El Sr. de la oscuridad & yo

Capítulo 17: Forjando el Poder del Equipo

Con las armas y armaduras recién forjadas por Orgryn, el grupo decidió que era momento de probar sus límites. Kaelion sugirió realizar una práctica intensiva en un terreno cercano al herrero: un campo rodeado de colinas y bosques, ideal para maniobras y simulacros de batalla.

Antes de iniciar, Kaelion tomó el liderazgo, su voz calmada pero firme resonando entre ellos.

—Nuestro enemigo no es solo poderoso, sino estratégico. Si queremos sobrevivir, cada uno de nosotros debe ser más que una pieza individual. Necesitamos funcionar como un solo organismo, anticiparnos y cubrirnos mutuamente.

Kaelion designó a Dorian y Lyra como sublíderes de los dos grupos principales: guerreros y arqueros.

Dorian, con su temple y experiencia en combate cuerpo a cuerpo, asumió el liderazgo de los guerreros. Su enfoque era el trabajo en equipo, enseñándoles formaciones cerradas para maximizar la defensa y el ataque.

Lyra, con su agilidad y precisión, lideró a los arqueros, entrenándolos para disparar en movimiento y mantener una distancia estratégica mientras cubrían a los guerreros.

Estrategias y entrenamiento intensivo
Kaelion dividió al grupo principal para enfrentar simulacros de batalla:

Vorthan entrenó con Dorian, aprovechando su tamaño y fuerza para enseñar cómo abrir brechas en las líneas enemigas. Vorthan, con su maza imponente, mostraba cómo los golpes bien dirigidos podían desestabilizar al enemigo más formidable.

Ágata y Lyra combinaron sus habilidades, sincronizando ataques rápidos con movimientos evasivos. Lyra, desde la distancia, protegía a Ágata mientras esta atacaba a corta distancia con sus dagas.

Aiden y Eliana, por su parte, trabajaron en fortalecer su vínculo y descubrir nuevas habilidades.

(...)

Kaelion supervisaba cada detalle, haciendo ajustes y señalando errores. Aunque la práctica era agotadora, todos sabían que los preparaba para lo que vendría.

Durante un simulacro, Lyra lanzó una ráfaga de flechas encantadas hacía un grupo de guerreros liderado por Dorian. Sin pensarlo, Eliana extendió su mano, y un escudo dorado brillante apareció alrededor del grupo de Dorian, deteniendo las flechas en el aire.

Todos se detuvieron, mirando el escudo con asombro.

—¿Cómo hiciste eso? —preguntó Dorian, mirando a Eliana con incredulidad.

—No lo sé... simplemente lo sentí —respondió ella, todavía sorprendida por lo sucedido.

Kaelion estudió el escudo con interés.
—Este poder está directamente vinculado a ti, Eliana. Es un don increíble, pero también tiene un precio: si alguien logra herirte mientras mantienes este escudo, todo podría colapsar.

—Entonces, debemos proteger a Eliana a toda costa cuando lo use —añadió Aiden, con determinación en sus ojos.

El entrenamiento reveló más habilidades únicas dentro del equipo, especialmente entre Aiden y Eliana:

Fusión de Sombras: Aiden y Eliana descubrieron que, al combinar sus energías, podían transformarse en una sombra gigante que abarcaba a todo el grupo. Esta forma era ideal para emboscadas y ataques masivos, pero requería un alto grado de sincronización y drenaba mucha energía.

Destellos de Luz: Ambos aprendieron a generar explosiones de luz que cegaban temporalmente a los enemigos cercanos, una ventaja crucial en el combate contra las sombras.

Escudos físicos: Además del escudo protector, Eliana podía crear pequeñas barreras físicas para proteger aliados individuales o bloquear ataques específicos.

Curación de Sombras: Vorthan, al ver a Aiden concentrarse en la energía de las sombras, notó que podía utilizarla para sanar heridas menores. Aunque no era tan efectivo como la magia de Yelindra, proporcionaba soporte adicional en combate.

Armadura etérea: Dorian descubrió que podía imbuir su armadura con energía mágica, dándole una resistencia temporal casi impenetrable.

La advertencia de Kaelion:

Kaelion reunió al grupo al finalizar el entrenamiento, su expresión grave.

—Eliana y Aiden, su vínculo y sus poderes son extraordinarios. Pero eso también los convierte en el mayor objetivo de Malrick... Si él descubre lo que son capaces de hacer, concentrará todos sus esfuerzos en eliminarlos antes de que puedan usar este poder contra él.

El grupo se miró, comprendiendo la gravedad de la situación.

—Entonces debemos asegurarnos de que no sepa nada hasta que sea demasiado tarde —dijo Lyra, con determinación.

(...)

Esa noche, Eliana tuvo un sueño revelador. Se vio junto a Aiden en la batalla final. Ambos sostenían armas imbuidas con el acero estelar, y juntos atacaban el Nexo, destruyéndolo en una explosión de luz pura que desintegraba a las sombras y restauraba el equilibrio en el Reino.

Al despertar, compartió el sueño con Aiden, quien sintió un renovado sentido de propósito.

—No importa lo que se interponga en nuestro camino —dijo él, tomando su mano—. Si eso es lo que viste, lo haremos realidad.

Con las habilidades del equipo reforzadas y la visión clara de su misión, regresaron al taller de Orgryn para obtener las armas y armaduras definitivas. El herrero los recibió con una sonrisa cansada pero satisfecha.

—Han llegado justo a tiempo —dijo, señalando un conjunto de armas y armaduras resplandecientes, imbuidas con la esencia del acero estelar—. Esto no solo los protegerá, sino que también les dará la fuerza para enfrentarse a cualquier sombra, incluso a las más poderosas.

El equipo observó con asombro las obras maestras de Orgryn. Cada pieza parecía irradiar poder, una promesa tangible de esperanza en la batalla que se avecinaba.

(...)