Un amor no superado puede llevar a tantas cosas... Especialmente si tras él vive el sentimiento de rencor por un rechazo.
¿Hasta dónde sería capaz de llegar en busca de venganza? O... si realmente puede llevar a cabo su plan.
Después de todo... Dond...
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Tras ella había una niña de cabellos en un castaño casi negro, piel pálida y unos ojos muy similares a los de Seungmin.
Kyujin trató de deshacer el contacto de sus manos para evitar malentendidos con la familia del pelinaranja pero la fuerza del mismo no la dejó escapar por lo que escondió sus manos cuando otra voz hizo aparición.
-¿Quién es, Yoojung?- cuestionó una mujer algo mayor y Seungmin mordió sus labios nervioso.
La recién llegada abrió su boca en lo que sus ojos dieron con el chico. Sus ojos se llenaron de lágrimas en menos de cinco segundos y tras pasar unos pocos más viéndolo lo atrajo a sus brazos, con fuerza lo abrazó y Kim había olvidado la última vez que recibió afecto de su madre, pues era muy bien sabido que no era la más cariñosa del mundo.
Con su mano libre la rodeó, sentía como lloraba en su hombro y respiró tranquilo al estar en sus brazos.
-Quiero matarte a golpes, Seungmin.- dijo ella sin soltarlo aún.
-Perdón, mamá.- dijo, sintiendo un peso menos en sus hombros.
-Voy a matarte, en serio.- repitió mientras aún lloraba en su hombro, las otras dos veían en silencio todo.
-¿Dónde está papá?- cuestionó, ella tomaba una ligera distancia.
-Llegará en un rato... ¿Yoo, no te acuerdas de tu hermano?- cuestionó en dirección a la más pequeña de sus hijas.
-Sí...- dijo, no muy segura.
-¿Quieres un abrazo, mi niña?- cuestionó, por fin dejando la mano de Kyujin respirar.
Ella se acercó a él y lo abrazó por la cintura con fuerza.
-Tardaste mucho, Seungminnie-oppa.- dijo ella.
-Lo sé, lo siento mucho, princesa.- dijo y besó su cabeza con cariño y ella se abrazó más a su torso.
-Un gusto...- la señora Kim habló hacia Kyujin, quien se había dado cuenta de que aún no se presentaba.
-Disculpe, mi nombre es Kyujin, soy compañera de la promoción de Seung.- dijo y ella asintió entonces.
-Oh, tú eres la chica que iba un año adelante, ¿No?- cuestionó a lo que ella sintió. -Encantada de conocerte.- dijo y la más joven asintió.
Los invitaron a pasar y entonces Seungmin se enteró de que sólo dos de sus hermanos vivían ahora en la casa.
Junkyu aún estaba estudiando en su habitación, estudiaba mucho para su carrera por lo que el tiempo que pasaba encerrado en silencio total era sagrado, sin embargo le hizo saber que a la hora que llegaba su padre él bajaba para que comiesen juntos.
Seungmin les contó a ambas lo que había sido su vida, Kyujin estaba sentada a su lado tomando el té que la mayor había preparado.
-Tu novia es muy bonita, Oppa.- dijo la menor con una sonrisa.
