…
Nahhh!!
 
La veo solo como una amiga, ella es callada, claro que es muy bella. Simple pero bella.
 
Ha sabido ganarse mi amistad, pero nunca la he visto como algo más.
 
Yo soy más atrevido aunque también solitario, ella es tan tímida que no me atrevería a acercarme sentimentalme, me han herido y he herido tanto que un nuevo amor no está en mis planes.
 
Ese Erich siempre buscándome novia.
 
Hasta la propia Gabriela ha bromeado sobre la posibilidad de que busque el amor.
 
Al comienzo de nuestra amistad me retaron a que charlara con otra de las vendedoras que pasaban cada mañana por la plaza.
 
Claro que me opuse y no tuvieron éxito.
 
Pero quedo el gusanillo de la curiosidad.
 
Sin que ellos superan me acerqué algunos días después y quedamos para vernos en otro lugar.
 
Charlamos un poco, pero me pareció vacía y superficial.
Solo logre robarle un beso.
Pero no me interesó.
 

 
 
Jaime:
Q

ue rápido pasa el tiempo ya han pasado 17 años desde aquel doloroso día en que abandoné a Jeremías y hui de mi país buscando una salida para mi horrible dolor.
 
Nunca olvidaré esos momentos junto a Jeremías, esos recuerdos que aunque son pocos me han servido de aliento, desde ese día las agujas del reloj se mueven más lento que antes y cada segundo parece una eternidad, me reprocho a mí mismo que soy un cobarde, porque no pude afrontar mi destino y preferí huir, de mi mente no sale la promesa que no pude cumplirle a Alicia, mi amada Alicia:
 
 
Jaime escúchame, debes prometerme que cuidaras de Jeremías ¡Promételo! dijo Alicia melancólica.
 
Está bien Alicia, te lo prometo dije consolándola.
 
¡Jaime…!
 
 
Cuanto me arrepiento de no haber sido más fuerte y cumplir con mi palabra, aquel quejido, aquel llamado ¡Jaime…! ¡Jaime…! ¡Jaime…! ¡Jaime…!, me despierta cada madrugada desde hace 17 años, 17 dolorosos años de pena que he tenido que pagar, atormentado con cada recuerdo del pasado.
 
Pero solo los que viven mueren porque los que ya están muertos no pueden volver a morir y, yo… yo ya voy camino al seol; han pasado tantos años desde que abandone a Jeremías cuando apenas era un niño, en ese tiempo yo era inmaduro y solo actué por el impulso de la ira, del rencor, hoy en día me doy cuenta del gran daño que le he hecho por algo que él no provocó, sin embargo ya es bastante tarde para enmendar mi error espero solamente que él si haya podido perdonarme y viva feliz junto a su tía Mery quien fue también una víctima más en todo esto.
 

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⏰ Última actualización: Nov 16 ⏰

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