Un amor no superado puede llevar a tantas cosas... Especialmente si tras él vive el sentimiento de rencor por un rechazo.
¿Hasta dónde sería capaz de llegar en busca de venganza? O... si realmente puede llevar a cabo su plan.
Después de todo... Dond...
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Al día siguiente, nada más despertarse se cambió y salió a dar una vuelta en un trote suave, le gustó la sensación de la brisa mañanera por lo que al volver a casa y aún con todos al parecer dormidos se dio una ducha.
Al momento de cerrar el agua escuchó ruido fuera en clara señal de que por fin se habían despertado. Se vistió con algo cómodo y bajó, encontrando la mesa armada le sonrió a todos, sentándose en tranquilidad tras desear unos buenos días.
-¿Tienes planes para hoy?- cuestionó Jihyo, Seungmin algo extrañado asintió.
-Luego de estudiar con Minji me voy a la casa de mis amigas, tenemos algo programado.- explicó en lo que, nuevamente, era una mentira pero ya no le daba ni un poco de cargo de consciencia.
-¿No te gusta alguna de tus amigas? Sales mucho con ellas.- dijo divertida la mujer, tratando de no hacer un ambiente pesado en la mesa ya que parecía que nadie se había levantado con demasiadas ganas de hablar.
-No, no. Las conozco tanto que definitivamente no podría tener nada con ninguna.- dijo divertido. -Además ellas dos son pareja.- ante esa mención ella asintió, entendiendo más la situación.
-Oh... ¿Y hay alguien que tenga tu corazón? Eres joven y apuesto, has de tener muchas chicas detrás.- mencionó.
"Tu marido el primero" rio ante sus propios pensamientos, carraspeando antes de hablar.
-Ahora no estoy enfocado en buscar una relación seria, uno que otro pretendiente habrá, pero realmente no estoy interesado en ello.- al terminar de hablar sus ojos dieron con Bang por lo que todos los ojos de la mesa cayeron en el mayor, quien con la boca llena frunció el ceño.
Visiblemente nervioso hizo contacto visual con los otros cuatro en un intento de saber qué estaban viendo, Seungmin finalmente volvió a hablar, dejando ir una risa al momento de ver a Chan en ese estado.
Sinceramente le hacía sentir poderoso el tener a Bang en ese estado de vulnerabilidad, le encantaba llevar el control de la situación e incluso con esa mirada brindada por Chris sentía la súplica de sus orbes. Deseaba tenerlo en ese estado por muchísimo más tiempo, que colgara de un hilo toda su estabilidad emocional.
Era claro que Chan aún no confiaba demasiado en él por el simple y sencillo hecho de que cuando cosas así pasaban se ponía muy nervioso, esperando que de la boca de Seungmin no saliese nada que fuera capaz de perjudicarlo.
-Si Chan era lo suficiente observador podrá recordar algunos de mis momentos dorados, era sinceramente una sensación... ahora que lo pienso, estaba en el grupo de los bonitos, éramos cuatro amigos que siempre llamaban la atención.- dijo divertido.
El mayor por su parte parecía aliviado, y nuevamente todas las miradas estaban en el de hebras naranjas.
-Éramos muy inteligentes, y siempre teníamos nuestros rollitos por lo bajo... ¿Lo recuerdas, Chan?- cuestionó y nuevamente la atención estaba en el de oscuras hebras, extremadamente nervioso carraspeó antes de responder.
