Novia por contrato

Capítulo 29

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Las chicas salieron del baño después de recomponerse, caminando juntas hacia el reservado donde sabían que estaban los chicos. El ambiente en la discoteca seguía vibrando con música fuerte y luces que parpadeaban al ritmo del bajo, pero las tres apenas lo notaban, estaban más enfocadas en lo que las esperaba.

Cuando llegaron al reservado, Louis estaba inclinado sobre una copa vacía y Liam sentado con los brazos cruzados. Pero Niall no estaba.

Mar fue la primera en notarlo. - ¿Dónde está Niall?

Liam, siempre el más responsable del grupo, les respondió mientras se enderezaba en el sofá: - Dijo que iba a asegurarse de que Luke haya salido. No creo que tarde mucho, pero quería estar seguro.

Cler apretó los labios, sintiendo un nudo en el estómago. Aunque aún no quería admitir lo que sentía por Niall, saber que se había ido por su culpa la hacía sentir incómoda.

Mía, en cambio, no podía disimular su inquietud. Se dejó caer junto a Liam en el sofá, sacando el móvil para mirar la pantalla nuevamente. No había mensajes ni llamadas de Harry. - ¿Crees que Harry está bien? - preguntó a Liam, intentando mantener la voz neutral, aunque la preocupación era evidente.

Liam le dió una palmadita en el hombro, intentando calmarla.- Harry sabe cuidarse, seguro que está bien. Quizá se ha retrasado por algo, pero llegará.

Louis, que hasta ese momento había permanecido en silencio, levantó la mirada con una expresión de fastidio evidente. - ¿Por qué a todos os importa tanto si llega o no? - murmuró con un tono cargado de sarcasmo. - A mí tampoco me responde los mensajes. Si no quiere venir, que no venga.

El comentario de Louis hizo que todos lo miraran, pero ninguno dijo nada. Sin embargo, la reacción fue diferente en Mía, qué sintió que el pecho se le encogía aún más. ¿Por qué no le respondía Harry? Esa noche había reunido todo el valor que tenía para decirle lo que sentía, y ahora no sabía si tendría siquiera la oportunidad de hablar con él.

- Tal vez solo está ocupado - dijo Mar, rompiendo el incómodo silencio. Su tono era neutral, pero sus ojos traicionaban una pizca de preocupación. Aunque su relación con Harry no siempre era la más cercana, sabía que algo debía haber pasado para que estuviera ausente sin avisar.

Cler, intentando cambiar el foco de la conversación, miró hacia Liam. - ¿Seguro que Niall está bien? Digo, después de lo que nos ha contado Mía...

Liam asintió, aunque su ceño fruncido indicaba que no estaba completamente tranquilo. - Sí, Niall estará bien. Es más tonto de lo que parece, y no creo que Luke tenga el valor de quedarse aquí después de lo que ha pasado.

Mía apoyó la cabeza en el respaldo del sofá, mirando al techo como si buscara una respuesta en las luces que giraban arriba. En ese momento, su móvil vibró en su mano, y lo desbloqueó con rapidez, solo para ver que no era un mensaje de Harry, sino una notificación sin importancia. Suspiró frustrada, dejando caer el móvil en su regazo.

Louis, que había estado observándola de reojo, no pudo evitar soltar un bufido. - Si te ignora así, tal vez no vale tanto la pena, ¿no crees?

Mía lo miró con incredulidad, sintiendo que las palabras le pesaban como una piedra. Antes de que pudiera responder, Mar intervino, lanzándole una mirada de advertencia a Louis. - No es el momento, Lou.

Louis se encogió de hombros, pero no dijo nada más. En su interior, la mezcla de celos y frustración se hacía cada vez más difícil de ignorar.

Liam, intentando calmar el ambiente, se levantó y dió un paso hacia la puerta del reservado. -Voy a buscar a Niall. No debería andar solo por ahí después de todo esto. Vigiladme a este. - dijo mirando a Mar y Cler mientras señalaba a Louis con la cabeza.